Capítulo 15

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TaeMin se encontraba en la biblioteca de su colegio. Era la hora del descanso y el lápiz se movía con habilidad sobre el papel, trazando letras que componían las palabras de un ensayo que no era suyo. Desde que supo que JinKi se había quedado sin trabajo, había decidido ganar algo de dinero vendiendo trabajos o haciendo encargos de tareas. La gente confiaba en él, tenía el mejor promedio de todo su grado, así que si TaeMin hacía la tarea, significaba buena calificación. A TaeMin no le agradaba estar haciéndole tarea a otros, pero no tenía de más. Además, cobraba buen dinero y con eso, podría ayudar a JinKi con los gastos.

—Hey, Taem. ¿No vas a almorzar?

—No. Estoy ocupado, JongIn —respondió el muchachito sin detener el fluir del lápiz—. ¿No estás con KyungSoo? —preguntó con un tono que le gustaría haber reprimido. Había sonado como si le reclamara algo, como si... Estuviera celoso. Por suerte, TaeMin pensaba que JongIn era muy bobo como para darse cuenta.

—Está con ChanYeol y no encuentro a Woozi por ningún lado, creí que estaría contigo —respondió el moreno sentándose al lado del castaño—. ¿Qué haces?

—El ensayo de artística para Jennie —responde TaeMin, dejando de escribir porque le dolía la mano.

—Oh —asintió JongIn, aunque hizo una pequeña mueca—. Ella se acerca mucho a mí últimamente y se hace bastante incómodo —dijo acomodando sus gafas que se deslizaban por el puente de su nariz. Dejó una barra de cereal cerca de TaeMin y le sonrió suavemente —. Me quedaré contigo y luego iremos juntos a clases, ¿de acuerdo? Bien.

Faltaba la última clase del día para que se pudieran ir por fin a casa. TaeMin solamente dijo un "gracias" respecto a la gallega que terminó abriendo y consumiendo poco después. Era lunes, TaeMin había despertado solo el domingo y no supo qué pensar por primera vez cuando vio aparecer a JinKi y JongHyun a eso de las ocho de la mañana. Sea lo que sea, sus maquinaciones se fueron cuando aclararon algo de lo que les pasó por la noche, omitiendo ciertos detalles. El domingo hubiese pasado con tranquilidad si la Señora Lee no de hubiese aparecido por la tarde con su nuevo novio. Ni les dejó almorzar porque los mandó a volar, sin siquiera caer en cuenta sobre JongHyun. TaeMin detestaba a su madre pero no iba a decir nada, la vieja bruja al menos había estado fuera y sin volver mucho a la casa últimamente, lo cual era de aprovecharse.

—Oye, TaeMin. Ven a mi casa hoy.

—¿Para qué? —preguntó alzando una ceja y mirando al moreno.

—Tenemos un trabajo para la siguiente semana, ¿lo olvidas? Cuando salgamos de clases vayamonos juntos. No vivo tan lejos.

—No creo que a tu mamá le guste que esté en tu casa. La última vez parecía que me quería matar. Creo que no le gusta que te juntes con nosotros.

—Para nada, tranquilo. Ella no estará hoy. Pediré a domicilio, hacemos el trabajo y vemos una película. ¿No te gustaría?

TaeMin se lo pensó. JongIn siempre se portaba amable con él y eso lo confundía bastante, además siempre mostraba esa tierna sonrisa y esos ojos bonitos tras los lentes de las gafas. Maldito cuatro ojos, pensó cuando aquel le sonrió como un cachorrito. Era bastante extraño, pero TaeMin sentía una rara atracción por aquel chico que parecía ser un niño de mami y además nerd.

Seguramente no ha dado su primer beso, pensó en una ocasión cuando le vio tener un tarro de desinfectante en el bolso y todo un paquete de cremas para distintos usos. Lamentablemente,TaeMin sabía que al moreno le gustaba otro. Uno muy cercano a él y bastante atractivo; KyungSoo era un chico muy lindo y comprendía que el moreno tuviera gusto por aquel, pues él en cambio era un adolescente flacucho y de cabello largo que parecía emo, además de su terrible personalidad. Por eso prefería mantener distancia con JongIn en lugar de hacerse más cercano (cosa que el moreno parecía querer conseguir).

Maniquí ♡ jongyu¡! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora