Dime que no te he hecho nada

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Pov Michelle

Las lágrimas no paraban de caer por mis ojos, lloraba, lloraba y lloraba. Ahora me encuentro en mi cama, sentada en el borde y con las palmas de mis manos pasandolas nuñerosamente debajo e mis ojos.

Las lágrimas ni paraban de caer y yo estaba desesperada, podía escuchar los ruidos en el sótano haciendo que mi corazón se rompiera

Cómo pude trataba de limpiar las lágrimas de mis ojos restregando la palma de mis manos limpiando las lágrimas que caían de mis ojos.

Me levanté de la cama acercandome al espejo de mi habitación, santo dios, estoy horrible, mama, o bella durmiente, me da igual cómo llamarte, se que soy muy infantil, ingenua y puede que hasta tonta pero ...

Alce mi cabeza. Mi pelo está despeinado, una pequeña venda rodea la parte superior de mi brazo. Mis ojos están lloroso, enrojecidos y con lágrimas amenazando con salir de mis ojos. Definitivamente estoy horrible.

Escuché a alguien tocar mi puerta de madera. Inmediatamente me sobresalte levemente. Respire y solté todo el aire de mis pulmones tratando de deshacerme de la carga de mis hombros.

A paso lento caminé hasta la puerta y la abrí dejándome ver a mi hermano con cara de preocupación. Abrí mi boca para tratar de articular una palabra.

Rápidamente el rodeó mi cabeza con sus brazos y me pegó a él en un abrazo fraternal lleno de amor y cariño. Aunque no soy tonta, esto lo hace por que sabe que he estado llorando.

Las lágrimas volvieron a brotar de mis ojos, escondi mi cabeza en su pecho colocando su mano sobre el apretando con fuerza la tela de su cabeza. Me sentía tan inútil.

- Hermana por favor no te sientas mal, tu no tienes la culpa de nada - trató de reconfortarme abrazandome con fuerza. Su voz refleja tristeza y parecía que su voz estuviera apunto de romperse.

Otra vez se escucharos los sonidos de las paredes siendo golpeadas y un grito desesperado. Él me abrazó más fuerte y yo sonreí de manera amarga. Llevo su cabeza a mi mano y comenzó a acariciar mi cabello entre sus dedos.

Pude sentir otro abrazo detrás de mí, abrí levemente mis ojos y fui capaz de ver a mi abuelo abrazandome por detrás. Él había tirado su bastón para venir corriendo hasta nosotros abrazandonos con fuerza.

El abuelo me ha permitido bajar al sótano, generalmente no me dejan bajar ya que esto puede ser muy duro

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El abuelo me ha permitido bajar al sótano, generalmente no me dejan bajar ya que esto puede ser muy duro. Pero yo deseo hacerlo.

Acabé de bajar las escaleras y coloqué mi mani en la manilla de la puerta. Tragué duro por el miedo y abrí la puerta. El ruido de mas cadenas era muy poco perspectible, se escuchaba el sonido de el suelo siendo rasguñada.

Ahora soy capaz de ver que una jaula hecha de metal bastante grande, en las sombras se podía ver una figura femenina cubierta por las sombras. No se veía su cuerpo pero sí se escuchaba algo.

Un leve gruñido se escuchó al igual que el sonido de acero siendo rallado, un sonido especialmente desagradable.

- veo que aún estás molesta - dije con un tono melancólico juntando mis manos en frente mío mientras alzaba mis hombros mostrando melancolia.

Escuché el ruido de las cadenas moverse, alce mi vista y pude verla allí. Ella se encontraba caminando lentamente hacia mí con cadenas atadas a sus mupecas tobillos y cuello evitando que escapara.

Su pelo rubio está algo revuelto y suelto cayendo por su espalda, sus ojos son de un color azul eléctrico mostrando que su estado salvaje predominaba ante su lado racional.

Una mueca de desagrado en sus finos labios los cuales está levemente abiertos mostrando sus colmillos afilados por el celo.

Cómo ropa tan solo lleva un camisón de tirantes rosa palido que le llega a cubrir a duras penas su intimidad. Sus uñas están afiladas, parecían garras las cuales sujetaban con fuerza las cadenas tratando de romperlas.

- hermanita - dije con sorpresa mirándola directamente a sus ojos. Ojos sin brillo, opacos y perdidos.

Ella caminaba con su espalda encorbada acercándose cada vez más a mi. Soltó un leve gruñido cuando estuvo en frente mío. Ella no trata de atacarme por los barrotes.

- Natsu - susurro ella.

Definitivamente éste es el peor celo que ha sufrido, su pensamiento se centraba en su Mate, tan solo en él. Mordi mi labio inferior con impotencia. Cerré también mis ojos, es tan doloroso ver a mi propia hermana sufrir.

Abrí levemente los ojos y me encontré con que Lucy estaba a punto de pegarme con sus garras rompiendo uno de los barrotes por la fuerza.

- ¡Kya! - grité con miedo y con sorpresa dando unos pasos hacia atrás tropezandome de manera que caí al suelo sentada.

Observé aquella escena con sorpresa abriendo mis ojos hasta más no poder, abrí mi boca soltando un gemido de sorpresa mientras unas pequeñas lágrimas salían de mis ojos.

Ella movía su brazo tratando se liberarse haciendo que todo mi cuerpo comenzara a temblar de miedo. Miedo a mi hermana, mi querida hermana la cual siempre me apoyaba.

- ¿Michelle? - preguntó confundida.

Al final abrí mis ojos vi a mi hermanita, parecía asustada sus ojos ahora marrones y con brillo estaban abiertos de par en par. Su boca también estaba levemente abierta.

- ¿Qué? - miró a su mano y pude apreciar que había conseguido romper los barrotes rápidamente retirandola - ¿Que he hecho? - preguntó con incredulidad mirando de la misma manera su mano derecha.

Rápidamente llevó su mano a su pecho sujetandola con la otra dando unos pasos hacia atrás. En un momento cayó al suelo mirando su mano con terror.

Alzó su vista con pequeñas lágrimas saliendo de sus ojos soltando jadeos de preocupación con su respiración agitada. Cerró sus ojos y giraba su cabeza una y otras vez.

Abrió sus ojos y me miró tu preocupación - dime que no te he hecho nada - pidió ella con lágrimas cayendo por sus mejillas. Nunca había visto a mi hermana demostrando debilidad desde que volvió del mundo estelar.

Antes de que pudiera hablar la puerta se abrió dejando ver al abuelo y mi hermano entrar para ayudarme. Giré mi cabeza para poder ver a Lucy y sus ojos tenían un extraño brillo azul eléctrico el cual aumentaba.


























Continuará.....

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