LONDON [New York Pluss]

18: i've missed you.

La historia era esta:

El día que Christopher terminó conmigo, se reunió con su padre en un caro edificio de Londres. Estaba listo para todo lo que le había prometido un año atrás: un futuro.

William Mason era un hombre de palabra. Le pagó una cara universidad a su hijo y le dio una plaza en la empresa que tenía. También le dio un apartamento en su edificio y un auto para que se transportase. La única cosa que el señor Mason quería a cambio, era que su hijo no echara a perder todo.

Dejó su casa, a su hermano y su vieja camioneta de vuelta en nuestra calle en los suburbios de Londres. Andrew estaba muy enojado con su hermano mayor, así que optó por no dirigirle la palabra de nuevo, ni perdonarlo.

Christopher ya no se preocupó más por eso, Andrew estaría  bien con Darren y él podría iniciar su nueva vida. Aunque cuando comenzó a trabajar y ganar su propio dinero, le mandaba una parte siempre a su hermano, dejándoselo a Darren cuando Andrew se negaba a a aceptarlo.

La nueva vida de Chris fue un cambio muy brusco y algo que él, se dio cuenta, no había esperado en absoluto. Pues su padre comenzó a llevarlo a fiestas y reuniones, a presumirlo como si no lo hubiera abandonado por toda su vida. Chris tuvo problemas con sus medios hermanos, hijos legítimos de William Mason y su esposa. Enfrentó peleas con los verdaderos herederos al imperio de su padre, haciendo ver a Chris solo como un bastardo.

Aún así, su padre lo defendió, pero eso era algo que él nunca había pedido.

Luego el señor Mason comenzó a presionarlo. Las mejores notas, el mejor de clase si era posible. Luego le presentó a un sinfín de chicas omegas de su edad, inquiriendo que fuera buscando una buena esposa para ser un buen alfa y tener una familia.

(Esa historia resulta familiar ¿no?)

Christopher no quería eso. En realidad, descubrió muy prontamente que no quería un apartamento caro, ni una buena y costosa universidad. Tampoco quería el aparatoso auto que le había dado su padre, ni los "lujos" que poseía su apellido. Tampoco había llegado a quitarle importancia a sus "hermanos" ni quería marcar a una omega bonita para pasar la vida con ella.

Pronto se descubrió extrañando a su hermano, más de lo que él imaginó. Extrañaba la sencilla vida que tenía de vuelta en los suburbios. Extrañaba el sonido del viejo motor de la pick up. Extrañaba cuando la vida era más fácil.

Me extrañaba a mi.

Un día decidió escaparse por solo un momento de su nueva vida, vino hasta nuestra calle, fue hasta mi casa y cuando intentó encontrarme, yo ya estaba muy, muy lejos de allí.

Estaba muy enojado consigo mismo. Había perdido todo lo bueno que alguna vez tuvo y se odiaba por ello. Ñ
Así que, sin nada más que hacer, sin ninguna otra idea que pudiera salvarlo, Chris comenzó a seguir los consejos de su padre.

Hasta que conoció a una chica en una fiesta. Hija de otra adinerada familia. Chelsea, no pregunté su apellido, por realmente nunca importó cuando se volvió su esposa. Aunque nunca la marcó, incluso cuando su padre lo obligó, él no la amaba, así que ¿por qué iba a hacerlo?

Actuaron como una pareja feliz durante un tiempo. El necesario para que ella le diera dos hijos a Chris. Dos Mason más en la lista. El primero, Benjamín Mason y cuatro años después, a Margaret Mason, con lo que Chris pudo encontentar a su padre.

Aunque nunca pudo contentar a la chica. Se divorciaron poco después del nacimiento de Maggie y la chica se había fugado un día, sin decir adiós. Christopher no hizo nada para detenerla. Porque había encontrado el verdadero amor de su vida, ahora todo tenía un sentido, algo que le daba las ganas de continuar.