Capitulo 20. Llegamos

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Ya faltaban dos horas para llegar, Jade había estado manejando las ultimas dos horas. Perrie ahora era la copiloto y la que controlaba el estéreo. Lady Gaga sonaba desde hace ya rato.

Las cuatro estaban de verdad cansadas. tantas horas de viaje las tenia agotadas, pero eso no les quitaría el buen humor. Y bueno, la risa de Jesy no era nada silenciosa, y era tan conatagiosa, Jade casi pierde el control por desviar la vista del camino.


《《》》


-Jesy, ¿has visto alguna vez la casa?- pregunto Jade concentrada en el camino. Habían abandonado la carretera hace media hora, y ya conducía entre calles.

-No, la verdad, nunca había vendo a Nueva York.

-El GPS dice que faltan solo un minuto para llegar- dice Perrie mirando el móvil y la calle -¡Para!, ¡Para!- pide de golpe y la camioneta se detiene frente a una casa con fachada café.


Todas bajaron del auto y se pararon frente a la casa, el imponente portón negro las dejo boquiabiertas.

Jesy se acerco a la puerta con las llaves y la abrió. Todas pasaron detrás de ella, no sin que Jade antes asegurara la camioneta. El jardín estaba descuidado, el pasto estaba disparejo y muy alto,  de no ser por que pequeño camino marcado con cemento no habrían podido pasar. La castaña abrió la puerta oficial de la casa, esta rechino al abrirla, no pudieron evitar toser al entrar, el polvo gobernaba el piso y las padres. Había un sofá muerto en el livin de la derecha, con una manta sucia encima, y sobre la chimenea otro trapo, y al lado de la puerta un perchero negro y alto.

Se quedaron paradas cerca de la puerta observando el lugar, Jade miro la cara de decepción de sus amigas, y de inmediato busco como ayudarlas a sentir mejor. Dio vuelta y busco en el pasillo, había 3 escobas, un recogedor y dos cubetas.

La pequeña se quito el suéter y lo colgó en aquel perchero, amarro su cabello con ligas que traía en su brazo, tomo las cubetas y las lleno de agua, mientras las cubetas se llenaban les dio una escoba a sus amigas.

-Yo sacudo, ¿quien quiere trapear?- les dijo con una sonrisa sosteniendo las escobas. Perrie le sonrió y tomo una escoba.

-Yo barreré-tomo una escoba y corrió hacia las escaleras, miro el interruptor, lo presiono y la casa se encendió,una risa inocente salio de ella y subió corriendo.

Lee tomo la otra escoba y salio corriendo hacia el livin.

Jesy solo hizo un puchero, se quito los lentes  y la chamarra.

-¿Si no lo hago yo quien?.- Jade le sonrió y le dio una cubeta llena de agua y un trapo.


《《》》


Cuatro horas ya habían pasado desde que comenzaron a limpiar. El piso de arriba estaba limpio, no como quisieran, pero al menos ya no había insectos por todos lados y polvo dándoles nidos. Del piso de abajo solo faltaba la cocina. Jade había sido valiente y lavo los baños, no le pareció nada agradable.

Habían terminado, y estaban exhaustas, y no tenían en donde sentarse, y el sofá que estaba ahí, las cuatro habían optado por que se iría a la basura.


-Creo que hicimos un buen trabajo- dijo Jade -Solo falta bajar las cosas del auto.


Las 4 ayudaron a bajar sus cosas poco a poco. Al subir a la segunda planta,  cada quien tomo una habitación, sin discutir.

Lee llego con sus maletas y cajas, su habitación era la primera del pasillo,  jamas se percato de lo triste que era una habitación vacía. Jade le había regalado un saco para dormir, le prometió seria probicional. Lo coloco en el centro de la habitación, coloco sus ropa en el armario que ya estaba instalado. Le gustaba el color azul del lugar, pero también le deprimía un poco, esto no iba a ser fácil, y se sentía débil, no se creía capaz.

-Hola- dijo Perrie tocando la puerta -¿como vas?- pregunto mientras pasaba.

-Creo que bien- la morena soltó un suspiro y froto su cara con sus manos.

-Eso no sonó muy convincente- la rubia se acerco a ella -¿Que te agobia?

-No se si pueda hacer esto- se recargo en el armario y bajo la mirada

-¿Y por que no?.

-Me siento... es una sensación, estúpida, siento miedo, y ademas, no me siento fuerte para enfrentar esto- Puso las manos en su cara y negando con la cabeza.

-Entiendo como te sientes, pero, ¿sabes algo?, yo también, no me siento preparada, pero las tengo ustedes, están aquí conmigo, la emoción de que tengo un nuevo inicio con ustedes, y eso para mi es mas fuerte que el miedo, y ustedes me hacen fuerte- Lee la miro con una sonrisa a medias.

-Siempre sabes que decir.

-La verdad no, solo te entiendo, y también entiendo que eres de las mujeres mas inteligentes que conozco, y que eres capaz de mucho- Perrie extendió sus brazos hacia Lee y le sonrió -¿Quieres un abrazo?.

La morena soltó una pequeña risa y se acerco a ella y la abrazo, igual que Jesy, se escondió en su cuello.

-Te quiero, Pezz- le dijo en un pequeño sollozo, intentaba no llorar, pero, era demasiado sensible.

-Yo también te quiero, Lee.- Perrie hizo un puchero no visible para su amiga.


Leigh-anne reprimió y saco de si los sentimientos negativos, si las tenia a ellas. Nada mas importa.


En eso, Jesy se asomo por la puerta del cuarto de Lee, y las vio abrazarse.

-¡Yo también quiero un abrazo!- empezó y ambas chicas se separaron para verla y le extendieron los brazos- ¡Jade, ven acá!- exclamo antes de llegar hasta sus amigas.

Se escucharon pasos de como Jade corría por el pasillo y al llegar asomo la cabeza en la habitación y las vio abrazarse.

-Que cursis son- les dijo acercándose a ellas, las 3 la jalaron para abrazara. -¡Las amo!- dijo en un pequeño grito -Aun que apestemos a sudor






No digas mi nombre || Little DirectionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora