Fuego || Z.M.

1.5

Suspire suavemente, dejando que mi cuerpo se deslizara por el sofá, mientras Jared explotaba en una especie de crisis de nervios. Sí, sabía que esto sucedería, para él es difícil que un plan no salga como él quiere. Intentaba explicarle que la situación se salió de control, que no es mi intensión hacer estas cosas, simplemente mi cuerpo cobraba vida a parte, ignorándome y mandándose a sí mismo. Me llamó loco, bipolar y que no me excusara como si fuera una especie de sujeto con doble personalidad, pero solo lo miraba con seriedad ¿Quién sabe?. Luego el arrepentimiento no era una opción. SI algo resultaba favorecedor para mí y si eso calma mi enojo, estoy tranquilo, así que a mi parecer hice lo mejor que pude

Él tiene una idea muy diferente de la cual yo tengo respecto a nuestro trabajo, él es un chico con una increíble moral que está en el lugar equivocado. Jared siempre quiere darle lo mejor a las personas, el problema es que es ayudante de un sicario. Yo por mi parte soy un demonio que crea infiernos, apretando un gatillo cada vez que mi jefe me lo pide o que mi vida depende de ello. No tengo miedo de asesinar y me valgo por mí mismo... Él nunca entendería ese pensamiento egoísta por el cual me rijo.

-¡Y la dejaste donde Rodrigo!-se volteó de golpe, viéndome con una expresión llena de indignación en su rostro. Su mano estaba en su frente, haciendo dramatismo como siempre. Esto parecía más una escena de una estúpida comedia en la TV que un momento de enojo-

-Le dije que se fuera e igualmente yo tengo la llave del cuarto donde la metí, Jared, ya cálmate-me puse de pie, superando ligeramente la altura de mi amigo-

-Eres un idiota, Zain, un completo idiota. Si viola a esa chica estará en tu conciencia-me señalo acusadoramente, lo cual solo me causo gracia-

-¿Cuál conciencia?-eleve mi comisura de mi labio, formando algo así como una sonrisa. Jared río como si contaba un buen chiste y luego me miro, volviéndose serio lentamente. De vez en cuando el parecía más psicópata que yo-

-En la cual está Stefanie, Flame, en la cual están todos esos que fueron un error o que no era el plan y lo sabes-cada palabra que soltó golpeo mi pecho, pero preferí hacerme el desentendido. Aquellos recuerdos los guardaba en lo profundo de mi alma, sin traerlos a la luz en ningún momento. Eran motivo de pesadillas, eran cuentos de terror que incluso a mí llegan a asustarme y aun así, seguía con la misma vida que me llevo a esos extremos-

-Ya he superado cada uno de ellos, Jared. Mejor hablemos del amigo de Tess Fritz-desvié rápidamente el tema-

-¿Por qué eres así, hermano? Actúas como si nada importa, como si odiaras a todos y a todo. Eres tan perfeccionista con nuestro maldito trabajo, mientras que cuando se trata de algo tan importante te vuelves mediocre. Tú, el súper calculador, siempre anticipando todo, dejas a la suerte la integridad de la castaña. Zain, no eres una mala persona, no en el fondo y deberías...

-¡Calla, maldita sea! Háblame cuando se te pase lo pendejo, Jared-odiaba sus palabras, odiaba sus regaños, odiaba que intentara llegar a mi moral y hacerme reflexionar o cambiar. No explotaría contra mi único amigo, no encendería incendios que pudieran quemarme a mí, prefería irme de ahí y volver cuando entendiera que no hablaría más de eso- Soy una mala persona, soy el diablo y me gusta serlo- le grité mientras le daba la espalda para irme de ahí. Lili, la lora empezó a gritar mi nombre desde su jaula-

-Zain, ve por Tess... -su mandato quedo en el aire, yo me dirigía a mi casa- ¡Zain Malik!-aquel grito resonó por el apartamento, justo cuando estaba por abrir. Hirviendo de un momento a otro, giré mi cuerpo y sacando mi arma, le apunte a Jared justo en la frente-

-¡Eres un hijo de puta, Jared!-di fuertes pasos hacia él, mientras Jared solo mantenía las manos arriba y su vista relajada, fría, sin miedo- ¿Por qué lo haces?-Lili seguía gritando mi nombre- ¡Calla a ese animal o lo mato en tu cara!-estaba descontrolado-