nervios a flor de piel.

253 27 7
                                    


Narra Dean:

Estoy muerto.

Henry no a querido dormir anoche y Cas estaba muy cansado como para estar al pendiente.

Como padre "responsable" me quede vigilando que le molestaba, ahora las ojeras y el cansancio me atacaban y lo peor es que no quiero colapsar de nuevo.

– tierra llamando a Dean.

– ¿eh?– Charlie estaba pasando una mano frente a mi pero ni cuenta me di– lo siento Charlie es que estoy muy cansado.

– ¿dura vida de padre?.

– si, Henry no quiso dormir y tuve que quedarme con el.

– ¿y Castiel?– preguntó Jo.

Era la hora del almuerzo así que descansamos un poco y charlabamos, les comente sobre mi pequeño y las chicas gritaron de gusto.

– aun esta muy cansado por el parto, solo pasaron dos semanas, el doctor dijo que iba a tomar dos o tres meses en recuperarse por completo.

– pobrecito, la verdad que lo entiendo– Lisa dejo su taza de lado para hablar– cuando tuve a Ben sentí que me iba a morir del dolor pero valió completamente la pena.

– oye Dean ¿cuando podremos ver a tu pequeña bendición?.

– cuando quieran Crowley, solo avisenme cuando van– respondí sarcástico, esa es mi manera de ser.

– muy chistoso ardilla, bueno, sera mejor volver al trabajo– se giro para volver a su escritorio– vamos Meg, admite que me extrañas.

– sigue soñando que te perdonare.

– bueno, lo intente.

– ¿quien te dijo que eso serviría?.

– mi madre, cuando fui a ver si seguía viva, la desgraciada se río de mi situación y me dijo que dijera eso.

– cuanto amor hacia tu madre.

– vamos Dean, solo le devuelvo el favor de dejarla vivir como me lo dijo a mi, era una alcohólica y prostituta, nisiquiera recuerda quien de todos era mi padre.

A Crowley ya no le afectaba decirnos sobre su pasado, es más lo decía de una forma graciosa para levantarnos el animo.

– de acuerdo Crow solo estábamos jugando.

– hablando de parejas tengo un problema.

♣•••♠•••♦•••♥•••♦•••♠•••♣••

Narra Castiel:

Me siento mal por Dean, tuvo que quedarse con Henry para no molestarme mientras dormía, ¿se puede pedir hombres mas guapo, amoroso y generoso en el mundo?.

La respuesta es bastante obvia, claro que no se puede pedir algo mejor, Dean es perfecto con sus imperfecciones y defectos, ese es el hombre del que me enamore y eso no va a cambiar.

Otro llanto, mi bebe despertó, me levante del asiento para ir a verlo. Se encontraba en la habitación que compartía con Dean para comodidad de los dos.

Estaba acostado con su cara rojita del llanto, tampoco puedo pedir un cambio de mi hijo, es tan hermoso, apuesto a que será rubio como su padre ya que sus pelucitas sobresalientes de la gorrita son muy claras, es claro que es rubio.

–Esperó que tengas los mismos ojos que tu papi– susurré al tenerlo ya en mis brazos– hoy le daremos un respiro a tu padre por que no quiero que se nos muera... no sin antes darme otro bebe.

Te amo como eresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora