Fear Games » Harry Styles

Capítulo 5.

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Narra Harry.

Abría mis ojos lentamente, pero pestañeaba freneticamente por la luz que me llegaba directamente a la cara. La luz era demasiada intensa en esa posición, que llegaba al punto que, mis ojos no podían soportarlo. Al parecer, seguía vivo, sentía todos mis sentidos funcionando pero había un detalle, mi corazón palpitaba mucho más rápido de lo normal, parecía como si se me fuera a salir del pecho en cualquier segundo.

Cuando ya estaba acostumbrado a la luz, miraba a mi alrededor, ¿Dónde rayos estaba?, exactamente, las grises paredes desgastadas le daban un toque estilo de 'El Conjuro' al lugar, no había nadie, solamente una camilla desparramada de sangre, supongo que no era mía.

-Harry Styles - decía una voz, veía para todos lados, no había nadie, pero igualmente me sentía acompañado - Vamos a jugar, pequeño brócoli -.

-¿Jugar? - pregunto con curiosidad, ¿Cómo se puede jugar con solamente una camilla?.

- Pero primero que todo, ¿Tienes miedo? - preguntaba la voz, ahora la reconocí, era la voz del teléfono.

-¿Eres la voz del teléfono? - pregunté - ¿Cuántas veces te dije que me dejaras en paz y que no me das ni una pizca de miedo?.

-Oh Harry, pobre Harry - me dice la voz - ¿Vez esas paredes? Pues mira el hermoso techo - miro al techo, estaba plagado de clavos invadidos con sangre, yo quedé un poco asqueado, ¿Qué tenía que ver con todo esto?. - Entremedio de este lindo papel tapiz, hay una llave - explica - ¿Vez toda esa sangre? Ahí mismo estará la tuya si no sales pronto de aquí, ¿No crees? - dice, para que luego el techo comenzara a bajar, lenta y dolorosamente - Yo que tú me apresuraría en salir, Harry. ¿Sabes lo más útil que podría hacer para encontrar esa llave? Mis uñas - explica, para que luego un pitido en la habitación sonara, la voz se había ido.

Vi para arriba, cada vez el techo bajaba más y más, pronto llegaría al suelo, miré hacia todas las paredes y encontré una pequeña abertura del papel tapiz, para luego correr hacia ahí y comenzar a trabajar.

Sacaba todo el papel tapiz que podía, no encontraba ni una llave, nada, solamente paredes grises y dolor de dedos. Sentía  como la sangre caía desde la punta de mis dedos hasta caer hacia mi muñeca, algunas gotas caían al suelo, una por una, parecía que caían en cámara lenta.

Buscaba y buscaba, ya estaba comenzando a sudar, el techo con clavos estaba cada vez más cerca. Mis manos no podían más, miraba hacia la puerta esperando a que se abriera sola, lo esperaba. Imágenes de Kendra y mías aparecían en mi cabeza, eso me dio fuerzas para seguir cabando, pero mi esfuerzo era en vano.

Sentí un clavo oxidado tocar uno de mis rizos, abrí mis ojos fuertemente, ¿Tan rápido perdí?, ¿Tan rápido moriré?.  No podía creerlo, me había rendido tan rápido y estaba a punto de morir de la manera menos digna que uno se podía imaginar. Aplastado.

Pero sentí entremedio de todo ese papel tapiz un objeto duro; la llave. Con la fuerza que me quedaba la arranqué de la pared y me deslizé por todo el cuarto hasta llegar a la puerta, no habia mucho espacio. De inmediato coloqué la llave en el cerrojo y abrí la puerta, para luego caer en un sucio piso de madera húmedo, transpirando y jadeando, salí, con vida. Mi corazón no podía calmarse, desde que había abierto los ojos sentía esa sensación de desespereción en mi interior.

Cerré los ojos con fuerza, esperando a que llegaran Liam, Louis, Niall, Zayn o Kendra diciéndome que todo era una broma y que nos vayamos a tomar un helado de chocolate. Pero no era así, cerraba y abría los ojos frenéticamente y todo seguía igual. Era una pesadilla. Me sentía observado pero no había nadie ahí, conmigo.