t r e i n t a y t r e s

1.8K 147 4
                                        


Mi hermana me observaba con cierta tristeza en su rostro, mordiendo su labio pintado de rosado y mirando hacia el suelo. Yo por mi parte me encogi en mi misma mirando alrededor sin saber que decirle.

- Yah. Estaré bien. - me atreví a decirle subiendo mi tono, me observo como si estuviera bromeando y negó con la cabeza.- Unnie...

- Mira, Min.- empezó con su sermón de hermana mayor y no me quedo de otra que escucharle mordisqueando mi labio inferior.- Estamos hablando de un psicópata que arrastra con todo lo que se interpone en su camino. Y Tú estás en el camino que está siguiendo.

- Ya.

- Y si no fuera por ti te hubiese pedido que terminaras con Taehyung, pero se que no lo piensas hacer. Y lo entiendo, pero debes empezar a preocuparte por ti misma. Al menos un poco.- su tono se había subido y estaba exaltada, reviste ver sus ojos cafés y me mantuve viendo el suelo con indiferencia . Realmente no me impresionaba que estuvo a punto de pedirme que  terminara con Taehyung, siempre ha sido una hermana mayor que se preocupa por mí. Pero yo estaba de acuerdo con que me estaba poniendo en peligro por él.

- Te prometo. Que intentaré no intrometerme mucho.- mis palabras lograron hacerle suspirar con fuerza. Miro hacia atrás viendo como poco a poco las personas entran al tren que los llevará de regreso a Seúl. Había tomado la decisión de irme antes de lo que había planeado ganándome un sermón de mis padres pero nada que nunca hubiese pasado, mi hermana por su parte me recordaba cada momento que podía lo peligroso que era ese hombre y que debía de cuidarme.

- Vete antes de que me arrepienta.- sonreí levemente tomando mi mochila, que por cierto termino un poco pesada por la comida que mi madre preparó con la excusa de que estaba en los huesos según ella.- Rápido.

- Adiós...- me despedí con la mano, mi hermana sonrió levemente como si no quisiera y me imitó. Le di la espalda encaminándome hacia el tren. Busque mi asiento y cuando llegue allí agradecí que fuese en la ventana ya que vi como mi hermana me observaba por una última vez y se iba.

Suspire en cuanto las puertas se cerraron, había recibido un mensaje de Sohye preguntándome por qué regresaría antes de lo planeado que lamentablemente no pude responder. TaeHyung no se había dignado de llamarme desde aquello mañana, dejé que mi cabeza se apoyara en mi asiento y cerré los ojos. Solo serían un par de horas y estaría en Seúl. Lista para buscarle pero sin decirle nada.

Al parecer el cansancio y las preocupaciones lograron hacerme pegar el ojo, y dormir parte del corto viaje hasta que sentí como alguien apretaba mi hombro con muy poca fuerza, como si estuviera llamándome.

Abrí los ojos con pesadez encontrándome con los ojos que me llamaban, frunci el ceño relamiendo los labios esperando que la chica hablará. Pero en vez de eso me entrego un papel que lo tomé con una mueca de confusión, la castaña se fue dejándome perpleja.

Cuando abrí el papel me sorprendí por la caligrafía, muy perteneciente a la de mi hermana. Me pregunté por qué no me lo había dado antes y opté por pensar que tal vez se le había olvidado y se había encontrado con esta tía para que me lo diera.

No pensaba decirte esto, pero te veo tan preocupada por ese chico que creo que debo hacerlo. Pero me debes una. El padre de Kim tiene una residencia en Seúl y seguramente se quede allí, al parecer la compro antes de volver a Corea. Pero solo te pido que ni se te ocurra ir sola, si me entero te golpearé, estúpida.

Di vuelta al pequeño papel encontrándome con una dirección, y por consiguiente guarde el papel en un bolsillo de mi pantalón.

...

Prendí la luz de mi departamento, cegandome un poco por la lucidez, Kiara pareció enterarse de mi llegada ya que no demoró en aparecerse con maullidos desesperados y a restregarse por mis piernas. Me doy cuenta que tal vez Sohye estuvo hace poco, ya que era la encargada de alimentar a la presa mientras que no estaba en Seúl.

Weirdo - Kim TaehyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora