EXIMIA DONUM - YOONMIN/VKOOK

MISIÓN

En la entrada de aquella posada se encontraban ocho jóvenes, los cuales cinco de ellos estaban equipados con armas camufladas entre sus ropas de pueblerinos.

- ¿Tienen todo lo necesario?- Jungkook no era muy emocional con las personas, a excepción de Taehyung, pero sus amigos de casi toda una vida estaban yendo a cumplir una misión que ciertamente tiene una alta probabilidad que no regresen.

- Eso creo.- Respondió Vernon.- Tranquilízate galleta, cumpliremos la misión y regresaremos sanos y salvos.

- Yah Jeon, harás que me ponga sentimental.- Woozi intento bromear, pero la verdad era que el chico estaba asustado. Él daría todo por su reino y no dudaría en dar su vida por ello, pero la simple mención de la posibilidad de no volver lo hacía pensar en cuanto extrañaría a su hermano y a su padre.

- No quiero sonar como un llorón, pero realmente espero volver a verlos- Jiyoung sonrió ligeramente.

- Lo mismo digo- Daniel, que la mayor parte del tiempo estuvo callado, se acercó a Jungkook y le dio un abrazo.- Cuídate amigo y cuida muy bien de los príncipes.

- Lo haré, lo prometo.- uno a uno fue despidiéndose.

Por otro lado Yoongi y Namjoon miraban la escena en silencio, el primero estaba al tanto de la partida de su hermano y el segundo esperaba para dar las últimas instrucciones antes que den comienzo a la misión.

- Confió en ti Jihoon, sé que saldrán airosos y traerás de vuelta a el príncipe.- Yoongi se acerco a propinarle un ligero abrazo para luego mirarlo con orgullo. El menor sonrió en respuesta.

- Lo haré, cuida de Jimin y no lo arruines en mi ausencia, él me gusta como cuñado.- su hermano se sonrojo sutilmente y luego le propino un golpe en el hombro.

- imbécil.

Con una señal por parte de Namjoon los cinco chicos se alinearon en frente suyo. Analizó sus apariencias, tenía que asegurarse que pasarían desapercibidos hasta su llegada al reino del sur, él realmente estaba muy seguro que su plan funcionaria y les estaba depositando toda su confiaba a esos chicos. Deseaba de todo corazón que regresaran sanos y salvos de aquella misión

- Es hora de partir.- anunció el peliverde. Los jóvenes asintieron y se subieron a sus caballos ya equipados con provisiones para una semana aproximadamente, o eso es lo que calculaba Namjoon.- Recuerden las instrucciones y sean precavidos.

- Lo seremos su maj-La mirada de advertencia de Jungkok le hizo saber a Woozi que casi metía la pata, estaban fuera de la posada y estaban expuestos, revelar la identidad del peliverde seria muy perjudicial.- hyung, nosotros nos haremos cargo.

- Eso espero.- Soltó un suspiro y prosiguió.- Protéjanse entre ustedes y no desconfíen de ustedes mismos, la unión será su mejor arma.- Y es que Namjoon tenia un mal presentimiento que florecia cada vez mas al pensar en la partido de aquellos jóvenes.- Y una cosa más, pase lo que pase no se enfrenten al escuadrón de Lugh, sin importar que fallen la misión, no lo hagan.- hablo fuerte y claro, estaba siendo muy estricto en cuanto a esas indicaciones.- ¿Entendido?

-¡Sí señor!

Con esas últimas palabras partieron hacia el reino de sur donde les esperaría una arduo trabajo y quizás alguno que otro lamento. Los tres jóvenes que quedaron en la entrada se quedaron observando sus siluetas hasta que las vieron desaparecer entre los árboles del bosque.

Al ingresar a la posada lo primero que lograron divisar fueron a los hermanos Kim llorando desconsoladamente mientras intentaban consolar fallidamente a un Jimin en igualdad de condiciones y a un Hoseok desesperado el cual intentaba hacerlos sonreír con su pequeña criatura y Daehwi, el cual también tenía un semblante triste.