Niño Bien | En Pausa

5.

Emilio.

Eran las 5:30 am y Romina había entrado a mi habitación, comenzó a brincar sobre la cama, intentando despertarme.

- Venga enano, es hora de que te levantes, tienes que ir a la escuela - la escuché decir, solté un quejido pero abrí poco a poco mis ojos para que éstos se acoplaran a la luz del cuarto.

- Quítate de encima, por favor. - me senté y la miré - ¿Tú también irás? - Romi solo me sonrió burlona y negó con la cabeza, claro idiota, ella salió de la universidad hace un año.

- Tomaré un baño, gracias por despertarme Romi - le sonreí y tomé mis cosas para ir al baño y tomar una ducha corta, coloqué un poco de música y me adentré en el agua, perdido en el sonido, notando que no estaba listo para comenzar una nueva vida aquí, revolví mi cabello y enjuague mi cuerpo, no quería llegar tarde el primer día de clases y menos en una escuela nueva.
-Yo no aprendí a soltar amores
Yo no aprendí a dejarte ir
Eras una apuesta de largo plazo
Lo que construimos... - Tarareaba la canción, era importante para mí, con esa canción comenzó a llamarme la atención la música, gracias a Romi para ser exactos, tomé mi toalla y salí a la habitación para cambiarme lo antes posible me acerqué a la ventana y a través de ella divisé la silueta de aquel chico que me topé el día anterior, en un abrir y cerrar de ojos, él volteó a verme, sólo sonreí y al ver su rostro pálido sonrojarse, me di la vuelta y caminé hasta el baño una vez más, me cambié y bajé a desayunar apresurado.
- ¿Tienes todo listo enano? - Romi volvió hasta donde estaba y se sentó junto a mi mientras yo evitaba mirarla tomando un poco de Jugo.
- Todo listo, ¿Me llevarás tú? - volteo mi vista hacia ella levantando una ceja.
- Obviamente Enano ¿Quién más lo haría? - golpeó mi brazo y se hecho a reír.
Terminé mi desayuno, llevando los trastos sucios a la cocina y dejándolos sobre el fregadero, camine devuelta y subí a lavar mis dientes 6:35 AM demonios ya es tarde, entre a mi habitación, coloqué algo de loción, tome mi cartera y mi mochila llevándola hacia mi hombro y bajé en busca de Romi, ya estaba esperándome en el auto, subí en él e inmediatamente arranco con dirección a la Preparatoria.

Joaquín.

Luego de una madrugada llena de sentimientos encontrados, eran las 5:45 AM cuando desperté, ya era tarde y rápidamente tome mis cosas para que a la ducha, me tomó menos de 10 minutos y salí tome mi ropa interior, la coloque y me acerque a mi buró cerca de la ventana, pude ver que alguien me observaba, era él, Emilio me estaba viendo, lo saludé a lo lejos y sentí mis mejillas arder, calma Joaquín, calma, sólo es un chico.

Bajé a prisa y saludé a mamá y a Ren, me senté en la mesa y devoré mi desayuno 6:40 AM tenía que salir de casa YA, no llegaría de no ser así, me levanté y corrí a mí habitación para lavar mis dientes y tomar mi mochila, tome un poco de perfume, me despedí de mi familia casi gritando y salí corriendo de la casa, no llegaría tarde mi primer día, no lo haría.

Tras una no tan larga carrera mire el reloj 6:50 AM Demonios, ya estaba en la escuela, entré y me dispuse a buscar mi salón de clases cuando a lo lejos pude verlo, se veía tan lindo buscando el aula indicada, no pude evitarlo y me acerque a él.

- ¿Necesitas ayuda con eso? - dije colocándome a su lado.
- No, gracias, creo que encontré el aula - contestó sin voltear a verme.
- Hum, bien, soy Joaquín, mucho gusto, creo que no nos habíamos presentado. - al mencionar mi nombre, casi inmediatamente volteó a verme, sonrió y extendí mi mano.
- Me temo que no, yo soy Emilio y el gusto es mío. - estrecho mi mano en forma de saludo.
- Al parecer tenemos la misma clase. - dije mirando mi horario.
- Es bueno tener a alguien conocido en una clase nueva ¿No lo crees? - volví a verlo, percatandome de que ya no se encontraba junto a mí, miré el reloj por última vez 6:57 AM, rápidamente me adentre en aquel salón, lo busqué con la mirada y me senté junto a él, es un chico distraído al parecer, no notó mi presencia hasta la primera toma de lista.

- Nikolas Caballero
¡Presente!
- Joaquín Bondoni Gress
- Presente, dije levantando mi mano.
Volteó a verme y nuevamente nuestras miradas chocaron un instante, antes de ser interrumpido por la toma de lista de la profesora.
- Emilio Osorio Marcos
- Presente - regresó su vista al frente.
La clase comenzó, Literatura pintaba a ser de mis materias preferidas, habría que esperar a la siguiente clase para saberlo.

Un pequeño descanso comenzó, y yo opte por salir a la cafetería por un poco de agua, había olvidado mi almuerzo y mi botella en la casa, por las prisas al salir rápido, fue entonces cuando al estar en la fila esperando mi turno todo comenzó a darme vueltas, algo no andaba bien las pastillas, se habían quedado junto a mi almuerzo en casa, esto no terminaría bien, y cuando menos lo pensé, me desvanecí, y antes de caer al suelo sentí que alguien me tomó en sus manos.

- ¡Hey! ¿Te encuentras bien?

Poco a poco abrí mis ojos, encontrándome con unos color miel.

- Hey, háblame por favor ¿Está todo bien?

Me perdí unos segundos...

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Woolaaa. Ya volví jaja, ya se me hizo costumbre actualizar en la madrugada, espero les esté gustando la historia, en verdad, recuerden que pueden dejar sus comentarios, y díganme si creen que la historia va lenta o está bien, se los agradecería mucho.
También para avisar que la siguiente semana comenzaré mi semana de exámenes, intentaré actualizar dos o tres veces, pero mi prioridad es sacar las materias para dedicarme a escribirles mis dos meses de vacaciones jaja.
Sin más por el momento, me despido, les deseo una excelente noche.

Con musho amor, Dj Baby Benz, o Pau, como gusten jaja. 🐇💚