I'm not your fan! [MEANIE]

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La noticia de que debíamos de volver a casa no fue agradable para Jihoon quien pataleó hasta que el resto de mesas nos observaban algunos con el ceño fruncido y otros más divertidos de presenciar tal escena.

―¡Basta, Jihoon! ―gritó Seungcheol mientras que intentaba que dejara de mover los brazos como si fuera un bebé, aunque lo único que logró fue llevarse un puñetazo en la cara que muy probablemente le conllevaría un ojo morado.

―¡Cállate, idiota! ¿Por qué no le dices a Mingyu que no me lleve a casa? Él es el único que está haciéndole la vida imposible a Won sabiendo que él es B-

Y muy posiblemente después de aquello simplemente estaba muerto. No, no Jihoon. Sino yo. Y digo que debía de estar muerto porque no me creía que Seungcheol estuviese besando a Jihoon. Justo en nuestra mesa de siempre, delante de todo el mundo.

¿Cuántas agallas había que tener como para besar a tu crush durante años delante de todos? No, no, mejor aún. ¿Cuántas agallas había que tener como para besar a Lee Jihoon? Porque ese cabrón y su metro sesenta podía matarte con una sola patada.

―Hostia. ―Las carcajadas de Jun podían ser escuchadas en un radio de dos kilómetros. ―Mira, es que no me lo creo. ―dijo entre risas cuando ya había comenzado a grabar la escena.

Jihoon parecía no moverse, con los ojos cerrados tan fuerte que aparecieron varias arrugas en su rostro. No sabía si era bueno o no el hecho de que no se hubiera apartado, posiblemente estuviera tan borracho que sus músculos estaban dormidos.

―Joder, dios, mira, J-jihoon. Y-yo, lo siento. ―chilló Seungcheol cuando se apartó, corriendo hacia la salida. Mi amigo se quedó congelado en su asiento, mientras que con la mirada seguía al mayor viendo como huía.

―Me cago en todo, tíos, no me dejáis ni emborracharme tranquilo, coño. ―murmuró antes de salir corriendo detrás de Seungcheol.

―Estoy flipando. ―susurró Soonyoung. ―Jun, dime por la madre que te parió, que has grabado este momento.

―¿Tú crees que no iba a hacerlo? Me cortaría las manos si no lo hubiera conseguido. ―contestó el otro.

―Pásamelo y, por favor, si por casualidad muero antes que vosotros espero que podáis conseguir una pantalla de cine que proyecte este momento en bucle, Won cuento contigo. ―respondió Soonyoung.

―¿Estás seguro de que puedes llevarlo tú solo? ―preguntó Jun a Mingyu. Yo me apoyaba como podía en su hombro, aún con mi mente zumbando por culpa del alcohol. Mi vecino sonrió de forma torpe, mientras afianzaba su agarre en mi cadera.

―No creo que haya problema, de cualquier forma no pesa mucho y podría llevarlo en mi espalda sin mucho esfuerzo. ―dijo riéndose; sin embargo, se le cortaría rápidamente cuando, al desaparecer mis amigos, me tiré al suelo. ―Jeon Wonwoo, ¿qué cojones estás haciendo?