[ CHILENSIS ]
en donde al cristóbal,
le gusta la sofi.
pero la sofi no lo pesca
porque es un niño mal portau.
🌷| prohibida la adaptación-imitación de esta historia.
🌷| derechos de autor reservado.
•LLEGAMOS A 1K DE READSSS, ME SIENTO MUY FELIZ Y ORGULLOSA, GRACIAS INFINITAS POR VOTAR Y TOMARSE EL TIEMPO DE LEER MI NOVELA, SON SERES INCREÍBLES Y ESPERO NO SE ABURRAN NUNCA DE NMP👺.
•Como dije, por llegar a 1K sale maratón de tres capítulos, espero lo disfruten harto.
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•Sin máspreámbulos, comencemos con esta mini maratón.
charlespulento🍌
(..) Maratón 1/3
Dante.
La Sofía con el Cristóbal habían salido al patio hace como 20 minutos, así que decidí (no debí haberlo hecho) salir a ver qué onda, me encontré con la bella (uy sí) imagen de los dos dándose besitos.
La sangre comenzó a hervirme, mi rostro se había puesto rojo por lo que pude sentir, así que lo que hice después, fue por impulso y por ganas de alejarlo de mi mujer.
—Te dije que no te le acercaras, saco huea —grité antes de tomar al Cristóbal de la polera y tirarlo al piso, me coloqué encima de él y comencé a pegarle unos cuantos combos en su rostro, claramente no me fui sin recibir nada, en menos de diez segundos, el que tomó la delantera fue Cristóbal devolviéndome cada uno de los golpes que le proporcioné.
Escuché como la Sofía y la Maite gritaban por ayuda, como también sentí al Felipe quitarme al Cristóbal de encima.
—Quiero que te vayas —habló ésta vez la Sofía, se dirigía a mi, no a él, ni a nadie más, sólo a mí. Sentía el tono cortante que ella trataba de ejercer en su voz, así que solo asentí y desaparecí más rápido que el correcaminos.
Decidí llamar a alguna de las tres M, ¿cuál estaría dispuesta a echarse un polvo conmigo después de semejante pelea que tuve con el ahueonao? Ah sí, la Maria Paz.
Llamada entrante •Oye guapa, ¿te molesta si me paso por tu casa un rato? »¿Cómo me va a molestar? Tráete... tú sabes que y nos vemos. •Nos vemos en un rato, pasaré a la farmacia pa comprarlos, besos. »Besos, bebé.
Llamada finalizada.
(..)
Sofía.
Después de lo qué pasó entre el Dante y el Cristóbal, decidí curarle las heridas al hueon que me dio un beso, porque el otro se fue más rápido que la chucha cuando lo eché de mi casa.
Tomé el botiquín de primeros auxilios que teníamos sobre el refrigerador y me dirigí hacia el living, donde estaba sentado el Cris junto al Felipe y la Maite en uno de los sillones.
Saqué un algodón junto el alcohol y comencé a pasarlos en donde veía salir sangre, tenía un corte en su ceja provocado por los combos del Dante y tenía el labio un poco roto, pero no era nada grave.
Sus nudillos estaban ensangrentados, así que con otro algodón con alcohol en él, se lo pasé por sus nudillos con lentitud y suavidad, para que no le doliera tanto como le dolió con su ceja.
—Gracias por no echarnos a todos luego de semejante pelea, bebé, espero no estés molesta conmigo, cuando el que inició todo fue otro —habló finalmente el Cristóbal cuando terminé de limpiarle sus heridas y colocarle parchecurita en sus nudillos.
Asentí dándole un beso en su frente, escuché a mi mamá en la planta de arriba, pero no bajó, solo me gritó.
—Hija, ya son las nueve, ya se les pasó la hora, ¿tus amigos ya se van? —me preguntó desde el último escalón que daba hacía el segundo piso, yo le sonreí y le asentí.
—Sí mamá, ya se van, tranqui —le respondí antes de volver a colocar el botiquín en donde se encontraba anteriormente y la escuché decir.
—Mañana vamos a comprar para la semana en el súper, así que descansa harto para que salgamos temprano —dicho eso, desapareció y escuché como su puerta se cerraba.
Los chiquillos no tardaron en tomar sus cosas e irse, se despidieron de mi, menos el Cristóbal que tenía algo por decirme, el Felipe y la Maite desaparecieron juntos.
—Dame un besito, sólo uno, te juro que me voy contento —me dijo antes de tomarme de la cintura y asentí dándole un piquito, no creo que necesite más.
Así fue, luego de aquello el Cristóbal desapareció de mi campo de visión cerrando la puerta.
Subí a mi pieza quitándome las zapatillas en mitad de pasillo y cerré la puerta, echándome en la cama, le envié un mensaje a mis chiquillos bonitos de buenas noches, menos al Dante por weta.
No supe más del mundo hasta el otro día.
(..)
Cristóbal.
Últimamente no vengo en auto hacia la casa de la Sofía ni al liceo voy en él, solo por el hecho de que soy un flojo culiao que no quiere manejar.
La vuelta a mi casa se hizo corta, entré y estaba mi princesa Pía jugando con sus muñequitas y con un par de cuadernos abiertos en el piso, lleno de rayones porque le gustaba "pintar", aunque hacía el intento, no parecía ninguna obra de arte, pero lo pegábamos en el refri igual, para que ella estuviera feliz y orgullosa de su trabajo.
Fui a la cocina y me encontré a mi viejo haciendo la once, nada mejor que llegar a tu casa a comer.
—Oye hueón, ¿qué te pasó? —me preguntó, supuse que notó los cortes que tenía en la ceja y en el labio. Me encogí de hombros y le respondí.
—Me agarré a pelear con un hueón que no soporta la idea que la Sofía me quiera a mi, puro ahueonao —fruncí el ceño y me fui donde la Pía dejando mi mochila en el sillón, la acompañé jugando con ella a sus muñecas y rayando también como un hueón desquiciado, las hojas en blanco de los cuadernos que le comprábamos a ella solo para que los rayara así.
Luego de unos quince minutos, mi viejo nos llamó a tomar té, había preparado waffles, que manera de sentirme gringo, of curseee, mi inglish es terrible very gud.
Nos sentamos a comer los tres, sintiendo una paz inmensa por compartir juntos, a veces extrañaba a mi vieja, sólo a veces.