CIELO NEGRO

EXito

Capítulo 14

Los días pasan y sin darme cuenta la esperanza se desvanece. Nunca considere bien mi plan de parecer frágil y vulnerable, al darme cuenta era demasiado tarde, él permanecía en casa todo el tiempo. Definitivamente esto no era ni un poco de lo que yo planeaba que sucediera. Las pocas esperanzas que tenía en Tsunade se evaporaban cada que el estaba ahí montado en el auto conmigo con dirección a la clínica, era la tercera cita y yo lentamente veía los grilletes crecer en mis muñecas.

Mire a Tsunade con tristeza en mis ojos, la esperanza yéndose por el desagüe. La mirada que ella me dedico me hizo sonreirle con resignación.

- Sasuke deberías relajarte un poco. No descuides tu trabajo, comentó esto por que... ya sabes tengo oídos por todos lados y se que no has asistido a tus reuniones personales. Tú ejército no dejaría que a Sakura le pasara algo -

Lo vi fruncir el ceño y mi corazón se agito, la propuesta de Tsunade siendo muy osada. Tal vez el solo ignoraria la propuesta o podría simplemente hacer que no volviera nunca.

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Mi estado de ánimo decayó esa semana, en algún rincón de mi mente la voz que me dice que soy patética e inútil me atormenta cada día, todo el tiempo ¿Me doy por vencida antes de comienzo? tal vez, pero mi inseguridad está tan arraigada en mi que es difícil que me deshaga de ella, tal vez llega el momento de que comience a acostumbrarme a este castigo.

Las náuseas me recuerdan que debo porme de pie y mantenerme ahí a pesar de la tormenta. Pero en algún punto cuando recuerdo el cuarto con paredes blancas conmigo sintiéndome la peor escoria del mundo se que de ninguna manera puedo volver a caminar sobre el infierno.

La cena se prolonga con el en completo mutismo mirándome, estoy ahí tratando que el té pase por mi garganta tratando de ignorar ese olor que produce en mi náuseas. Ninguna de los dos es capaz de romper el silencio y sé de alguna manera que malas noticias no quiero escuchar. Lo veo apretar el puño y se que cualquier cosa que está por comunicarme no es de su agrado.

- Saldré mañana de viaje. Hay algunos negocios que debo atender. Será por cinco días o tal vez una semana completa-

- Esta bien. La cita con Tsunade...-

- Acude a ella sin mi. No puedes atrasarla sólo por mi. Tal vez debería considerar lo que dijo, hay cosas que requieren mi presencia. Suigetsu y Juugo cuidaran de ti.-

Lo veo perderse en su oficina después de decir aquello. Mi corazón se agita y una sonrisa ilumina mi rostro en cuanto cruzó la puerta de la habitación, la borro al instante. Debo ser cuidadosa y seguir aparentando esa debilidad que no me deja.

Cuando el vuelve al cuarto ya me encuentro bajo las mantas y trato de parecer agotada, siento su cuerpo junto al mío y su respiración junto a mi mejilla, mi corazón golpea en mi pecho y sin poder evitarlo mi cuerpo tiene un espasmo, sus manos rodeando mi cintura no me hacen sentir segura.

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Cuando desperté el ya se había marchado. La tranquilidad recorriendo mi cuerpo como un bálsamo. Mire la fecha en el calendario, sólo tres días para reunirme con Tsunade. Mire por la ventana añorando sentir el viento chocar contra mi cara cuando corra tan lejos de este lugar. Cuando pueda mirar el cielo y las nubes grises se hayan ido.