XI

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Briam me miró confundido, tocó sus labios un par de veces, dando señal que no logró leer lo que dije. No le hice caso a eso, mis lágrimas estaban apunto de derramarse y me lancé sobre él, rodeando su pecho con mis brazos, escondiendo mi cara en su hombro, dándome la libertad de desahogarme.

Él intentó separarme, al no poder hacer se rindió y correspondió mi gesto, acariciando mi espalda. Dejando que me acurrucara en su cuerpo.

Esos fueron los mejores minutos de todos estos días. Logré apreciar nuevamente la tranquilidad, ese sentimiento que lograba despejar toda inseguridad. Temía perderlo, pero aun mas llegar a lastimarlo de verdad. Si me considera como un amigo, como su mejor amigo, tal vez quiera seguir conmigo a pesar de la verdad.

Me aleje de su hombro, tome un poco de distancia, y lo mire directamente a los ojos, sus hermosos ojos chocolate.

—Soy... gay —le confesé. Juro que cuando deje salir esto, el oxígeno desapareció por casi un minuto, buscaba la más mínima reacción. Él solo miro alrededor e hizo una seña para que continuará—. ¡¿Q-qué mas quieres?!

De inmediato, Briam soltó una gruesa, sonora y larga carcajada. Se levantó y entró a la casa, haciéndome señas para que lo siguiera. Cerré la puerta tras de mí, y vi que escribía algo en un papel, y luego me lo mostró, pude sentir mi rostro arder.

"Eso ya lo sabía :p"

Moví mis pies de forma nerviosa, buscando una pequeña cavidad donde enterrarme y no salir jamás. Mi vecino volvió a escribir, al mostrarmelo sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo.

"Pero, eso no es lo que me viniste a decir, verdad? No puede ser lo único"

Me asustaba que me conociera tanto. Ya él conocía una parte de la historia, solo falta lo demás. Estuve apunto de hablar, hasta que note su sonrisa, la misma que había hecho que comenzara la farsa, esa, tan simple, cautivadora e inocente.

Era posible que las cosas quedarán incómodas entre Briam y yo, así que, si solo tomo un riesgo, al menos valdrá la pena.

Tenía una pequeña lucha en mi interior, sólo bastó que el pelirrojo diera un paso hacia mí, para que todo acabara. Antes de que pudiera reaccionar, de forma rápida uní nuestros labios, tomé su rostro con mis manos para volverlo más profundo. Él llevo sus manos a mis hombros, intentando alejarme, se que quería ser amable y no usar fuerza bruta para no lastimarme. Si ya me había aprovechado tanto de él, ¿qué importaba una vez mas?

Cuando logró separarme tuve que enfrentar la realidad. Briam tenía la respiración agitada igual que yo, y no apartaba una mano de mi pecho para asegurar que no lo volviera a besar. Alcé mi rostro y pronuncie claramente.

—Antes de darte explicaciones tan íntimas, ¿no crees que primero debemos fortalecer nuestra amistad?

Sentir en silencio (Gay/yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora