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Tema: Uno

Lectura Bíblica: Juan 17:11, 20-23, 26

Introducción.

"...Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros... Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros... La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado... Y les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos" (Juan 17:11, 20-23, 26)

¡Qué oración tan hermosa y poderosa por aquellos que conocemos a Jesús y a nuestro Padre eterno! Creo, con toda certeza, que al abrir nuestro corazón y escuchar el deseo de Cristo nos queda muy claro que debemos de ser uno, y sólo uno, para que el mundo le conozca y pueda ver al Amor tan perfecto que Dios quiere dar con brazos abiertos a nosotros y a todo aquel que se acerque al trono de Su gracia.

Jesús nos dejó, no sugerencias, sino mandatos: "Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros" (Juan 13:34) e "...Id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado..." (Mateo 28:19-20) (Preguntar al grupo) ¿En qué se relacionan ambos mandatos? (Esperar respuestas) (Decir): El amor de Dios debe estar en nosotros, siendo así todos Sus hijos uno, para que predicando el evangelio, el mundo conozca ese Gran Amor.

Desarrollo.

1. Unánimes en todo (Hechos 4:32, Romanos 15:5-6): Por ese mismo Amor, ese mismo Espíritu que debe ser en todos nosotros, obedecemos a nuestro Padre, servimos a Aquel que nos ha dado todo, y glorificamos a quién merece toda la gloria. Para que eso sea posible, debemos ser Uno, y eso requiere de compromiso. (Preguntar al grupo) Pero,¿Qué es eso? (Esperar respuestas) (Decir): Es dar Todo en nuestra vida para sacar adelante Todo aquello que se nos ha confiado y hemos aceptado. Hemos visto ya, qué implica la diligencia: ser cuidadoso, esmerado, dedicado, exacto, atento, presto, pronto y activo. Y debemos de comprometernos a servir diligentemente. Ahora, ¿Qué tiene que ver esto con la unanimidad?

2. ¿Comprometido?: Dios nos ha puesto en una hermosa congregación, que hace la voluntad de Dios, no por obra de la casualidad, ni de alguna coincidencia, ni por azar. Estamos juntos en el Camino por una buena voluntad, agradable y perfecta (Romanos 12:2); por lo tanto, no es debido que cada quien vaya con metas diferentes, por caminos separados, con ideas contrarias y con los ojos puestos en "moscas". Es necesario que todos vayamos juntos, amándonos unos a otros como es deseo de Dios, sirviendo en la casa y comprometiendo nuestro corazón y nuestro todo para que Él sea exaltado.

Alejarse del lugar en el que Dios nos puso; quejarse o murmurar del mismo o de cualquier hermano; o estar en disgusto, sin compromiso, es decirle a Dios: "No quiero lo que Tú me estás dando, pienso que es mejor lo que yo quiero"; es desobediencia y rebeldía. ¡No trates de hacerlo tú sólo! Terminaras así: sólo, frustrado, triste, sin paz.

Al contrario, comprometerse en el servicio de todo corazón, con gozo, traerá bendición a tu vida y, como vimos la semana anterior, serás realmente feliz.

"Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; mas ¿cómo se calentará uno solo? Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto" (Eclesiastés 4:9-12)

3. Unidos en Cristo (Juan 15:4-11):

Quizás no sea muy fácil ser uno con todos, pero esa "unión perfecta" no la podemos conseguir en nuestras fuerzas. No podemos ser uno con nuestros hermanos en Cristo, sin ser uno con Cristo. Alguien que no tiene una relación con Dios, difícilmente la tendrá con los demás. Aquel que ama a Dios y le busca, y Dios está en Él, no le costará amar a Sus hermanos.

"Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor... Nadie ha visto jamás a Dios. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se ha perfeccionado en nosotros" (1 Juan 4:7-9,12)

conclusión.

(Preguntar al grupo) ¿Cómo podemos servir? (Esperar respuestas) (Decir): Punto de Encuentro está comprometido a obedecer la Palabra de Dios, a predicar el evangelio a toda criatura y que Dios sea glorificado. Ese es el fin de todo lo que se hace. Dios nos ha dado pastores y líderes que escuchan lo que el Señor quiere para la Iglesia y lo hacen con diligencia. Nosotros debemos de ser uno también con ellos y ser partícipes de la misma obra.

Aún en lo que pudiera parecer más pequeño o menos importante, hasta lo que requiere un gran esfuerzo. Ya sea (y no en orden de importancia) la limpieza de la congregación, la enseñanza a los niños, el servicio en ReD's, los cursos, las reuniones de oración, los eventos especiales, los edecanes, reuniones de jóvenes... hay muchas cosas en las que podemos servir; reuniones y eventos, peticiones de oración en las cuales nos podemos comprometer; y encontraremos el gozo que ello trae consigo (Juan 17:13)

Tay-Reh'-O. 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora