Sakura y Sasuke

Día 20 "Sarada aprende a nadar"

Sarada Uchiha

Sakura estaba inmóvil cuando el director de natación le daba el reporte del comportamiento de Sarada, el cual no era nada bueno.

─ Debo decir que su hija señora Uchiha es demasiado voluntariosa e impulsiva, no creo que podamos enseñarle a nadar, necesita paciencia y creo que sus padres serían los mejores mentores y guías en este proceso de su enseñanza, además su esposo y usted son destacados Shinobi de la aldea de la Hoja, no veo cuál sería el problema.

Sakura suspiro para sus adentro ─ Lo comprendo, ahora si me dice cuánto resto por liquidar, me marcharé junto con mi hija, quien la esperaba fuera de la oficina del director y dueño de la escuela

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Sakura y Sarada caminaban de regreso a su casa, dejando detrás suyo la escuela con un enorme letrero que decía; "Se suspenden las clases por una semana, atte. La administración"

─ "¡Fue exorbitante!" ─ Sakura pensó en todo lo que había tenido que pagar después de la última lección de su hija para aprender a nadar ─ "Nunca supondría que haría tal destrozó en la escuela"

La pequeña observó preocupada a su mamá y supuso que estaba molesta ─ ¿Estás enojada, mamá? ¿Ya no vendré a la escuela?

─ ¡Eh! No, no estoy molesta Sarada, pero ya no podrás regresar a esa escuela.

─ Pero es la tercera escuela que tengo que dejar y el próximo año entraré a la academia Ninja, ¿qué voy hacer? Todo ya saben nadar, incluso el tonto de Boruto, además su papá fue quién le enseñó, ¿por qué mi papá no está aquí para enseñarme? ─ Preguntó con un deje de tristeza.

La tristeza que invadió a Sarada de repente fue compartida por Sakura, sabía que era totalmente injusto lo que su hija acababa de decir, así que se agacho para estar a la altura de la pequeña niña de 5 años ─ No te lo había dicho, ¿verdad? Se acerca el verano y tu papá vendrá para llevarnos de vacaciones a la playa y aprovechará para enseñarte a nadar.

El rostro de Sarada se iluminó de una manera pasmosa, y Sakura sonrió compartiendo su felicidad.

─ ¡Hey! ─ Gritó a todo pulmón ─ ¡Papá vendrá a visitarnos!

Sakura vio a su pequeña y ahora la duda es cómo haría que su esposo regresar para enseñar a su hija a nadar.

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Oficina del séptimo Hokage

─ ¡Ah! Sakura-chan! ─ Exclamó Naruto al ver a su amiga entrando a su oficina inundada de papeles.

─ Hola Naruto.

─ ¿Qué haces aquí? ─ viendo como su amiga entrecerraba ojos ─ No me malentiendas, es que muy temprano y siempre estás en el hospital bastante ocupada, ¿suceda algo?

─ Es Sarada ─ Dijo en un suspiro.

─ ¿Sarada? Por favor cuéntame ─ haciendo un ademan para que se sentara en la sillas que se encontraban frente a él.

Sakura suspiro y empezó a relatarle la situación a la que se enfrentaba la pequeña Sarada...

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Playa, dos semanas después

Sakura y la pequeña Sarada chapoteaban cerca del mar, tenían un día de haber llegado a solas a la playa, en espera de Sasuke.

La pelirrosa estaba pensativa, confiaba ciegamente en la promesa de Naruto, diciéndole que Sasuke las alcanzaría en la playa, debía de dejar de preocuparse, su amigo nunca le había fallado y no empezaría ahora, ¿verdad?

─ Mami ─ la llamó su hija tocando su pierna izquierda ─ ¿Mi papá vendrá o tuvo alguna misión peligrosa?

La voz de Sarada la sacó de sus pensamientos y con una tierna sonrisa contestó su duda ─ Tu papá vendrá, no hay nada más importante para él que tú.

─ ¿Eso es verdad? ─ Preguntó de nueva cuenta la niña algo emocionada.

─ Tu madre tiene razón ─ La voz profunda y grave de Sasuke dejó inmóvil a Sakura, mientras Sarada corrió hacia su padre esperando un abrazo, el cual fue solo de un sentido, pero suficiente para hacer brillar los corazones palpitantes de la familia Uchiha.

Las lágrimas se agolparon en los ojos de Sakura, su esposo estaba aquí con ellas con el objetivo de pasar tiempo con su familia y enseñarle a nadar a su pequeña.

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5 meses después en la Academia Ninja de Konoha

Los alumnos vitoreaban el nombre de Sarada, quien había ganado en la competencia de natación contra los alumnos de primer ingreso de las aldeas aliadas a la Hoja.

La adulación por parte de todos los presentes era notoria, sin embargo, el carácter un tanto agrió de la niña al igual que el de su padre era palpable, pues se sentía un poco avergonzada por ser el centro de atención.

─ ¡Sarada, nadaste excelente! ─ La felicitaron sus amigos.

─ Sí, Sarada, no tuvieron oportunidad, dime, ¿dónde aprendiste a nadar?

Esa pregunta la sacó de su ensimismamiento ─ ¿Eh? Mi padre, él fue quien me enseñó ─ ofreciéndole una afectuosa sonrisa que más bien iba dirigida a su padre, Sasuke Uchiha.

En eso apareció su mamá ─ Sarada muchas felicidades ─ abrazándola con extremo cariño.

─ Gracias, mamá.

Otra sonrisa más ─ Ven ─ tomándola de la mano ─ regresemos a casa debemos escribir una carta a tu papá relatando tu victoria de este día, seguro le alegra saber que fuiste la mejor en la competencia de natación.

─ ¿En serio crees que le alegré? ─ Preguntó la niña con gran inocencia.

─ ¡Oh! Claro, puedo apostar que así será.

Día 20 finalizado / 20072019

Hola!!

La veintava entrega jejeje y debo de contarles algunas cosas:

1. Este tema me encantó escribirlo, lo adoré, en verdad lo adoré.

2. El lunes 22 será un día con lime.

3. Hoy acabo de terminar de escribir todos los temas y estoy realmente feliz, se acabó la probabilidad de que me desvelara jajaja

Les agradezco mucho el tiempo que me regalan y espero que les haya gustado, tanto como a mí escribirlo

Nos seguimos leyendo.

Saludos!!