Joerick anatomy || Joerick/Chrisdiel ||terminada||

02

Llego a donde está mi paciente, el cuál padece de un coágulo en el corazón, por lo que necesita cirugía. Tengo la opción de llamar a dos internos para que me ayuden en esta riesgosa operación y no estoy muy seguro de a quién elegir.
Erick, el chico nuevo, quizás no sea una buena opción para una operación tan riesgosa como esta. Podría elegir a Richard y a Christopher, los mejores dos internos, pero no lo sé, quiero probar las habilidades del chico de los ojos verdes.
Reviso los signos vitales de mi paciente, que siguen estables y luego activo el monitor de Erick y Christopher, los cuales llegan al instante.

–no sé cómo apagar esto–dice el ojiverde entrando rápidamente a la habitación, con su monitor sonando a gran volumen.

Río al verlo y aprieto el botón de arriba, apagando su monitor.

Él me mira con sus mejillas sonrojadas, llenas de vergüenza y yo sonrío enternecido.

La verdad es que Erick es muy tierno y sus ojos son muy lindos, él es muy lindo.

–bien... Colón, el señor Vélez es un interno al igual que usted... señor Vélez presente el caso.

–bien, ella es la señorita Morgan... padece de un coágulo en el lado izquierdo de su corazón, lo que provoca colapsos del órgano y pequeños infartos

–¿Qué es lo que recomienda?

–Debemos sacar el coágulo, con una cirugía a corazón abierto, esto ayudará a normalizar la función del corazón.

–¿Cuáles son los riesgos?

–pues, es una operación complicada, que implica abrir el corazón, lo cual tiene una alta probabilidad de muerte y si es que el coágulo colapsa y revienta, se causa una hemorragia casi imparable, pero si es que no acepta la operación, tendrá aproximadamente dos semanas de vida.

–el caso es suyo Doctor Vélez–le paso la carpeta con los datos del paciente. –bien hecho.

Christopher asiente, con emoción al tener un caso de cardio y luego mi mirada se dirige a Erick, el cual mira la escena con los ojos brillantes.

–¿eso es lo que debo hacer?–pregunta aún impresionado.

–es lo que debes hacer para que el caso sea tuyo, operarás conmigo en esta ocasión, quiero probar tus habilidades.

–bien, estoy listo– asiente y se acerca a Chris para hablarle.

Me encantan las ganas de aprender que tiene Erick, creo que me agrada.

–Vélez reserva un quirófano para las 10:00 p.m

–si doctor Pimentel

Asiento y me quedo mirando a Erick, definitivamente es muy lindo.

Veo a Chris salir de la sala, probablemente para buscar el quirófano.

Erick se me acerca con timidez y yo lo miro.

–disculpa, ¿Joel?

–¿si?

–¿eres Joel Pimentel?

–ese es mi nombre.

–wow!—me mira con admiración.—He oído mucho de ti, eres el mejor cirujano de cardio.

Sonrío al escucharlo.

Al parecer su soy conocido o bueno, por lo menos dentro de la comunidad médica.

Según el consejo de cirujanos mundial si soy el mejor, pero honestamente nunca lo he sentido así.

Si fuera el mejor, mis pacientes no morirían.

Sé que es complicado sobrevivir a una operación a corazón abierto, pero siento que puedo dar más de mi y voy a dar lo mejor de mi.

–Erick... debes ir a trabajar, nos vemos en el quirófano a las 10:00

–sí, un gusto en conocerte Joel...

Sonrío y me doy vuelta a evaluar si el corazón de mi paciente resistirá a la operación.

Compruebo que su corazón es fuerte para resistir una operación de cinco horas y como siempre, pregunto la decisión de mi paciente acerca de la cirugía.

–señorita, ¿aceptará la operación?

–porque aceptarla si al final moriré de una u otra forma... prefiero no gastar dinero en morirme de una manera más linda.

–señorita, no es por ser pesimista, pero si usted no toma la operación, morirá y créame que eso no es lo que queremos

–no la tomaré...

Suspiro y salgo de ahí.

Debo respetar la opinión de mi paciente ante cualquier cirugía, es una regla.

Ella morirá si no se opera luego y no quiero eso.

puedo ayudarla, lo sé.

Debería intentar convencer a mi paciente de realizarse la cirugía, pero la verdad no soy bueno con las personas, nunca lo he sido.

Me cuesta expresarme y más con personas que no conozco.

Quisiera ayudarla, pero simplemente ella no quiere y la respeto.

Camino por un pasillo en el que no pasa mucha gente y puede ver a lo lejos a Erick con un bebé entre sus brazos.

Está ayudando en pediatría.

Se ve que es muy bueno con los niños, porque él sonríe y el bebé lo hace junto a él.

Parece un bebé, un bebé muy guapo.

–Erick...– lo llamo al verlo.

–doctor Pimentel... dígame– dice acercándose hacia mi, con el bebé en las manos.

–quería saber si...

Soy interrumpido por la saliva de ese estúpido bebé que me ha escupido en la cara.

Erick empieza a reír y me fijo en sus facciones.

se ve muy lindo cuando ríe.

Nunca antes había notado dichas cosas en algún interno, ni tampoco en nadie que trabaje en el hospital, no sé porque con Erick es diferente.