Una Omega diferente

Amor de hermanas

Pov Michelle

Al ver a mi hermana tan destrozada no pude evitar sentirme desolada. Di un gran pasi hacia delante y esntendí mis brazos con las lágrimas aún amenazando con salir de mis ojos.

Abracé a con fuerza a mi hermanita por el cuello y la tiré a mi hermana al suelo. Ella quedó sentada con sus manos apoyadas sobre el suelo detrás de ella. Sus piernas están levemente abiertas.

Yo por otro lado me encontraba arrodillada entre sus piernas. Mi espalda arqueada hacia delante abrazando con fuerza a mi hermanita por su cuello. Casi cómo si tuviera miedo de perderla. Perderla de nuevo, eso sería algo.... horrible.

- Mi

- Lo siento - interrumpi la débil voz de mi querida hermanita apretando con fuerza mi agarre - se me olvidó. Se me olvidó que tu también sufrias - medio lloriquee para después colocar mis manos en los hombros de ella. Lentamente me separé de ella y pude ver su rostro.

El rostro de mi hermana demostraba dolor, sus ojos entre cerrados y hinchados por las lágrimas. Su piel pálida y el tembleque de todo su cuerpo. Su respiración es irregular y totalmente cargada.

Por otro lado yo tenía una sonrisa melancólica en mis labios mis ojos entre cerrados y pequeñas lagrimas saliendo de el rabillo de mis ojos.

- Hermanita, ya te he visto sufrir suficiente, ya has sido fuerte por mi durante demasiado tiempo. Déjame cuidarte. Por favor - pedí deslizando mis manos por sus brazos y llegar hasta sus manos. Sujeté con fuerza sus manos y las coloqué sobre mi pecho. Bajé mi cabeza y alcé mi vista para ver los ojos de sorpresa de mi hermanita - Ya te perdí una vez. No quiero volver a perderte - lloriquee con una sonrisa forzada en mis labios.

- Michelle - dijo ella con sorpresa al mismo tiempo que sus ojos comenzaban a recuperar el brillo natural de sus ojos.

- No te voy a pedir que de un día para otro vuelvas a ser la chica feliz después de haber sufrido lo que hemos sufrido - afirmé con mis ojos enrojecidos. Una pequeña lágrima comenzó a salir de mis ojos y mi mandíbula inferior comenzó a temblar - pero te pido, por favor que superemos esto, que lo superemos juntas - cerré mis ojos y pude sentir como las lágrimas comenzaban a caer por mis mejillas.

Con un rápido movimiento me abalance sobre ella abrazandola con fuerza por sus hombros al mismo tiempo que mi cuerpo comenzaba a temblar. No podía evitar que mi cuerpo reaccionara así.

- Hermana - escuché su voz adolorida lo cual me dolía, pero a la vez podía escuchar un poco de esperanza en su voz - Me siento tan tonta - declaró y pude sentir sus brazos rodear mi cintura. Ambas nos unimos en un cálido abrazo familiar.

Ambas lloramos con una sonrisa entre nuestros labios. Ya nos hemos tenido demasiada auto comparación. Es hora de dejar el pasado atrás y viajar hacia delante. Pero claro, sin olvidarnos de él ya que nuestro pasado nos moldean hasta convertirnos en lo que somos.

Varios minutos después ambas nos separamos separamos. En nuestras mejillas se veían el surco de nuestra lágrimas. Ya estábamos más tranquilas y nuestros corazones ya latian con tranquilidad.

— Hermanita, nunca te dejaré sola — afirmé con mis ojos entre cerrados. Ambas entrelazamos los dedos de nuestras manos y alzamos nuestras manos.