LEGENDARIO FARAÓN

PARTE 12: PROBLEMAS CONYUGALES IV

- Los hechos de este capitulo, suceden segundos después del capitulo anterior.

- En los jardines del palacio:

Guardia menor: Oye no crees que el soberano se paso en castigar de tal modo al general, y eso que es su familia, no me imagino que haría con nosotros.

Guardia mayor: No somos nadie para criticar las decisiones de nuestro rey, así que si no quieres unos latigazos, debes cerrar la boca y hacer tu trabajo, los preguntones como tú, no viven mucho tiempo.

Guardia menor: Si como digas mayor, pero yo creo que...

Guardia menor: Esto se va a poner feo, mira quien se acaba de despertar...

Guardia mayor: Puedes cerrar tu maldita boca, lo que faltaba, la princesa viene hacia aquí...

Henutmire: Buenos días soldados ¿han visto al general?

Guardias mayor: Buenos días mi princesa, por ordenes del rey, yo estoy cubriendo las funciones del general en su ausencia.

Henutmire: ¿Por que?¿Acaso esta enfermo?

Guardia mayor: Pues vera princesa, sera mejor que se lo pregunte a su padre.

Henutmire: ¡No!¡Te ordeno que me lo digas, empieza a hablar!

Guardia mayor: Pues igual se iba a enterar tarde o temprano, el general Disebek fue azotado a pocas horas del amanecer, yo fui quien realizo el castigo por ordenes de su padre.

El rostro de la princesa cambio en un instante, su nivel de furia era muy evidente, el guardia menor se asusto tanto que se alejo poco a poco de la conversación...

Henutmire: Así que se atrevió a hacerlo, aprovecho mis horas de sueño para poder cumplir su estúpido castigo, padre esto no te lo voy a perdonar. 

Guardia mayor: Mi princesa espero me disculpe, yo solo obedecí ordenes de mi soberano.   

Henutmire: No te disculpes, solo hacías tu trabajo, te conozco y se que eres muy amigo de Disebek. Pero necesito saber donde se encuentra mi esposo, el necesita mis cuidados.

Guardia mayor: Perdón princesa, pero no lo eh visto desde esa ocasión.

Entonces el guardia menor escuchando desde lejos, grito...

Guardia menor: Yo si lo vi...

Henutmire: Dígame ¿donde esta?

Guardia menor: Cuando termine de tomar el desayuno, después del castigo al general. Lo vi caminar herido hacia una viga, intente detenerlo, pero acelero a los caballos y se fue. Creo que se dirigía al pueblo hebreo.

Henutmire: ¿Que?¿No hiciste nada? Es tu general, sabiendo que estaba herido, lo dejaste ir solo...

La princesa dio una mirada amenazante al guardia menor, se volteo y camino rápidamente hacia el aposento del todopoderoso rey de Egipto.

Guardia mayor: ¡Eres un estúpido!¡Después de horas, recién abres el pico! Sabes que esas heridas tienen que ser tratadas, si no la persona puedo morir de dolor, lesiones, infecciones, perdida de sangre o fiebre.

Guardia menor: Pero pensé que se dirigía hacia algún medico del pueblo, es el general, tiene sus contactos.

Guardia mayor: ¡Tú no piensas!¡Tú solo ves algo y me lo dices! Ruega a los dioses que el general este aun con vida, por que si es lo contrario, tu temor de los latigazos se va a cumplir, y te aseguro que la princesa será la primera quien te corte el cuello.

El guardia menor no dijo ni una solo palabra , el solo era un novato y ya estaba empezando a darse cuenta, lo grave de su situación...

- En el aposento real:

Tuya: Sabes que es cuestión de tiempo, para que nuestra hija venga ¿verdad?

Seti: Si soy consciente de ello, estoy listo para enfrentarla.

Tuya: Yo también la esperaré, no quiero que ella cometa una estupidez, que tenga como resultado su muerte.

Seti: Exageras mujer.

Tuya: Ya llego...

Desde afuera del aposento se escuchaba que la princesa gritaba al guardia que se apartará, este no se opuso dejándola ingresar y cerrando la puerta...

Seti: ¿Que deseas?¿Esas son formas de saludar a tu rey?

Tuya: Contrólate hija, créeme que ese castigo que recibió Disebek, no es nada en comparación a las atrocidades que a cometido tú padre, en su años de juventud.

Henutmire: ¿Como pudiste hacerle algo como eso a tu yerno?

Seti: Hija, estoy siendo muy paciente contigo, créeme cuando te digo que ese será el ultimo castigo que recibirá tu marido, si no me sigues retando.

Henutmire: Por supuesto que será el ultimo, por que no creo que sobreviva, Disebek se fue en una viga a dirección al pueblo, y con esas heridas no creo que llegue tan lejos, todo por tonto capricho de demostrarme tu posición.

Tuya: Por los dioses, como permitieron que se suba a una viga en esas condiciones.

Seti: ¿Quien te contó eso?¿Acaso tu marido no acudió a Paser?

Henutmire: Paser estuvo con Moises hace 20 minutos, y no sabe nada de Disebek. Y quien me lo contó, fue un guardia novato, lo vio de lejos y no le alcanzo tiempo para detenerlo. 

Seti: ¡Guardia!

Tuya: No has de castigar al pobre joven ¿verdad?

Seti: No te metas mujer, por quien me tomas...

Guardia: ¿Que desea mi señor?

Seti: Junta a un grupo de 10 soldados y busquen al general Disebek, deben empezar por los caminos en dirección al pueblo, que Paser vaya con ustedes, por las heridas, él debe de estar hirviendo en fiebre.

Guardia: ¡Como ordene mi soberano!

Henutmire: Yo también me voy, no soporte verte a la cara, cada vez haces crecer el odio que tengo. Si no te importa mi hijo me necesita, tengo que estar a su lado. 

La princesa abrió la puerta y lo cerro con mucha fuerza...

Seti: Disebek es un tonto, no pensé que su orgullo fuese tan grande, no dejar que su esposa lo veo herido, eso le puede costar la muerte.

Tuya: Ojala que nuestro yerno este en buenas manos. Por otro lado nuestra hija reacciono bien, solo que ahora te odia más, espero que tu plan aun siga en pie.

Seti: Claro, eso no afecta en nada, pero si Disebek muere, nuestra hija también lo hará en vida.

Tuya: Iré a despertar a Ramses, el pobre se quedo dormido.

Seti: Si mejor despierta al futuro faraón, el cual duerme hasta tarde, vaya destino le tocara a Egipto en su mandato.

- En los caminos hacia el pueblo hebreo:

Disebek: Ya esta amaneciendo, y siento que cada vez me estoy perdiendo fuerzas para poder sostenerme de la viga, si me caigo en mis condiciones, soy hombre muerto, no puedo soportar este sueño...

Disebek: ¿Pero que? Solo cerré un poco los ojos y ya esta el sol con todo su resplandor, este calor me esta matando más que las heridas, ya no puedo mas con esto, tengo que dormir... 

Disebek: Por favor dioses, denme fuerzas para seguir con...

En ese momento el general se desvaneció, soltó las cuerdas que lo mantenían en una posición segura en la viga, no demoro en caerse en medio del camino. De lejos se podía escuchar como una carroza de carga se acercaba, en dirección a un hombre destinado a la muerte...