—Te lo juro, KiBum. ¡Pasó algo muy raro anoche!
—Ah vamos, JinKi. Estabas dormido, pudo ser un sueño.
El mayor bufó.
—¿Y cómo explicas que la sala estuviera hecha un desastre? —cuestionó JinKi con el ceño fruncido y los labios llenos de salsa de tomate.
—Quizás caminas dormido —respondió el rubio limpiándole la comisura al mayor para volver a sus papas fritas.
—Ah, KiBum —protesta el mayor cual niño al que no le creen una hazaña. Dio un mordisco a su hamburguesa doble con un puchero, manchándose de nueva cuenta la cara.
—Cielos, JinKi —se queja KiBum nuevamente pasándole la servilleta por la cara al mayor, el cual portándose así le parecía un niño a KiBum —. Escucha, incluso si no fue un sueño, pudo haber sido un pésimo ladrón que huyó cuando te despertaste.
—¿Por qué un ladrón haría un desastre con la nevera y el surtidor de agua? —cuestionó JinKi tomando gaseosa.
—Tal vez era un vagabundo —se encogió de hombros y siguió comiendo su ensalada.
JinKi se encontraba esa tarde con KiBum en la plaza de comidas de un centro comercial. Esa tarde no buscaría a TaeMin a la escuela puesto que la mamá de Woozi, como le decían sus compañeros, pasó a buscarlos ya que tendrían una de sus reuniones raras y espiritistas. Al parecer el nuevo niño iría con ellos.
JinKi compadecía al pobre.
—¡Oh, mira, hyung! ¡Ahí viene MinHo! —exclamó KiBum con una alegría que le estrujó el corazón d tristeza a JinKi.
¿Por qué él no podía ser la felicidad de KiBum?
—¡Hey! —exclamó el chico alto y moreno, sentándose junto al rubio, dándole un beso en la mejilla —. ¡Hola, mucho gusto! Me llamo Choi MinHo —se dirigió a JinKi con amabilidad y una linda sonrisa de comercial de pasta dental.
JinKi se forzó a devolverle la sonrisa amable, le dolía el pecho.
—Mucho gusto, MinHo. Yo soy Lee JinKi —se presentó el mayor, bebiendo de su gaseosa de cola para calmar sus entrañas que se contraían y eran un desastre por el tantas sensaciones.
«Ya está, JinKi. No tienes oportunidad» pensó con amargura, mirando al tipo bien dotado que se sentaba junto a su KiBum «Míralo, Lee, es muy alto, guapo y tiene un muy buen cuerpo... ¿Por qué KiBum querría a alguien como tú teniendo a una persona como él cerca? No, ¿por qué cualquier persona te querría a ti? ¿Alguien sin nada que ofrecer? Deberías olvidarlo».
«Pero no puedo...» respondía otra voz dentro suyo.
—Hyung, MinHo es la persona que te ayudó con el trabajo —dijo KiBum con una sonrisa señalando al moreno que tenía al lado.
«El dichoso MinHo » pensó con un suspiro nasal que disimuló con una mordida a su hamburguesa, aunque realmente se le había quitado el apetito.
—Oh, creo que recuerdo que lo mencionaste —asintió el mayor tras tragar lo que tenía en la boca—. Estoy muy agradecido por lo que hiciste, me estoy muy a gusto y se me adapta bien al horario de la universidad —agradeció JinKi con sinceridad. Después de todo, ese moreno era el responsable de que sus deudas disminuyeran y que su estrés y deberes redujeran.
—Es un placer, JinKi. KiBum me habla mucho de ti, así que se presentó la oportunidad de ayudarte y así lo hice —sonrió con esa dentadura que le dio una punzada de envidia a JinKi —. ¿Pero no es muy duro que trabajes y a la vez estés en la universidad? Debe ser pesado.
ESTÁS LEYENDO
Maniquí ♡ jongyu¡!
FanfictionLee JinKi tiene poco dinero, deudas, problemas familiares, a penas puede costear los gastos de la universidad y para completar debe hacerse cargo de su hermano menor, pero aún así siempre se muestra alegre. Sus problemas económicos mejoran cuando co...