𝑭𝑼𝑪𝑲𝑰𝑵𝑮 𝑱𝑬𝑹𝑲 ─ Gavin Reed

Cama

Advertencia: Capítulo con Smut, o sea +18

P. O. V Detective Thomson

Por un momento olvidé donde me encontraba, estaba tan perdida en el beso que literalmente había olvidado que estaba besuqueándome con Gavin Reed, aquel tipo que hace pocas semanas podía haber ahorcado con mis propias manos más cuáles ahora estaban acariciando su lacio cabello, Irónico.

En el momento que sentí como su legua se juntaba con la mía me di por vencido y supe que no había vuelta atrás, ya había llegado a tal límite de sentir tanto deseo por una persona que sabía que no iba a parar;

En cuanto sus manos se mantuvieron fijas en mis caderas, comencé a moverlas levemente por encima de su regazo siendo luego impulsadas y guiadas por sus mismas manos, aquel moreno de ojos claros también estaba de igual manera desesperado, tanto que sentí como hacía cierta presión para que mi cuerpo se frotase aún más con el suyo.

──Joder...──En mitad de aquel beso tan largo, se separó el castaño para poder respirar, pero aquello que había dicho había sonado más como un gemido leve.

Mientras más seguía con aquel movimiento más podía sentir como su miembro se hacía más notable de entre sus pantalones, sonrojada con tan solo pensarlo.

Y cuando menos lo esperaba, sentí como Gavin me tomaba de los muslos y me alzaba del sofá como si no pesará nada, a sí mismo vi como intentaba guiarme a mi habitación mientras no separaba sus labios de los míos.

──Uh... Gavin... ──Ya al entrar en razón, me separé ligeramente de su boca e intenté llamar su atención.

──¿Hm...? ──Dijo el oficial mientras comenzaba a besar con delicadeza mis mejillas y las comisuras de mis labios, así mismo como poco a poco entraba a la habitación y se acercaba a la cama.

──Quiero que te quedes esta noche... ──Dije intentando mantenerme un poco firme, evitando ser consumida por completo por sus muestras de afecto.

──Me quedaría todas las noches si tú me lo pidieras...

Luego de decir aquello en un tono realmente grave - que como no, lo único que hizo fue prenderme aún más- mientras me sentaba acostaba por un costado de la cama, mientras él se subía encima de mí intentando subir mi camiseta.

El clima era realmente caliente para ambos, a pesar de que afuera estuviera a punto de nevar yo podía sentir como el sudor caía por mi frente como si me encontrase en un horno. Era difícil de describir aquella sensación que estaba sintiendo con aquel hombre.

Nunca había deseado tanto a alguien como a Gavin, era tanto que me desesperaba no poder quitarle la chaqueta y la camisa que llevaba lo más rápido posible. Con su ayuda logré quitarle por completo su vestimenta de arriba dejando su torso completamente desnudo, y haciendo honor a ello no tarde en posar mis manos encima de él, sintiendo por fin aquella piel morena y llena de cicatrices que solo lograba imaginar en anteriores ocasiones.

Realmente no fui consciente de en qué momento me despojó por completo de mis prendas, tan solo lo noté cuando su cuerpo se unió con él mío tan rápido como le fue posible, jamás habría imaginado que un momento así llegaría, pero no estaba descontenta, en lo absoluto, realmente me encontraba ligeramente feliz.

En ligeras ocasiones me sentí un tanto desorientada cuando daba las embestidas tan fuertes, realmente era de esperarse porque sabía muy bien que estaba tan desesperado como yo.
Escucharlo gemir era como el mayor placer del mundo, su rostro enrojecido era un poema tanto como su expresión; estaba en ese momento tan enamorado de él que cualquier movimiento que hacía me lograba sacar ligeros gemido que solo lo motivaba aún más para seguir.

Tapé con una de mis manos mi boca evitando que salieran más gemido de ella, me hacían sentirme un poco idiota que me escuchara decir semejantes tonterías...

──[T/N]___ por favor... No te tapes, quiero escucharte ──La voz grave de Reed se hizo presente mientras me quitaba la mano que estaba en mi boca.

Completamente rendía a sus órdenes, le hice caso al instante y evité seguir evitando cubrir mi boca, la cual fue atacada por los labios del Moreno que iba directamente. Durante el beso, coloque ambas manos alrededor de su torso indicándole que cambiáramos de posición, y al instante como si supiera a la primera lo que pedía, se levantó ligeramente y posó su espalda en la cama, dándome la libertad de estar arriba por ese momento.

Como si no estuviéramos allí para perder el tiempo, me posé encima de él y nuevamente seguimos con el acto. Mis movimientos eran los más rápidos posibles, pero sin embargo me ayudó bastante que él posara sus manos en mi cintura y ayudase con el movimiento de las mismas, haciendo que nuestras caderas chocaran tan fuerte que podría sentirlo por completo.

Había tanto tiempo y seguida deseando aún más su cuerpo, hasta el momento en que sentí como mis piernas temblaban, llegando al clímax no logré disimular el gemido que salió de mi boca, cansando por completo mi cuerpo y que al momento de que él saliera de mí, también llegase al orgasmo.

A pesar de que acabáramos ambos, sabía muy bien que tanto él como yo no nos encontrábamos satisfechos del todo, por eso al poco rato seguimos con aquello hasta que nuestros cuerpos no aguantaran más.