The Mission ~Peter Pan~

Capítulo quince

POV Arellys:

-¿Qué haremos hoy?-preguntó Dylan tras haber terminado de desayunar.

-¿Te parece salir?

-¿Solos?-se interesó.

-si tu quieres-sonreí mordiéndome el labio.

-¿Y yo qué? ¿Me quedaré aquí con tú padre?-preguntó cole reventando nuestra burbuja.

-o también puedes salir...

-¿Nos vamos?-Dylan se levantó de la mesa y me estiró una mano que tomé al instante.

Salimos sin antes avisarle a mi padre y nos montamos en el auto del rubio, si tenía uno aunque no lo usara mucho, era un Toyota Hybrid Prius azul marino.

-anoche me pasó algo muy raro-murmuré.

-¿Así?

-¿Estuviste en mi habitación anoche?-pregunté tontamente porque sabía que el no había ido pero quería corroborar que estuviera en lo cierto.

-ojalá, pero no linda-giró a verme unos segundos-¿Por qué?

-nada-preferí callar.

-no me voy a enojar-prometió apoyando una mano en mi muslo y lo acarició suavemente.

-un chico se coló en mi habitación pero no supe reconocer quién era y no me dejó encender la luz.-expliqué dándome por vencida.

-te dije que no me iba a enojar pero...-sacó su mano de mi pierna-no puedo evitar ponerme celoso.

-para el auto-ordené.

-¿Qué?-me miró confundido.

-¡Qué frenes!-chillé.

El rubio se aparcó rápidamente a un lado, me saqué el cinturón y me giré para verlo cómodamente.

-Dylan, no pasó nada solo hablamos, lo juro-apoyé una mano en su mejilla acariciándola-Jamás te engañaría.

-lo sé-se inclinó hacia mi y me besó. Al separarnos me subí sobre él ágilmente-¿Qué haces?-preguntó con una sonrisa en el rostro.

-necesito ver algo-me acerqué a su camisa e inicié a desabrocharla con lentitud.

-¿Seguro?-apoyó sus manos en mis caderas-porque estamos en una situación un poco comprometedora y es de día, no podemos disimular.

-no va a pasar nada-cuando terminé respiré hondo y moví la tela a los lados dejando su torso levemente marcado y con un sutil salpicado de lunares al descubierto.

Lo que me llamó la atención es no ver una cicatriz donde Peter lo hirió, pasé mis dedos por su tibia piel donde debería estar la marca sin poder creerlo.
Su mano tomó la mía y la llevó a sus labios para besarla sin dejar de mirarme a los ojos

-¿Qué es lo que te está pasando?-preguntó confundido.

-nada amor-besé cortamente sus labios-estoy bien-lo abracé por unos segundos.

-¿Seguimos el viaje?

-si-me pasé a mi asiento.

-quiero dejar en claro que no puedo bajar del auto en estas condiciones-miró su entrepierna,no pude evitar reír.

-pareces puberto Sprouse-me burlé.

-deberían darme un premio por no haberte tomado en ese instante, estoy en abstinencia desde hace como dos meses.-dramatizó.

-me sorprende que no te hayas ido con alguna de las hijas de Afrodita-ironicé.

-ellas no me interesan, ya te lo he dicho.Me interesas tú.

-maldito rubio romántico-gruñí para luego dejar un rápido beso en su mejilla.

-así me amas-dijo con aires de superioridad.

-si-murmuré no muy convencida, antes no hubiera dudado pero desde mi encuentro con Peter las cosas cambiaron.

....

Esa noche me acosté esperando poder encontrarme de nuevo con el chico, no tardó mucho en aparecer.

-hola-murmuró muy cerca de mi rostro, no pude evitar el sentir su perfume natural era una combinación de Pino y Lavanda.

-hola-respondí un poco nerviosa.

-no estes nerviosa, prometo que no te haré nada-sentí su mano entrelazarse con la mía.

-es que no puedo reconocerte, siento que eres importante-intenté distinguirlo en la oscuridad, más se me hizo imposible.-puedo sentirlo.

-y éstas en lo cierto-sus labios encontraron mi mejilla,cerré mis ojos disfrutando e imaginandome el beso.-pero no puedo decirte quien soy o dejar que me veas.

-esto irónicamente me recuerda a un mito-peiné mi cabello con la mano libre- Cupido y Psique.

-bueno hay algo que tenemos en común Cupido y yo, ambos somos monstruos y nuestras princesas son las más hermosas del mundo.

-¿Soy tú princesa?

-no lo sé aún.-podría jurar que se encogió de hombros.-pero me gusta pensar que lo eres.

-¿Alguna vez me dejarás verte?

-quizás... pero no prometo nada.

-buenas noches-me solté de su agarré y le di la espalda para luego caer rápidamente en brazos de morfeo.

....

-¿Entonces iran a ver a su madre?-le pregunté al rubio observando como guardaba su ropa en la mochila.

-sí, nos veremos de nuevo en el campamento-dejó el bolso y se sentó frente a mi-no será por mucho.

-esta bien, yo veré que haré aquí-sonreí.

-pasa tiempo con tu padre-me aconsejó-él te extrañó mucho.

-lo sé, yo igual.

-no sé que pasó en Neverland pero debe haber sido algo muy duro porque siento que no estoy con la Arellys que conozco-admitió.

-no voy a negarte que no pasaron cosas porque estaría mintiendote-suspiré-pero es algo de lo que no estoy preparada para hablar contigo, espero que me entiendas.

-lo entiendo-se levantó apenas para tomar mi rostro y besar mi frente con dulzura-cuando estes lista yo estaré para escucharte.

-gracias por entender-sonreí-¿Ya te dije que amo este lunar?-acaricié el punto marrón sobre su labio.

-no, no me lo habías dicho-tomó la mano que estaba en contacto con su rostro y la apretó suavemente sin apartarla de él.-yo amo tus ojos y tú sonrisa.

-¡Hijo de perra!-chillé-me estas sonrojando.

-ya te dije que te ves hermosa así-reprochó.

-voy a extrañarte-declaré.

-y yo a ti-llevé mi otra mano a su mejilla y lo besé, atrayendolo a mi al punto de tenerlo casi sobre mi, y digo casi porque él se sostenía con una rodilla que apoyó en el colchón a un lado de mi y los brazos a cada costado de mi torso.

-te amo-murmuró tras separarnos.

-y yo... yo te quiero mucho-no podía decirle que lo amaba porque estaría mintiendo.

-creí que también me amabas-se separó de mi.

-lo siento Dylan, aún no estoy lista para...

-lo sé y lo entiendo.