7. Kill

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La verdad era que me había acostumbrado a hablar con Min y, aunque lo acababa de conocer, no habíamos parado de intercambiar mensajes desde la llegada de su tweet

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La verdad era que me había acostumbrado a hablar con Min y, aunque lo acababa de conocer, no habíamos parado de intercambiar mensajes desde la llegada de su tweet. Se preocupaba por mí y, aunque me asustaba el hecho de que pensara en mí como alguien famoso e irreal y no como un ser humano corriente, la verdad es que era un buen chico.

Había intentado animarme cuando Mingyu descubrió mi secreto, mandándome links de vídeos de gatitos adorables –había comentado en el canal cuánto me gustaban y él parecía recordarlo bastante bien –y contándome alguna que otra experiencia en su trabajo que pudiese hacerme reír; sin embargo, la vida no era perfecta y es por eso que nos encontramos todos mis amigos y yo en nuestro pub de siempre y Mingyu. El chico pareció caer bien desde el primer momento, aunque Jun estaba un poco callado, demasiado asustado de que Jihoon lo matara y, por supuesto, Seungcheol estaba demasiado ocupado en ver a mi mejor amigo y vecino cuando estaba lo suficientemente distraído como para no darse cuenta de los corazones que le salían por los ojos a Cheol.

―Has tenido suerte. ―comentó Soonyoung, echando el peso de su cuerpo sobre el lado derecho del mío, para que su boca quedara a la altura de mi oreja y nadie más pudiese escucharlo. ―El chico parece... Agradable. Aunque ahora te hayas convertido en su servicio de la limpieza, no creo que vaya a traicionarte. ―Yo simplemente suspiré mientras que daba un gran trago a mi cerveza.

―Eh Won, ten cuidado, ¿qué te ocurre hoy? Normalmente eres el que menos bebe de nosotros. ―dijo Seungcheol. Mingyu me observaba curioso; sin embargo, no comentó nada al respecto, cosa que sí hizo Jun.

―Déjalo, el pobre está tan asustado de que Mingyu se vaya de la lengua que prefiere perder el conocimiento si eso significa que va a dejar de rayarse. ―Este, al escuchar su nombre, se removió en su asiento de forma nerviosa.

―Yo no... No voy a decir nada a nadie, ya se lo dije. ―murmuró tan bajo que por poco no lo escuché sobre la música que salía de los altavoces.

―No le hagas caso. ―Intervino Jihoon. ―Si piensas que Wonwoo es un idiota es porque no conoces a este capullo. ―dijo mientras que golpeaba con su puño las costillas de Jun y este se quejaba tan exagerado como siempre.

La noche pasó rápido, mucho más de lo que esperaba, aunque también era posible que fuese gracias a ese zumbido que sentía en la parte posterior de mi cabeza mientras que acababa mi quinta cerveza.

―Wonwoo no pienso llevar tu culo enclenque a casa esta noche, ya lo hice una vez con Jihoon, no quiero que se repita. ―La voz de Mingyu había sonado ronca gracias al par de cigarrillos que se había fumado a lo largo de nuestra... Reunión.

―No eres mi padre, cállate. ―respondí alargando las palabras. ¿Por qué todo se movía? Si no se quedaba todo quieto acabaría vomitando hasta mi primera papilla y aquello no debía de ser agradable.

―Eso, eso. ―gritó Jihoon con entusiasmo. El pobre ya tenía el rostro enrojecido gracias al alcohol. ―Cállate, Kim Mingyu, no tienes por qué recordar aquella noche. ¿Quieres que me muera de vergüenza? ―Su labio inferior comenzó a temblar y, aunque nunca había visto a Jihoon llorar, no era algo que quisiera presenciar tampoco. Aunque su actuación fue todo culpa del alcohol, Seungcheol parecía no tener el corazón para dejar que el chico llorase.

I'm not your fan! [MEANIE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora