Un Recuerdo Inolvidable [Crossover]

20

Su objetivo estaba ahí a escasos dos metros de su alcance, bien resguardado tras la placa de acero del rincón. Llevaba un buen par de minutos calculando la distracción perfecta para poder esquivar a su custodio y salir victorioso, pero enseguida se dio cuenta que no sería necesario. El hombre estaba distraído de por sí y supo entonces que ese era su momento. No habría otro mejor. Caminó lentamente con gestos fútiles como quien habla del tiempo y estiró la mano logrando al fin abrir la puerta, recibiendo al momento el esperado golpe de frescor en el rostro. Su mirada se posó sobre el objetivo y sonrió mientras lo alcanzaba, paladeando la victoria mientras bajaba la guardia. 

—Tony, ni se te ocurra — tronó la voz de Frank a sus espaldas. El mentado se tensó de inmediato y se giró un poco para encontrarse con ese par de penetrantes ojos azules mirándole fijamente —. Esos pasteles son para los niños, ya lo hemos hablado. 

—¿Por quién me has tomado? — respondió dramáticamente ofendido —. Solo quería algo de beber.

—Ajá. ¿Ketchup? — arqueó una ceja mirando el bote que Tony había agarrado. Lo primero que encontró. 

El moreno chasqueó la lengua contra el paladar y aceptó en silencio su derrota mientras depositaba el bote de ketchup de vuelta al estante, y cerró la nevera para volver a sentarse frente a su triste café descafeinado con un bufido. Ni en su propia casa le permitían hacer lo que quisiera.

—¿Cómo demonios te has dado cuenta? Llevas un buen rato ignorándome deliberadamente — se quejó con un puchero mal disimulado. 

—No estaba ignorándote, solo... pensando. 

—Te dije que olía a quemado, Jarvis.

—Idiota — masculló Frank con media sonrisa, lanzándole una miga de pan a la cara que el moreno esquivó con una sonrisa.

—¿Qué te ronda la cabeza? — preguntó Tony una vez calmó las risas.

—Estaba preguntándome... ¿cómo es eso de llevar una doble vida? 

—¿Es que quieres hacerte drag queen? Profesor de día y Penny Tration* de noche. 

—Ya te gustaría...

—No sabría decirte — rió entre dientes. Aún no había dejado que Frank fuera el activo y pensaba seguir evitando hablar de sexo el tiempo que fuera necesario —. ¿A qué te refieres con llevar una doble vida?

—Ser superhéroe. ¿Cómo se hace para mantener algo así oculto a los más cercanos? O ¿cómo afecta a uno mismo tener que callar un secreto tan grande? 

—Sinceramente, no tengo ni idea. Como bien sabes, yo salí del armario como Iron Man desde prácticamente el primer día. Pepper siempre dice que tengo incontinencia verbal.

—¿Y los demás?

—Mmm... Barton no lo oculta, de hecho se recrea en que es un Vengador. Natasha es un misterio en sí, cuesta realmente identificar cuál es la verdadera. Banner simplemente se aleja de todo el mundo por miedo, y lo de Thor es cosa de familia, así que... — se encogió de hombros —. Supongo que el único que lleva esa doble vida es el Cap. ¿A qué viene el interés?

—Simple curiosidad — respondió rápidamente. Demasiado rápido, al parecer de Tony. 

—No irás a decirme que también tienes poderes o alguna habilidad extraordinaria, ¿no? — usó un tono jocoso para ocultar su propia curiosidad. 

—¿Ser el mejor novio del mundo cuenta? — Frank sonrió mostrando toda la hilera de dientes blancos, transmitiéndole una enorme calidez a Tony al proclamarse "novio". Su novio.