Coche

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En cuanto se fue nuestro compañero le miré hasta que cruzó al otro pasillo con una ligera sonrisa en los labios, saqué mi móvil por unos segundos para mirar la hora y saber si estaba a tiempo para ir a cenar en un McDonald's cercano como hacía casi todas las noches.

──Oye... ¿Quieres ir a comer algo por aquí cerca? ──Su pregunta me sacó de mis casillas, fue tan repentina que tardé un par de segundos en responder.

──¿Me estás invitando a comer?

──Na' que va, planeaba ir contigo para que me saliera la cena de hoy gratis ──No sabía muy bien si estaba bromeando pues cuando lo decía con aquel tono tan raro y sonreía de forma forzada no le entendía del todo.

──Mierda, será hora de que te vayas buscando una novia o un novio que te saque a comer ¿No? Me tienes como banco personal.

Pude ver como rodaba sus ojos con una expresión de fastidio, por fin había comprendido que este tipo de bromas le molestaban algo que usaría en algún futuro para enojarlo a propósito.

Ambos salimos de aquel hotel para dirigirnos con mi coche a un pequeño local de comida rápida donde todo nos podría salir a unos dos o tres dólares por lo mucho. Tan solo fuimos a pedir un par de hamburguesas y dos refrescos de envase mediano, todo era para llevar pues nuestra idea principal era comer en algún banquillo o en el auto para evitar a toda la gente que había en el local. Al final decidimos comer en el auto pues sería un poco más cómodo y con el pensamiento de escuchar la música que quisiéramos fue un SI instantáneo.

— Era más que obvio gilipollas, cuando escuché a Shen hablar sobre eso me quedé superextrañada ¿Cómo no me había dado cuenta de que fuera mentira? ──Seguíamos hablando de ciertas cosas que sucedían el trabajo, por mi parte ya llevaba la mitad de mi hamburguesa pues solía pegarle unos mordiscos como de un tiburón.

──Me siento tan imbécil ──Oh amigo mío, sí que lo eres── ¿Crees que sea suficiente para echárselo en cara mañana?

── Yo que tú le tiraba una denuncia ──Bromeé de forma descarada mientras reía como estúpida.

──Lo anotaré en mi lista de cosas que hacer, por supuesto.

Sin que fuera consiente de todo; parecía que con el pasar de los días he incluso meses se había forjado una buena amistad entre nosotros, extraño. Me salían los chistes con más fluidez y pareciera que riera mucho más cuando estaba junto a él, así mismo al revés.

Gavin terminó de comer primero pues parecía que fuera un snack para él, tomó el último sorbo a su bebida y se dispuso a reposar en el espaldar del asiento, sus ojos se encontraban cerrados y era oyente absoluto de la ligera música que se escuchaba en el reproductor de mi auto, la poca luz que entraba de afuera hacía que cierta parte de su rostro se viera totalmente oscura y otra iluminada por la luz de un faro. Se le veía muy tranquilo y pacífico, aquel estado de tranquilidad que adaptaba en esos momentos era envidiable, pero de forma extraña, cautivadora.

Mientras comía intentaba no mirarle mucho tiempo aunque fue algo que no pude evitar, lo que más llamaba mi atención eran aquellas cicatrices que cubrían su rostro siendo casi invisibles por su tono de piel morena, podría contar cada una de ellas y terminar siempre en la misma pregunta ¿Quién o qué las provoco? Nunca había escuchado sobre aquellas, y seguro jamás lo sabría.

──¿Qué tanto me miras? ──Su voz hizo que diera un pequeño brinco y se me erizara la piel.

──Nada, perdí por un momento mi mirada mientras pensaba.

Disimulando mis nervios giré la cabeza en dirección al frente y fijé nuevamente mi mirada en el volante aun con la hamburguesa en manos. Escuché como rio en voz baja y se acomodaba en su asiento, era incómodo y sobre todo vergonzoso haber sido pillada de manera tan estúpida.

──¿Te quedó algo de refresco? ──Preguntó mientras levantaba su espalda del asiento.

── Un poco, si quieres bébelo todo.

Tomé el envase con una mano libre y se la pasé al instante, no fui muy precavida al hacerlo pues como si lo hubiera hecho de mala gana casi se caía encima de él, pero por suerte fue bastante ágil y lo sostuvo de inmediato, acompañado de esto sentí como su mano rozaba con la mía al sostener el envase, ninguno de los dos la separó de forma brusca, sino nos dispusimos a mirarnos un tanto consternados como si no tuviéramos ni putísima idea de que hacíamos.

Un nudo se hizo en mi garganta al verlo apartar el vaso rápidamente pues de seguro se había incomodado ante semejante mierda, sin embargo todo esto se esfumó al verle un poco más cerca, no me había percatado de que se estaba acercando cada vez más e instintivamente yo hacia lo mismo. Con una de sus manos tomó la mía donde se encontraba la hamburguesa a casi terminar y la dejó encima de la guantera, por culpa de la oscuridad no era capaz de mirarle por completo el rostro siendo esto algo que me colocaba nerviosa, miedo generalizado por lo desconocido.

Su mano seguía sosteniendo por encima la mía haciendo una leve presión para que también me acercara poco a poco, en el momento en que sentí su respiración por encima de mis labios me asusté, mierda, esto no era lo que imaginaba ni en mil años, pero no me molestaba... ¡Joder, joder, joder! Cada vez lo tenía más cerca y era tortuoso que los segundos parecieran minutos, cierta necesidad había crecido en mí en esos momentos tan surrealistas. En cuanto sentí sus labios encima de los míos imaginaba que iría a perder el aire allí mismo, se sentían suaves y bastante cálidos algo que hizo que me acostumbrara fácilmente.

Antes de que me diera cuenta ya estaba realizando ligeros movimientos con mis labios encima de los suyos, Dios se sentía tan jodidamente bien, había olvidado por completo que se sentía besar a alguien y esta fue una de las mejores maneras para recordarlas.

Con un ligero movimiento Gavin me ayudó a apoyarme en mitad del espaldar y la puerta de mi lado para que él pudiera acercarse con total libertad, temblaba ligeramente al sentir sus manos posarse en mis muslos sin que realizara ningún tocamiento indebido.

──Espera... ──Me separé un momento de su boca intentando coger un poco de aire── ¿Qué mierda sucede?

── No lo sé, y no me importa... ──Parecía estar igual o más extrañado que yo, nuestras acciones eran casi involuntarias.

En el momento en que volvió a juntar sus labios con los míos la calidez me invadió nuevamente aunque este sentimiento se esfumó al instante cuando sentí como se separaba por cuenta propia con cierta expresión de frustración.

──Será mejor que no continuemos... ──Su respiración era agitada y podría sentir como sus manos temblaban al estar apoyadas en mis muslos.

Apenas pude responder con un ''si'' pues no sabía ni siquiera que decir en semejante situación.

𝑭𝑼𝑪𝑲𝑰𝑵𝑮 𝑱𝑬𝑹𝑲 ─  Gavin ReedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora