Una Omega diferente

Hermanos

Pov Lucy

- ¿Laxus? - pregunté confusa al ver a mi hermano de pié detrás de Natsu. Muy bien, acabo de ver como mi hermano golpeaba a Natsu de manera que quedara desmayado en el suelo. Totalmente dormido.

Alce mi vista encontrandome con mi hermano con su ceño fruncido y sus brazos cruzados con molestia - no se supone que tu odias a los Alphas ¿Por que has dejado que él te bese? - me preguntó con fastidio y molestia en su voz. Yo solo bajé la cabeza, normalmente no me habría dejado besar, pero es que Natsu provoca algo extraño en mi. Moví mi mano hasta quedar en la parte de arriba de mi brazo y la apreté. Me siento horriblemente mal, pero no por la reprimenda de mi hermano, si no por ver a Natsu allí, en el suelo y inconsciente - ¡Lucy! !esto es serio! ¡Responde! - me gritó con molestia. Yo me sobre salté y frunci mi ceño mientras apretaba con fuerza mi puño.

- ¡No lo sé! - grité molesta mientras agachaba mi cabeza avergonzada y furiosa. Mi ceño está fruncido hasta más no poder y me mordía mi labios inferior con rabia - no lo se hermano ¡No lo se! ¡En sus brazos me siento protegida! Y ¡No se por que! - alce mi rostro mostrando mis ojos de un color azul eléctrico mientras que mis colmillos crecían. No se por que me siento así, es horrible - tu no sabes lo que se siente, no lo sabes ¡No sabes nada! - grite colocando mis manos a ambos lados de mi cabeza apretando mis cabellos estirandolos causandome un leve dolor que no era. Nada.

- hermana - su voz grave y preocupada resono en mi cabeza. Pero yo no podía más, esto es demasiado.

- tu no sabes lo que es que alguien entre en tu vida y lo ponga todo de cabeza - me apoyé en la pared y me dejé caer apoyada en la pared haciendo que me desordenara levemente mi cabello - ahora no se que pensar. No se nada de nadie, no entiendo nada, si todos los Alphas son malos ¿Por que? ¿Por que él es tan amable? ¿Tan cálido? ¿Tan protector? - levanté mi rostro mostrando mi rostro de confusión y tristeza. Ya me dolía la cabeza al darme cuenta de que no sabía que pensar - no entiendo nada - escondí mi cabeza entre mis rodillas para tratar de aislarme en mi mundo, hace años que no me sentía así, tan tan desprotegida.

Pude escuchar como alguien se sentó al lado mío y yo alce levemente mi cabeza viendo como mi hermano estaba sentado al lado mío con uno de sus brazos apoyados en su rodilla mientras miraba al techo - me acuerdo que de pequeña cuando te ponías así Layla te solía cantar una canción para tranquilizarte - el deslizó su brazo por encima de mis hombros para luego agarrar mi hombro atrayendome a él.

- Dudo que me vallas a cantar - dije mientras separaba totalmente mi rostro de mis rodillas observandolo directamente a los ojos. El giró a verme y me miró como si acabara de contarle un mal chiste.

- pero también me acuerdo que solias contarme tus problemas, y así yo te daba un consejo y te sentías mejor - contó con un leve tono nostálgica. Retiró su mano de mi hombro y me acarició la cabeza con ternura - así que, cuentame todo - me pidió y yo simplemente miré a Natsu, me duele verlo así, creo que Laxus se ha pasado un poco con lo de dejarlo K.O.

- desde el primer momento en el cual vi a Natsu me sentí atraída por él, tanto que incluso entré en celo por unos segundos. Y cada vez que me encuentro con el tengo ganas de saltar hacia el y besarle, pero por suerte siempre me he controlado al recordar que los Alphas eran monstruos - casi inmediatamente volví a esconder mi rostro entre mis rodillas y coloqué mis manos sobre mi cabeza soltando algún sollozo - pero cada día es más difícil hacerlo, santo dios, he llegado a pensar cosas pervertidas y no se por que es. Natsu es todo lo contrario a Ivan y Acnologia. Es tiernos, dulce, amble, protector pero ... - en éste momento yo apoyé mi cabeza en la pared y estire mis piernas mientras mordia mi labio inferior con impotencia - tengo miedo - mis ojos se volvieron de su color natural. Se volvieron a su color chocolate que tanto me caracterizaban - tengo miedo a que se vuelva como ellos dos, que me haga daño o incluso - levanté mis manos y observé las palmas de mis manos - que tema lo que realmente soy, Laxus, no soy normal, soy una anomalía genética, de no ser por mi madre y mi padre yo sería un experimento o una especie de arma militar - me lamente rompiendo en llanto. Mi autoestima está por los suelo y mis sollozos eran extremadamente audibles. Por suerte nadie había llegado a aquél pasillo por lo pronto que era.

Laxus gateo hasta llegar en frente mío y me abrazó colocando sus brazos al rededor de mi cabeza haciendo que mis sollozos pararan de golpe - eres una idiota Lucy - me dijo con un tono algo melancólico y tierno mientras apretaba con mas fuerza su agarre - según como me has descrito a ese afeminado es un chico que estoy segura que te aceptará, incluso con tu anomalía, fallo genética o como quieras llamarlo - rápidamente negó con la cabeza y sonrió de manera protectora - ya lo verás - al final esa sonrisa consiguió tranquilizarme, era raro ver que mi hermano se comportara de manera tan amable conmigo.

- A caso me estás diciendo que éste con Natsu - pregunté confusa mientras alzaba una de mis cejas con duda ya que no comprendía a que se referían. El rápido fruncio el ceño y apretó sus dientes con fuerza demostrando ira.

- ja, no puenso dejar que el afeminado te toque, y si se atreve a tocarte juro que lo mataré - soltó levantándose de su sitio mientras se cruzaba de brazos con molestia desviando su mirada hacie Natsu el cual seguía inconsciente en el suelo.

- Gracias, Laxus, me has ayudado mucho - dije levantándome del sitio para después acercarme a Natsu el cual seguía dormido en el suelo. Me coloque de cuclillas al lado de el y comencé a acariciar el cabello de Natsu de manera tierna - creo que deberíamos llevarlo a la enfermería - afirme sin dejar de acariciar el cabello de mi Alpha, otra vez me siento segura con el.

- Vale, apartate de él que lo voy a levantar y llevarlo a la enfermería - afirmó el cogiendo a Natsu como un costal de patatas. A pesar de que Natsu es bastante alto y corpulento mi hermano lo es aún más.

- te acompaño Laxus, no me fío de que no lo dejes por ahí tirado - afirme mientras lo fulminaba con la mirada, él solo suspiró y siguió caminando.

- me conoces demasiado bien -