La tenue luz del recinto hizo que Kagami no pudiera apreciar muy bien el rostro de Tetsu, sin embargo, podía imaginarse que no estaba muy conforme con el asunto. Pese a todo ello, Kagami se recostó en el sillón y se puso cómodo para la función. Ese chico ya no podría decirle que no. Era un precio muy alto lo que debería pagarle por ese striptease pero no le importaba con tal de darse aquel capricho. Sabía que ese chico no hacía privados, así que él sería el primero y seguramente el último que le vería en aquellas circunstancias. Eso le excitaba.
El dedo índice de Tetsu tocó el botón de una minicadena que se encontraba a su lado y subió levemente la rueda del volumen dejando que la música sonase con algo más de fuerza. Kagami le observó con su triunfante sonrisa recolocándose aún mejor para disfrutar del espectáculo.
Tetsu suspiró. Cerró los ojos y se concentró en aquella música que captaban sus oídos. Empezó moviendo su cadera con lentitud pero en un movimiento tan seductor, que hizo que Kagami se relamiera sentado sobre su cómodo sillón. Todo el cuerpo de ese chiquillo era excitante.
Se recostó en el sillón buscando una posición cómoda y dejó sus manos sobre los brazos del sillón. Quería relajarse y aunque haber tenido sexo con ese chico habría sido lo mejor de todo, debía conformarse con un bailecito privado y cierto roce que quizá él le ofrecería.
El chico se puso de espaldas a Kagami, agarrando la barra y agachándose mientras exponía su trasero, moviéndose de arriba abajo hasta que cargó su peso sobre las manos, elevándose y haciendo la primera acrobacia en la barra. ¡Era emocionante! Pero lo que el pelirrojo ansiaba era verle empezar a quitarse la ropa.
Su cintura ganaba velocidad a medida que el ritmo musical cambiaba, llegando su trasero a captar la plena atención de Kagami, relamiéndose en su sitio y obligándole a recolocarse mejor su miembro a medida que se endurecía con aquellos movimientos que le excitaban.
Tetsu no perdía ojo a sus gestos. Cada vez que sus dedos tocaban el lugar donde estaba su intimidad, recolocándola bajo el pantalón como podía, le indicaba que hacía bien su trabajo. Nunca esperó que las danzas y el duro entrenamiento de su cuerpo para la danza clásica, pudiera ayudarle en un trabajo como aquel, pero así era pese a que no se le daba bien el baile moderno ni el contemporáneo.
Viendo la impaciencia de Kagami y cómo se enderezaba en ocasiones para intentar tocarle o quitarle alguna parte de la ropa, Tetsu tomó con ambas manos la camiseta y estiró de ella para abrirla. Los botones saltaron al instante, permitiendo al pelirrojo ver su torso antes de resbalar la camisa por sus hombros y espalda con un movimiento tremendamente erótico hasta dejarla caer al suelo.
Su piel era muy blanca y pese a que su abdomen era musculoso, tenía una musculatura fina. Un chico bajito, delgado y terriblemente sexual con esos gestos sugerentes que su rostro colocaba. Tetsu aprovechó aquel momento donde Kagami se relamía los labios para acercar su rostro. El pelirrojo se incorporó con rapidez, deseando besarle, probar esos labios rojizos que le tentaban a cada segundo, pero Tetsu se apartó con una divertida sonrisa en su rostro.
- Quiero que te restriegues – susurró Kagami con una sonrisa al ver lo juguetón que estaba ese chico.
- Que me restriegue, ¿eh? – sonrió Tetsu – lo haré si me prometes no tocar zonas íntimas.
- Me portaré bien – levantó las manos Kagami como si fuera un atraco, demostrándole que las tendría bien visibles y le haría caso.
¡Ese hombre era todo un caso! Estaba acostumbrado a salirse con la suya y aunque Tetsu no quería tener que obedecerle, sabía la cantidad de dinero que le iba a dar por tan sólo un baile y restregarse levemente por encima, así que no le quedaba más remedio. Se armó de valor y se puso de pie sobre las piernas de Kagami, dejando las del pelirrojo en medio.
ESTÁS LEYENDO
Mi vida secreta como striper (Kuroko no basuke)
FanfictionResumen: Tetsuya Kuroko, ha recibido su tan ansiada carta, la aceptación para estudiar en Juilliard, el conservatorio de artes más deseado por los artistas. Decidido a emprender su carrera como bailarín, abandona todo lo conocido en su hogar y se tr...