27 No es una opción

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Sirenas, un dolor punzante en la cabeza y un ligero hilo de sangre escurriendo por su frente. Algo vibrando en su bolsillo con el tono de llamada que especialmente le había puesto a Jimin, pero su cuerpo duele como para siquiera sacarlo del bolsillo en su chaqueta. Jadea de dolor.

-¿Jungkook?- nada -¿Jungkook? Maldición, di algo.

Su vista se aclara y logra ver al menor con la cabeza apoyada en el respaldo sin muchas fuerzas.

-Jung...- se abstiene de llamarlo, las manos del pelinegro formadas en puños volviendo pálidos sus nudillos y feas lágrimas llenando sus mejillas. Él conoce esa expresión, dolor puro en su máximo punto, incapaz de poder hablar.

-Qu-e estén...

-¿Qué?

-E-ellos.- lo nota querer mirar hacia atrás y su rostro desfigurándose en una mueca.

Entiende inmediatamente y desabrocha su cinturón, importando poco su malestar físico al recordar que no iban solos.

Suspira en alivio al ver que su hermano y el otro chico se abrazan fuerte con los cuerpos inclinados al frente, lo que los cinturones de seguridad les permite, luciendo unos cuantos rasguños y nada más.

-Están bien. Ellos- pero al ver a su copiloto no puede seguir, más que ver como se desvanecía en su lugar, víctima de ese dolor que no puede compartir con él. Del mismo que sintió por días y noches, ese que lo llevó a conocer al doctor Seokjin.









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Sus pulmones se sentían colapsar, las pisadas fuertes y a pasos presurosos de los demás detrás de él; entrar a esa torre era peor de lo que pudo imaginar en el transcurso de la ida hasta ahí.

-¡Hyung!- gritó Baekhyun a su lado, el médico que ya se hace a la vista en la recepción, llevando varios papeles consigo -¡¿Qué sucedió?!

-Calma todos, no pueden hacer escándalo aquí.

-¿Cómo me pides eso luego de lo que dijiste?

-Intenta tranquilizarte, Jeon.

-A la mierda eso. Quiero verlo.

-Hey- la voz de Jimin salía temblorosa, producto del ligero llanto que lo invadió al escuchar la noticia una hora atrás -, déjale hablar.

-Gracias.- todos se mantuvieron en silencio y Seokjin aprovechó para explicar -No fue tan grave. Otro sujeto los golpeó desde atrás, salieron del camino directo a una arboleda y se estrellaron. Los niños están bien, sólo rasguños. Están en mi oficina justo ahora.- se volteó a ver al pelirosa de labios abultados -Min está bien, se le hizo una herida en la frente pero ya lo han curado en urgencias y...

-¿Qué hay de él?- los únicos tres presentes se mantienen mirando al mayor que parece no gustarle tener que lidiar con ese tipo de cosas, porque así era. Para Kim Seokjin tener que explicar eso no era su fuerte tratándose de Jungkook.

-El dolor volvió.- Taehyung se sintió excluido al ver como los otros dos suspiraban rendidos -Al no ejercer presión para mantenerse en una posición, el golpe empujó de más los daños en su columna. Al ser un golpe certero y de impacto en esa magnitud, posiblemente logró mover uno que otro tornillo. Cuando la ambulancia llegó, él estaba inconsciente.

-Fue demasiado.- los ojos de Baekhyun picaron por recordar ese martirio.

-Me temo que si. No se crearon heridas mayores, pero tuvieron que sedarlo para que resistiera el viaje.

Mikrokosmos / TaeKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora