Mi inspiración.

8. AMIGOS

Yoongi estaba sumergido en su música, tenía la página de su cuaderno llena de palabras y tachones. Echó la cabeza de atrás, cerró los ojos y se recostó en el respaldo del banco. Estuvo así varios minutos, cuando la canción se acabó le surgieron varias ideas que se dispuso a anotar en su cuaderno, cuando abrió los ojos se dio cuenta de que no estaba solo en el banco. Se giró y se quedó mirando a su acompañante, un cabizbajo Taehyung que sostenía un lienzo en el cual estaba a medio dibujar un lago, con unos patos y unas flores.

Yoongi se sorprendió, no sabía cuánto tiempo llevaba el muchacho allí sentado, pero no le hizo ninguna gracia, ¿había ido allí para hablar con él?, que pesadilla. Pensó que lo mejor sería irse, así que apagó la música, se quitó los cascos y cerró su cuaderno.

Antes de levantarse volvió a mirar a Tae, este seguía en la misma posición que hacía varios minutos, ni siquiera le había mirado. Se dio cuenta entonces que tenía la mirada pérdida, mirando al infinito y que este no había hecho amago de hablar con él. Parecía como un cachorro abandonado, así que muy a su pesar Yoongi decidió darle un toquecito en el hombro. En ese momento Taehyung se giró y cuando sus miradas se cruzaron, este abrió mucho los ojos, claramente no se había percatado de que había terminado sentado al lado de Yoongi.

-¿Estás bien?- Preguntó Yoongi mientras le miraba con curiosidad

-Eh... si, estoy bien. No sabía que estabas aquí. Siento haberme sentado aquí, no quería molestarte- se excusaba Taehyung mientras bajaba la cabeza

-No me molestas, no te preocupes. ¿Has venido a pintar?- No sabía por qué, pero sentía curiosidad por saber que hacia allí Taehyung y que era lo que le había sucedido.

-Sí... estaba al otro lado del lago pintando, al final he terminado aquí.- subió los hombros, fingiendo que no era nada importante- ¿Estabas componiendo?- preguntó mientras señalaba el cuaderno de Yoongi

-Sí, había pensado que tal vez un poco de música y un ambiente tranquilo me ayudaban a inspirarme.

-He pensado lo mismo. ¿Te has servido la inspiración?- Taehyung lanzó una sonrisa cómplice a Yoongi.

- Pues la verdad es que sí, aunque no sé si es lo suficientemente bueno como para ser considerado algo de calidad. Pero supongo que por algo se empieza- Yoongi miraba con el ceño fruncido su cuaderno.

-Yoongi... seguro que es algo que merece la pena ser escuchado. ¿Estabas escuchando rap, verdad?- Yoongi solamente asintió mientras le miraba fijamente- Yo... sabía que te gustaba el piano, porque... bueno, te vi aquel día- Hizo una parada esperando a que Yoongi le cortase, pero este por alguna extraña razón le miraba atentamente y continuaba en silencio- ¿Me vas a escuchar hoy?

-Mmmmm...- Yoongi ladeó ligeramente la cabeza y asintió levemente. No sabía por qué, pero el ver que Taehyung había ido al mismo sitio que él a buscar inspiración, hizo que sintiese una conexión especial. Tal vez fuesen más parecidos de lo que se pensaba, quería escuchar esa explicación el peliazul se había esforzado tanto por darle.

-Bien. El otro día fue a buscar a Nam porque... bueno, tuve un problema en la facultad con un trabajo y pensé que él podría ayudarme. No era nuestra intención molestarte ni espiarte, pero pasamos por allí y... joder Yoongi, ¿Cómo puedes tocar tan bien y con tanta pasión? Me quedé impresionado- Taehyung se había girado y se había puesto de frente a Yoongi mirándole con los ojos brillantes- Nunca había visto a alguien tocar con tanta pasión como tú. Hiciste que se me olvidara incluso el mal rato que había pasado en la facultad, me sentí reconfortado, me gustó mucho.

Yoongi se quedó con la boca abierta, incrédulo, mirándole. ¿Qué le había gustado? Le había... ¿reconfortado? Eso significaba que ¿había llegado a los sentimientos de una persona? Imposible.

-¿Me estás tomando el pelo verdad? No me gusta que...

- ¿Tomando el pelo?- Taehyung comenzó a reír con fuerza- ¿En serio? Pero Yoongi, ¡si tienes un talento increíble! ¿Por qué te creías qué nos habíamos quedado Nam y yo escuchándote? ¿Por tomarte el pelo?- Decía mientras continuaba riéndose, sus ojos formaban unas rendijas tan estrechas que su azul no se vislumbraba

-Yo... sí, la verdad es que pensé que os reiríais de mi o que me delataríais a algún profesor porque se supone que no se puede usar el aula...- Respondía cabizbajo, sintiéndose un poco estúpido en ese momento- Tu cara fue... tus ojos, estabas asustado- Se frotó la muñeca mientras miraba a los ojos a su compañero de banco.

-¿Cómo nos íbamos a reír de ti? En todo caso me reiría de Nam. Tocas el piano muchísimo mejor que él. Y sí, me asusté, porque reaccionaste de una forma que no me esperaba. Siento mucho lo que pasó.

-Yo también lo siento, me había hecho una idea totalmente equivocada.

-¿Amigos?

-¿Có... Cómo?

-Ahora que lo hemos aclarado, ¿podemos ser amigos, no?- Taehyung tenía una sonrisa cuadrada dibujada en su cara, mirando a Yoongi con esperanza.

- Eh... pues... bueno. Sí, supongo que sí- respondió algo confundido Yoongi.

-¡Estupendo!- dijo Taehyung mientras daba una palmadita a Yoongi en la espalda en señal de amistad- Pues llámame Tae- Yoongi asintió- Me tengo que ir Yoon, ya nos veremos. ¡No creas que perderé la oportunidad de volver a sentirme inspirado y reconfortado con tu música!

Tae recogió sus cosas y se marchó de allí despidiéndose con la mano, mientras Yoongi le respondía tímidamente de igual forma.

Yoongi se quedó mirando el sitio donde había estado Tae minutos antes. ¿Había estado malinterpretando todo? Parecía buen chico y le había juzgado sin ninguna razón. Había sido un completo idiota, había hecho daño a Tae y a él mismo también.

No entendía muy bien que era lo que había pasado, pero se sentía... extrañamente bien. Recogió sus cosas y se marchó de allí recordando la sonrisa cuadrada de Tae y sus ojos azules brillantes de felicidad. Yoongi caminaba con una sonrisa sincera en sus labios. 

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*So please just don't leave me * 

*You got the best of me*