Epílogo

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Ya ha pasado una semana desde ese deseo, tanto Luis como yo estamos bastante tiempo con Cristina, ella esta como un programa de asistente en el móvil, eso no nos preocupa, Cristina es igual que siendo humana, solo que en lugar de hacer movimientos, te muestra imágenes de lo que haría, nuestros padres creen que es un regalo de Félix, claramente lo hablamos con él antes y acepto ser la tapadera.

Luis ahora es más tranquilo y no causa tantos problemas, cuando mis padres volvieron y vieron el cambio de actitud de Luis, no sé como describirlo, me hicieron cientos de preguntas de que había pasado para que cambiará, yo les dije que hubo un pequeño accidente, y después de eso y una charla, él comprendió que tenía que empezar a comportarse, porque obviamente ninguno de los tres vamos a contar lo que pasó por el deseo de Luis, ni siquiera se lo he dicho a Naiara mi mejor amiga, además de que a mama le daría un infarto si se entera de todo, a pesar de que ninguno perdió ni una vida.

Sabéis, no solo el deseo de Luis se cumplió, mi deseo también se cumplió, nuestros padres como recompensa por habernos portado bien durante su viaje, le regalo a Luis un videojuego, no os imagináis la cara que puso Luis, nuestros padres fliparon, y a Luis solo se le ocurrió decir que iba a dejar los videojuegos por una temporada, si es que vuelve a jugar, pero lo segundo solo me lo dijo a mí, yo solo podía reírme de la cara tan graciosa que tenía, a lo cual me gane una mirada fulminante por su parte. Y a mí, me regalaron un microscopio, llevaba queriendo uno durante meses, ese fue el deseo que pedí a la estrella fugaz, un microscopio para mí, y ahora lo tengo, claramente no soy tan egoísta como para no dejar a mi familia jugar con él, pero es mío que quede claro.

Además no solo nosotros vimos la estrella fugaz, nuestros padres también la vieron, mi padre deseo que el contrato saliera bien, porque las posibilidades de éxito eran escasas, y lo consiguió, pero claro él no creo que fuera obra de la estrella fugaz, no os imagináis las ganas que tuve de decirle que sí había sido la estrella fugaz, pero resistí, nuestra madre sin embargo la observo, pero no pidió un deseo, lo siento por ella.

-Alix, Luis, Félix ha llamado quiere hablar con vosotros.

-Ya voy mama - digo y salgo del cuarto, cuando bajo Luis ya esta al lado de mama con el teléfono de casa.

-Toma, aunque Luis ha mostrado grandes cambios, prefiero que cojas tu el teléfono.

-Ey - se queja Luis.

-De acuerdo mama - digo intentando contener la risa - hola Félix, ¿qué pasa?, ¿por qué quieres hablar con nosotros?

-¿Luis esta ahí?

-Aquí estoy.

-Al parecer tú no eres el único al que la estrella fugaz le concedió su deseo - dice Félix.

-¿Qué deseaste? - pregunte ansiosa.

-Como sabes estoy en el equipo de baloncesto de mi universidad.

-Sí, me lo contaste.

-Pues bien, pedí que me seleccionaran para los partidos entre universidades, algo que me parecía muy difícil de conseguir...

-Lo has conseguido, enhorabuena - le digo sin dejarle acabar.

-No solo eso, sino que seré titular estrella.

-Eso es increíble - dice Luis.

-Pues sí, por eso quería que lo supierais.

-Sabes, no solo Luis y tú conseguisteis vuestro deseo.

-¿Tú también?

-Sí, y también papa, al parecer el también pidió un deseo a la estrella fugaz.

-¿Qué pedisteis?

-Papa poder cerrar un contrato y yo un microscopio - digo muy feliz - pero nuestros padres no saben que la estrella fugaz realmente cumplió su deseo y los nuestros.

-Es mejor así, les daría un ataque, aunque no fue para tanto.

-Eso no es lo que decías en el juego - se burla Luis, seguramente si Félix estuviera aquí fulminaría a Luis con la mirada.

-Creo que los tres sabemos que tuvo su dificultad, pero pudimos resolverlo en familia, y eso es lo más importante - concluyo.

-Coincido contigo, ¿cómo se ha comportado Luis?, ¿Cuál fue la reacción de vuestros padres?

-Se ha portado muy bien, y nuestros padres no se lo podían creer, me hicieron cientos de preguntas a cerca del cambio.

-No me sorprende, también llamo para deciros que en diciembre, cuando den las vacaciones os haré una visita, espero no tener que pasar por lo mismo de la última vez.

-Eso espero yo también - digo en un suspiro.

-Iré a avisar a mama de que el mes que viene Félix nos hará una visita.

-Vale, gracias Luis.

-Adiós campeón - se despide Félix de Luis.

-Adiós Félix - y se fue.

-Cuando vengas acabaremos con nuestra charla.

-¿No la hemos acabado ya?

-No, fueron más de dos años sin vernos, estoy segura que aún no me has contado todo.

-Todo lo interesante sí, pero si quieres también te cuento lo aburrido.

-Por mí perfecto.

-¿Cómo os va con Cristina?

-Luis esta casi todo el tiempo con ella, el hecho de que ahora sea un programa, no nos impide poder comunicarnos con ella, es casi igual que si la tuviéramos aquí, además, Luis hizo una foto a la Cristina real y la puso de fondo de pantalla.

-Me alegra oír que lo lleva bien, y me da risa lo de la foto.

-A mí me parece tierno, bueno te dejo que quiero ir a merendar.

-De acuerdo, adiós Alix.

-Adiós Félix.

Colgué la llamada, coloque el teléfono en su sitio y me fui a la cocina, como le dije a Félix, voy a merendar que tengo un hambre feroz, en eso prefería el videojuego, necesitabas energía y por eso comias, pero no era por hambre en sí. A pesar de todo, fue un viaje muy interesante y divertido, que nos unió más, definitivamente, ¡menudo deseo!

¡Menudo deseo! *Completada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora