Logré llegar en menos de media hora. Me están esperando con mucha tranquilidad, sentados en el interior del auto. Ni siquiera se molestaron en llevarlo a un árbol o en algo que los cubriera si llegase a llover.
—Marica, al fin llegaste —me saludo Kleiver, saliendo del carro.
—Si, y no voy a dudar en irme sino te callas la boca —mi respuesta no le agradó para nada. Aun así pareció fingir que la ignoró.
—Como sea, por aquí esta la casa de mi novia, para allá vamos.
—¿Ya intentaron todo lo que pudieron para que arrancará?
—Si, pero tu sabes que este bebe —acarició el carro—. Ya está muriendo.
—Está chatarra ya murió, ahora tu usas su cadáver, y no creo que eso...
—Andas muy alzado hoy —interrumpió, forzando cada vez mas la sonrisa—. Muy bien señoritas, es hora de trabajar.
Un joven salió del automóvil para ayudarme, con cara de pocos amigos.
—¿Dónde queda la casa de tu novia? —pregunté.
—Por ahí, yo te aviso, por ahora vamos a adelante, tu solo empuja —dijo mientras se subía al carro.
—Seria mejor si tu y el chico que queda adentro se bajaran...
—Mira, yo soy el chofer y él se siente mal, deja la crueldad, además te estoy pagando, apenas llegemos al lugar el dinero es tuyo.
Sin mas interrupciones, comenzamos a mover el carro. El camino consistía en rectas, bajas y subidas leves. Casi podía jurar que Kleiver estaba perdido, nos mandaba ir de un lado a otro.
Estaba llegando a mi límite, me dolía la cabeza, los brazos, las piernas, el pecho, me dolía todo el cuerpo. Incluso en mas de una ocasión el sudor se me metió en los ojos, el tipo que me estaba ayudando se notaba cansado también. Finalmente las gotas de agua cayeron del cielo, no tardo en formarse una fuerte llovizna.
—¡Oye, imbécil, esto ya es suficiente, no me quiero mojar! —exclamó el tipo a mi lado, para montarse en el carro.
—Oigan, no pensarán que voy a mover esto solo, ¿verdad? —me dirigí a la ventana del conductor— Mejor bajense y ayuden todos de una buena vez.
—Si puede ser, pero creó que esta "chatarra" ya puede funcionar —apenas pasó la llave el carro funcionó—. Que cosas no, ¿no? Y como no llegamos a la casa de mi novia... creo que no habrá paga.
—¿Tu... aunque sea de verdad tienes novia? —ellos se rieron ante mi pregunta.
—¿Para qué? Es mejor la vida sin ataduras —luego de decir eso se largaron. Soltando comentarios desagradables, hasta que no pude escucharlos mas.
Me moría de cansancio, ahora estaba empapado, solo, y víctima de una estúpida broma. Me senté en la cera, intentaba tranquilizar mi respiración. Estos son los momentos en los que te sientes una mierda.
En todo el camino que empuje el carro, y hasta ahora, no se notaban pasar otras personas. Me encontraba completamente solo. Saqué mi teléfono para buscar a alguien para que me pudiera buscar, y ni siquiera había señal.
No tuve otra opción que comenzar a caminar. No pude soportar mucho tiempo, para que las gotas de lluvia se mezclaran con mis lágrimas.
—¿Por qué cuando intento arreglar las cosas peor me sale? —me acerqué a un poste para patearlo, y solo logre caerme.
—¿Amor? —una voz conocida se hizo presente. Apenas voltee mi llanto se intensificó mas— Oh, cariño, ¿qué paso?
Me levanté, y de inmediato mis brazos rodearon el cuerpo de mi madre, ocultandome en su pecho.
—Nunca, en esta vida, voy a madurar, ¿verdad? —le pregunté en vos baja— Seguiré siendo en idiota de siempre.
—Yo... no creo entender lo que este pasando si no me cuentas... —me quede en silencio— Bueno, igual si no me quieres contar, o si maduras o incluso si tienes ochenta años, siempre podrás contar conmigo.
Sin mas que decir, caminamos juntos a casa. Ya no estaba solo, y esa era suficiente, tener a alguien importante a mi lado. Mi teléfono comenzó a sonar como loco, dandome a entender que ya había señal.
"Brian:
Ya terminaste la película - 1:39 pm
Apenas termines me avisas - 1:44 pm"
"Marisol:
Oie, ¿cómo te va con el trabajo ese? - 1:46 pm
Cuando acabes me escribes - 1:47 pm"
"Brian:
Mmm - 1:52 pm
MMM - 1:54 pm
Estas viendo toda una saga de la creación del mundo, o qué? - 1:59 pm
Perdón, supongo que te estas divirtiendo - 2:03 pm"
"Marisol:
Estas vivo, luego dirán que yo fui la última persona que te vio con vida, y seré la principal sospechosa - 2:07 pm"
"Briam:
Ahora que lo pienso, no has trabajado casi esta semana, y suponiendo que Kleiver te pagará a tiempo, no tendrías mucho dinero para salir a comer o pagar algo aparte del cine - 2:13 pm.
"Panadero★:
Acabo de sacar una tanda de deliciosos panes de chocolate ;) ven rápido a comprar antes de que se enfrien - 2:15 pm
"Briam:
Es posible que todo este bien pero no deberías ignorar tu celular - 2:17 pm
Por favor, contesta... no me preocupes tanto - 2:19 pm"
"Panadero★:
¿Estas bien? Nunca ignoras mis panes recién hechos, te guardaré uno en el microondas - 2:20 pm"
"Briam:
Osmar saco panes de chocolate, te compre uno... así que, apurate a llegar - 2:22 pm"
"Marisol:
MIRA ESTÚPIDO SI SACO UNA ORDEN COMO QUE ERES PERSONA PERDIDA Y POSIBLEMENTE SECUESTRADA ES TU CULPA POR NO CONTESTAR - 2:25 pm"
Al terminar de leer mis mensajes no pude evitar reírme. Sin importar el frío que sintiera mi cuerpo por lo húmedo que estaba y por la brisa, justo ahora la calidez de mi interior lo superaba.
«No estoy solo» De tan solo pensarlo, me hacia realmente feliz.
Hola chicos ^3^ estoy realmente feliz, mañana son mis 15~
Y no solo eso. Realmente estoy muy feliz con las lecturas y votos de esta historia :'3 creo que es la primera vez que una de mis historias tiene tantos votos comparadas con las visitas.
Ósea :v una historia mis puede tener 1k y tener solo 200 votos :'3 y esta que aun no llega a las 200 visitas tiene 110 votos ♡
Me hacen feliz
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Sentir en silencio (Gay/yaoi)
RomanceUn joven de 17 años pierde toda relación amistosa, cuando anuncia su orientación sexual. Hasta que sus esperanzas regresan acompañadas de un camión de mudanza. Una sonrisa, eso fue todo lo que necesito para caer rendido a los pies de su nuevo vecino...