Capítulo 3: Persecución

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-Kirishima Kotaru, un placer. Soy la pareja de Eijun. -Dijo sin quitar su gélida mirada de los jugadores. Todos se quedaron en shock viendo al chico frente a ellos y haciendo que las sonrisas de superioridad de Miyuki y Kuramochi desaparecieran. No lo conocían pero algo era seguro, no les agradaba.

De repente el pelinegro recibió un golpe en la cabeza, que hizo que todos salieran del shock.

-¿Pareja de quién? -Le miraba el castaño frunciendo el ceño. Eso relajó por completo a sus compañeros

-Pero, Eijun... -Le dijo Kirishima abrazando al chico, susurrándole algo que sólo él pudo escuchar.

-¡Cállate, idiota!, para empezar ya te dije que no lo recuerdo en absoluto. -Sawamura separó a Kirishima de él abruptamente. Todos seguían sin decir nada, viendo extrañados a los dos chicos como si de un espectáculo se tratase, tratando de comprender qué demonios había entre ellos.

-Pero hoy al levantarnos dijiste que me darías una oportunidad...

-Sí, una oportunidad para conocernos, no de andar, idiota. -Seguía el castaño con un tono de fastidio.

-Eijun... -El pelinegro ya lo iba agarrar cuando Sawamura lo detuvo.

-Kotaru, -El pelinegro se alegró de inmediato cuando escuchó su nombre en los labios del castaño, así que se detuvo de inmediato. - me duele la cabeza y el cuerpo, pero quiero entrenar de una vez, así que, por favor, ya vete. -Esto lo había dicho con un ligero sonrojo y viendo al suelo, tratando de evadir la mirada de sus senpai y amigos.

-Porque te sientes así es que deberías de haberte quedado más tiempo en mi casa, al fin y al cabo es por mi culpa, por... -El pelinegro no pudo seguir hablando, pues Sawamura le tapaba la boca completamente sonrojado y sintiendo todas las miradas de sus compañeros en él.

-Kotaru, para empezar no me dijiste que me quedara un rato más y ya, dijiste que me mudara contigo, -Aunque Sawamura estaba hablando bajo, sin llegar a susurrar, sus compañeros no le oían a excepción de cierto trío, que era el que más cerca estaba del par, que seguían escuchando, sorprendidos, aquello sin interrumpir. - algo completamente imposible. Me duele la cabeza por culpa de su terquedad, tanto tuya como de Wakana y sus primas, y de lo último... ya te dije que no recuerdo nada, pero el dolor dice que en verdad no me mentiste y sólo por eso acepté el conocernos más, porque no quería ser cruel contigo, pero ya te dije claramente que me gusta alguien más. ¿Por qué insistes? -Miyuki se sonrojó levemente y, Kuramochi y Haruichi lo voltearon a ver de reojo.

-Ya te lo dije, Eijun, desde que te vi me enamoré de ti. -El pelinegro seguía hablando en un tono normal, así que fue escuchado por todos. Sawamura puso una cara que decía, claramente, que ya se había cansado de escuchar lo mismo una y otra vez.

-Como sea, ya te dije que nos seguiríamos viendo, ¿no?; y por cierto, controla tu tono de voz, sólo harás que Kuramochi-senpai me haga de nuevo todo su repertorio de llaves. -Le pidió lo último mientras temblaba un poco al recordar la última vez que lo hizo, y sentir la mirada del peliverde en él nuevamente.

-Pero, sólo podremos vernos una vez cada semana... -Dijo triste Kirishima, pero haciendo lo que le castaño le pidió.

-Lo suficiente para que comprendas que no estás enamorado de mí, sólo confundido por lo que pasó ayer.

Sea lo que sea a lo que se referían, el trío sólo estaba cada vez más confundido y con más curiosidad con lo que haya pasado entre esos dos; uno le preguntaría y sólo esperaba que su amigo le fuera a contar todo sinceramente, otro planeaba qué llaves usar para que el castaño cantara como pájaro, y el último planeaba hacer uso de su puesto de capitán y cátcher titular para enterarse de lo que sucedía entre ellos; pues no le gustaba nada lo que parecía, diciéndose a sí mismo que estaba así de preocupado y enojado con la situación porque le preocupaba que eso afectara el juego del pitcher.

¿Por qué nos complicamos? (DnA#04)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora