Fuego || Z.M.

0.6

Miré la maleta arder, derritiendo la nieve a su alrededor e iluminando la noche tan amarga que esta viviendo. Había pasado días ya en la cabaña, aislado en la habitación que fue de Jared, evitando el contacto y solo haciendo lo necesario para que tanto Tess, Jacket y yo comieramos. Ella pasaba sola también, no me miraba a los ojos y toda su actitud hacia mí parecía retroceder en el tiempo. Jacket pasaba caminando por la cabaña, olisqueando esquinas y esperando paciente junto a la puerta a la llegada de Jared.
Sentía un vacío en mi pecho, un peso en mis hombros y pensaba en la soledad... En la absoluta soledad que ahora vivía. No era difícil asimilarla, ya que había sido buena parte de mi vida, pero ahora me sabía mal.
El calor abrazaba mi cuerpo, el fuego parecía querer llegar a mí... El viento lo alentaba a alcanzar mi cuerpo y consumirme de nuevo, era tentador.

-Zayn-escuché a lo lejos una suave voz, pero era casi un susurro- ¡Zayn! -alce mis cejas y volteé a ver a Tess, parada en la puerta que daba al pequeño jardín-

-Hola pequeña-suspiré y miré nuevamente al fuego que poco a poco se iba acabando-

-¿Qué haces?-escuché sus pasos y pronto la sentí a mi lado, con cierta distancia entre ambos. No la miré, me mantuve en mi posición, con la mirada ida- piensas en algo -afirmó. Hice una mueca y asentí-

-¿Cómo lo sabes?-sonreí hacia ella y sus delgados hombros se alzaron- no nos conocemos lo suficiente para que sepas que hago al pensar.

-Solo soy un ser humano, Zayn, puedo sacar mis conclusiones-sus ojos estaban achinados por tanto llorar y sus mejillas no tenían color- ¿Te sientes bien?

-no-mire sus ojos unos segundos, notando su incomodidad a mi sinceridad- pero nunca lo he estado-me encogí de hombros desvíe mi atención hacia un balde de agua que reposaba a mi lado. Lo tomé y lo lancé al poco de fuego que quedaba de la maleta, dejando solo escombros y pedazos de metal- vamos adentro, hace frío.

-¿Era de Jared?-murmuró a mi lado, pasando por la puerta y luego volteandose solo para verme asentir- Zayn ¿Qué haremos ahora?

- tú... Volver a Londres-extendí li mano a su mejilla y la acaricié, ella frunció su ceño- yo aún no lo sé.

-¿Yo?... Zayn no quiero dejarte-la acerqué a mi con delicadeza y la besé, apretando su cuerpo contra el mío, sintiendo el poco calor que su cuerpo me podía transmitir. Mi corazón latía a su lado, el vacío parecía llenarse, pero tan dañino como una droga, nunca era suficiente- te amo-negué y di un paso hacia atrás, dejándola parada con sus brazos caídos y sus ojos rojizos al borde del llanto-

-¿No lo notas, pequeña? Ya no podemos... Ya no puedo-negué y miré al suelo, rendido- mira lo que ha pasado, mira como esto ha surgido, debes volver con tu madre, a tu vida, con...-bufé y la miré, tragando lágrimas-... ¿Por qué me amas?

-¿Cómo me preguntas eso?-apretó sus puños y las lágrimas empezaron a correr-

-¡Responde!-gruñí, aún sin mover mi cuerpo-

-pues no sé, solo te amo, te amo por quien eres, porque me cuidas, te preocupas por mí, porque..-la interrumpì de golpe, explotando en una rabia inexplicable-

-Me amas porque soy lo único que vez, porque tienes un corazón demasiado bondadoso para ver el mal que te he hecho, porque tu mente te ha jugado sucio y ahora tienes el síndrome de stocolmo. No he hecho para merecer tu cariño-di un paso hacia ella y entre temblores de cuerpo, una lágrima escapó de mi ojo- He sido malo contigo, te he maltratado, te he obligado a tanto ¿Qué tan mal de la cabeza debes estar para no verlo? ¿Tan sola te sientes? -ella lloraba tratando de mantener la postura. Al escucharme iba a hablar, pero con un grito contuve su intención- ¡Ódiame!