UNO DE NOSOTROS (Completa).

CAPITULO 25

Los dos grupos salieron de la sala para seguir el plan trazado.

García con sus tres compañeros salieron afuera en dirección a los aparcamientos en busca de su coche para coger su arma, Javier junto a Samuel, su amigo Fede y el chófer cogieron la llave maestra de recepción y comenzaron a registrar las habitaciones una tras otra minuciosamente.

D. Manuel con su esposa, Bárbara, hicieron lo mismo en la cocina. Tras un rato la pareja pudo comprobar, que como ya había vaticinado Samuel, que ésta se encontraba completamente vacía.

El empresario le pidió a su mujer que se fuera al salón, junto al resto de los huéspedes, mientras tanto, él buscaría a "Javier y compañía" para ayudar en el registro.

Bárbara, después de algunas pegas, terminó cediendo y decidió obedecer a su marido.

D. Manuel fué a reencontrarse con los demás..

- Chicos!!! Dónde estáis?? - gritó nada más entrar en el pasillo.

- Aquí!! En la habitación número 6 - respondió Fede asomando la cabeza por el umbral de su puerta.

Cuando éste llegó junto a ellos, el grupo salía dirección a la siguiente habitación tras comprobar que todo, hasta el momento, se encontraba en perfecto estado.

- Nada? - preguntó el empresario.

- Nada!! - le respondió Fede abatido.

- Sigamos!! - dijo Javier intentando animar un poco.

- Javier, lo mejor será que busques tu arma primero... antes de continuar...no crees? - le dijo Samuel.

- No te preocupes, como te dije antes, lo que realmente urge es comprobar que el hotel sea un lugar seguro... dudo que Antonio nos plante cara a los cuatro, y ahora menos que somos cinco. Estaremos totalmente tranquilos cuando sepamos al cien por cien que no estamos encerrados en este maldito lugar con ese lunático!!!... en cuanto lo hagamos iremos al módulo dos a buscar mi "pipa"... la tengo en mi habitación - respondió Javier.

- Está bien!!!, tú eres el "poli".... imagino que sabrás como actuar más que ninguno de los que estamos aquí... - replicó Samuel con tono desconforme.

Los cinco huéspedes se pusieron,  de nuevo, con la tarea de inspeccionar todo el edificio. La idea era.... una vez que estuvieran a salvo, ir a por la pistola de Javier.

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María intentaba controlar su miedo para evitar que los demás se pusieran más nerviosos.

- Mariam, todavía no han dicho el teléfono en la televisión? - le preguntó a la propietaria.

- No!!... espero que lo digan en las noticias del medio día - le respondió ésta.

- Seguro que lo harán..- dijo Bárbara.

- Seguro!!... en algún momento tendrán que repetirlo!! - le contestó Mariam.

- De todas formas, debemos mantener la calma!!!...dudo que ese malnacido siga por aquí!! - dijo María con la intención de tranquilizar a los presentes.

- Porqué, no? - preguntó Caridad intrigada ante esa afirmación.

- Hombre!!.. pensándolo bien, lo más lógico sería que Antonio después de conseguir su libertad, lo que querrá es alejarse lo máximo de aquí para evitar que García lo atrape de nuevo - respondió María.

- Cierto!! Sería lo más lógico - dijo Mariam apoyando la teoría de la chica.

- Es una posibilidad!! - contestó Caridad pensativa.

Al momento las puertas se abrieron causando el sobresalto de más de uno. Tras ellas apareció Samuel junto a Fede y D. Manuel con actitud triunfadora.

- Todo despejado!! - dijo D. Manuel con voz alta.

María, al igual que el resto, se tranquilizó un poco al escuchar eso.

- Dónde está Javier? - preguntó Rosa preocupada.

- No te preocupes.... fue, junto a Raúl en busca de su arma... no tardarán!!

El salón se quedó en silencio durante un buen rato.

Unos minutos después apareció Javier, pistola en mano, con Raúl y el grupo de García.

- Todo perfecto!! - dijo éste.

- Fuera está todo en orden!! Todo tranquilo!! - replicó Lucas apoyándolo.

- Lo más probable es que ese criminal no se encuentre muy cerca!!... habrá corrido como alma que lleva el diablo.... daré de nuevo con él en cuanto salga de aquí... no tenéis nada que temer!! - aseguró García confiado.

- Espero que lleves razón!!! - pensó para sí María, intentando no empeorar el ambiente.