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*Steve*

- A tú izquierda.

Enseguida giré y pude ver un anillo de luz amarillo, una especie de portal.

En el pude ver el gran paisaje wakandiano, paisaje que tanto echaba de menos. Y de el pude divisar tres siluetas saliendo. Dos mujeres a cada lado de un hombre.

El rey de Wakanda se hizo más visible junto a su hermana y su guardia real. Enseguida pude ver sobrevolando el cielo nublado, a Falcon.

Enseguida mis esperanzas volvieron en si. A cada persona que salía de ese portal mi corazón se aceleraba más y más.

Necesito ver a Bucky y ver que está bien.

Comenzaron a aparecer muchos más portales. De ellos salían personas, héroes, naves, etc. Todos dispuestos a luchar por la libertad y por la justicia.

Incluso pude llegar a ver a Pepper con un traje de Ironman especialmente diseñado para ella. Cruce miradas con ella y simplemente nos sonreímos. Sabía que ésta sería una lucha difícil y era consciente que está podría ser la última vez que nos veamos.

Giré sobre mi mismo para poder encontrarme con Thanos de nuevo, mientras a mis espaldas estaban todos mis compañeros de batalla. Y así es como se juntaron tanto gente nueva, como conocidos, como amigos, como familia.

- ¿Steve?

Mi cuerpo entero se paralizó y mi corazón comenzó a latir con intensidad.

Me volví lentamente rezando por qué no fuera un sueño o mi imaginación me estuviera haciendo una mala pasada.

Cuando le di la espalda al ejército alienígena, pude encontrarme con esos ojos que tanto echaba de menos.
Me acerqué muy despacio a él, por un momento olvidando lo que ocurría a mi alrededor. Me moví con una lentitud inmensa, como si con cualquier movimiento brusco él se asustaste y saldría huyendo.
Tragué saliva antes de alargar mi mano hacia su mejilla y acariciarla por encima de su vello facial. Pude ver como el de pelo largo acunaba su rostro en mi palma con una sonrisa y ojos cerrados.
Llevé mi mano hasta su nuca y me di la libertad de acercarme más a él.

- Bucky...

Fue lo único que pude pronunciar antes de atrapar su rostro con ambas manos. Mientras él posaba sus manos a cada lado de mi cadera.

- Eres tú...- sentencié yo con un hilo de voz.

- Claro que lo soy. Dios mío Steve, lo siento tanto por haberte dejado...

Enseguida lo acallé con un beso. Un beso profundo en donde quise transmitirle lo mucho que lo añore en este tiempo. Él sin rechistar, continuo.

Al separarnos por la falta de aire, me aleje de él para volver a ver esos preciosos ojos color café que tanto eche de menos.

- Perdonado...

Por fin él sonrió.

Cuánto necesite ver esa sonrisa de nuevo.

Él solo una risita apartando la mirada y yo lo miraba con una cara de bobo tremaenda.
Volvimos a mirarnos a los ojos y yo suspiré con pesadez y muy despacio.

- Te amo Bucky.

- Te amo Steve.

Volvimos a sonreír para después sobresaltarnos con un estruendo proveniente de los escombros del gran edificio antes construido ahí.

De ahí salió un enorme Scott.

Entonces me sorprendí al ver como Bucky miraba a su alrededor, con cara de amargura y desesperación. Acaba de darse cuenta lo que estaba ocurriendo.

- Bucky...- intenté hablar para tranquilizarlo, pero él se adelantó.

- Steve no quiero seguir luchando, no más. Estoy cansado de esta vida. De seguir peleando. No quiero.

- Bucky, yo también estoy cansado pero debemos luchar y vengar a los que se fueron.

- ¿Qué hicieron ellos por mí? Nada. Nada bueno, todo lo contrario. Hicieron que mis peores pesadillas se hicieran realidad.

- Bucky, sino lo haces por ellos, hazlo por mí. Prometo que esta es la última a la que nos vamos a enfrentar.

- No prometas cosas que no puedes cumplir Steve.

- Claro que puedo cumplirlo y lo haré. Confía en mí.

- Confío en ti, en quien no confío es en los demás. ¿Qué pasa si mueres? ¿Qué pasará si lo hago yo? Estoy seguro que no podemos chasquear los dedos de nuevo y no podría vivir con ello Steve, por favor vámonos.

- Bucky, no puedo abandonarlos ahora. Por favor, confía en el equipo. Hazlo por las personas que hemos perdido y quieren venganza.

Él finalmente suspiró y aceptó ser participe de la lucha.

Me separé de él para ir al frente y guiar al equipo a la victoria definitiva.

- ¡Vengadores!- grité ya con todo el equipo detrás mía. Alargue el brazo y noté como el Mjonlir venía y si posaba en mi mano.- Reunios...

Ahí comenzó todo y a la vez acabó.

Cuando las cartas importaban/Stucky || #Wattys2020Donde viven las historias. Descúbrelo ahora