O 1 O

23.9K 1.8K 404
                                    

Con los niños dormidos por fin Yoo Hee se dio el tiempo de sentarse a un lado de su amigo en las escaleras del pórtico.

Le extendió una invitación con la imagen del rostro de Iron man adornándola. El peligris la tomó con una leve sonrisa.

—En verdad le caíste bien a los niños, sobretodo a Jung Dul –La castaña recargó su mentón en la palma de su mano mirando interrogante a su amigo. –¿Vendrás?

—Bueno, mañana tengo una sesión de fotos a las seis, así que tendré que irme temprano –TaeHyung hizo un puchero. Su cabeza se recargó en el hombro de su amiga para después soltar un suspiró. –No quiero ir~

La castaña rió por la reacción infantil de su amigo.

—Quiero venir aquí, quedarme hasta tarde y comer pastel con los niños. Y a quedarme contigo –Dijo como un niño pequeño.

—Tendremos mas tiempo para vernos. Ahora solo concentrare en tu trabajo –La castaña dio ligeras palmaditas en la espalda del peligris.

Yoo Hee sabía que tan flojo podía ser su amigo en los días sábado, peor cuando el llegaba de un viaje de filmación, si, sin duda TaeHyung tenía un enorme talento como cantante y actor, pero era un perezoso de primera.

—Tengo hambre ~ –Sonó igual que un niño de solo seis años.

—Yah. TaeHyung-ah. Tienes 23 años, ¿Por qué no te comportas como un hombre de tú edad?

—Porque no, y además, a ti te gusto así –Murmuró TaeHyung. –Aparte de que ya no cuidarías de mi si fuera maduro.

La chica sonrió viendo a el hombre a su lado. TaeHyung era guapo, y siempre ha estado para ella, su primer beso, su primer amor platónico, aún recordaba lo torpe que había sido ella, pero TaeHyung no le tomó importancia a eso, solo la besó. Era cierto que eran bastante cercanos, pero nunca pasaron de ser buenos amigos, y le agradaba. A pesar de que el peligris la haya visto en todo tipos de escenarios vergonzosos, a pesar de que ella fuera un rotundo desastre, Kim TaeHyung estaba ahí para ayudar a ese lindo y pequeño desastre.

Kim TaeHyung era un ser demasiado cariñoso, pero cuando hablamos de Park Yoo Hee, el superaba el límite de eso.

Tomó la mano de la castaña y entrelazó sus dedos, ya era una costumbre. Yoo Hee se levantó y con algo de dificultad logró levantar a su amigo. Esta sin mas lo abrazó. TaeHyung quedó con sus brazos colgando mientras la castaña se apegaba mas a él.

—¿Por qué no me lo dijiste?–Le preguntó.

TaeHyung sintió llorar.
Tragó duro y se abrazó a la castaña.

—Se pondrá bien –Le susurró.

TaeHyung solo asintió.

El padre de TaeHyung yacía recostado en una cama de hospital, todos los cercanos a su familia sabían de su enfermedad del corazón, hacía ya unas semanas que enfermó gravemente, Kim TaeHyung hizo lo que pudo para llegar lo mas rápido posible a Corea a pesar de que su padre le había dicho que no era necesario, si, su prioridad era Park Yoo Hee, pero sin duda alguna su padre era una muy importante para volver.

La luz de un auto los hizo voltear a ambos, se soltaron y vieron como Min YoonGi bajaba de el vehículo acomodando su traje.

—Buenas noches –Saludó con seriedad a los dos.

—Buenas noches YoonGi, los niños ya están dormidos, solo recojo mis cosas y me voy –Le dijo la castaña para adentrarse a la casa.

La tensión entres esos dos hombres se podía cortar con un papel.

Young Father |Min YoonGi|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora