Weirdo - Kim Taehyung

t r e i n t a y n u e v e

Admiro a TaeHyung desde la cama, sigo acostada mirándole fijamente sin despegarme de el en ningún momento y el lo sabe, simplemente se viste frente a mi casualmente ignorándome por completo, tomó una de las camisas que tenia en una de sus cajoneras, era negra y ancha y la pasó por sus brazos para finalmente cubrir su torso por completo. Estaba listo para irse y eso me ponía nerviosa. Bajé la mirada al sentir su mirada sobre mi y segundos después como se sentaba a mi lado, tomándome del mentón.

- Confía en mi, JungMin. Todo saldrá bien.- su tono me hizo saber de primera que se mentía a si mismo y a mi, nadie aseguraba aquello, el lo conocía mas que nadie en este mediocre y enfermo mundo. - Mmh, volveré pronto.- no respondí absolutamente nada, TaeHyung carraspeó y se acercó para plantar un beso que me supo a amargo en la frente. 

Me dió una ultima mirada antes de irse de una vez por todas de un portazo, todo fue instintivo, me levanté de un brinco y tome mis prendas del piso vistiéndome lo mas rápido posiblemente, mientras me colocaba el suéter me asome por la ventana y pude ver su figura caminando a zancadas largas por la calle.

Tomé mi móvil y salí corriendo del departamento, no quería que TaeHyung me viera por eso mismo cuando vi su espalda por las calles, pase de ser una desconocida y camine a varios metros alejados, lo había pensando durante toda la noche y definitivamente no dejaría a Taehyung y a su padre solos. Era una puta locura.

Recibí algunas miradas de las personas con las cuales me chocaba solo para no perder a Taehyung de vista, me móvil seguía apretujado entre mis dedos sintiendo que era lo único que me protegía. Cuando menos me di cuenta estaba exhausta ya llevábamos mucho tiempo caminando y Taehyung no se había dado cuenta de mi presencia. La gente desaparecía a medida caminamos lo que me dio a entender que estábamos cerca y lo comprobé cuando vi a TaeHyung mirar hacia los lados y entrando a un callejón, le seguí desde lejos y cuando me asome de reojo el ya había desaparecido. 

Bufé desesperada. 

Caminé intranquila adentrándome al callejón, estaba sucio y el olor era realmente desagradable.  Sentí mi sangre hervir y una extraña sensación me dij oque no había sido buena idea haberlo dejado ir. Una única puerta escondida de la multitud llamó mi atención, allí era.

No lo dude ni un solo segundo, pero cuando algo me dijo que entrará allí urgentemente no pensé absolutamente nada, toqué la puerta metálica un par de veces, me mantuve en silencio mordiéndome los labios con desesperación, una risa se escuchó como un eco molesto. La puerta se abrió y el padre de TaeHyung elevó ambas cejas al verme.

- Pero, mira a quien tenemos aquí, Taehyung.-la voz rasposa y burlona del padre de Taehyung me sacó de casillas, sentí la mirada del recién nombrado sobre mi. El hombre me dio un espacio para que entrara y lo hice bajo su atenta mirada.- ¿Que haces aquí, querida?- lo miré de reojo con un poco de desprecio, su falta modestia me jodía demasiado.

-Yo solo eh...Eh...- no tenía una excusa para estar allí, simplemente Taehyung me tenía preocupada. Busque la mirada de mi novio y la encontré, en una esquina mirándome con el ceño fruncido con brusquedad. Estaba cabreado y no solo eso el brillo de sus ojos me dijo que tenía miedo. Miedo de que yo estuviese aquí.

- Mierda, te dije que no vinieras. Nunca piensas en mi, joder. Jamás me escuchas, ¿Es tan difícil de hacer?.- abrí la boca atónita y sentí mis párpados picar por eso baje la mirada y me abrace a mi misma. El padre de Taehyung soltó una carcajada risueña y dio un apretón en mi hombro y empezó a caminar hacia Taehyung.- Vete.

- No. Deja que se quede. Quiero que le digas la mierda de persona que eres...-su expresión me dio vapor, enseguida miré a Taehyung relamiendome los labios, el castaño evadió mi mirada y enseguida supe que algo muy jodido me escondía.- Vamos, TaeHyung dile a tu hermosa novia lo que eres... antes de que se lo diga yo.