𝙽𝚘𝚝𝚑𝚒𝚗𝚐 𝙻𝚒𝚔𝚎 𝚄𝚜! | ᴄᴏʀʀɪɢɪᴇɴᴅᴏ

⟩０７

>Bitter taste
by; Roseanne Park
February 2020

›El día parecía casi perfecto para salir a pasear acompañado de esa persona especial para tí y no desaprovecharía dicha oportunidad.

Desde temprano había llamado a Jimin y quedamos de vernos en el parque cercano a mi casa, me arregle caprichosamente durante toda la mañana y por fin había llegado la hora de partir. Sentía que mis manos empezaban a sudar por los nervios que recorrían todo mi cuerpo, normalmente no habría una razón especial para esto ya que no es la primera vez que estamos solos, pero hoy sería diferente, quería declararme ante él y romper con la aburrida tradición de esperar siempre a qué el hombre lo hiciera.

Llegué rápidamente a mi destino y divisé su figura recargada en un frondoso árbol frente a los juegos para menores, tome una bocanada de aire y camine hacia él, cuando estuve ahí envolví mis brazos alrededor de su cintura y acomode mi cabeza sobre su hombro, sonrió ampliamente al verme y depósito un pequeño beso en mi mejilla, me devolví la sonrisa y comenzamos a caminar por el lugar con nuestras manos entre lazadas.

—¿Por qué te comportas de manera tan misteriosa?— cuestionó el mayor a mi lado —¿Quieres decirme algo?— enarco una ceja.

—Bueno, de hecho sí— respondí con una sonrisa —Pero estoy nerviosa— fruncí los labios.

—Suelo provocar eso en las personas— vaciló y rio por un momento.

Rodé los ojos y seguimos caminando.

Llegamos a un lugar poco alejado de las personas y nos sentamos a observar el paisaje, seguía mentalizándome mientras el rubio acariciaba mi cabello provocando que en cualquier momento me quedase dormida. Me incorpore en la banca y me dedique a observar su rostro por un momento antes de hablar, era el momento perfecto, o eso creía cuando escuché a un hombre gritar.

¡Dime la verdad!.

Su voz me era ridículamente familiar.

—¿Escuchaste eso?— cuestioné.

—Si, sonó como, Jungkook— comento Jimin.

Divisé a lo lejos un pequeño grupo de personas al centro del parque, parecía haber algo interesante allí, me puse de pie para obtener una mejor vista y me acerque lentamente a la escena.

—Parece que hay una pelea de pareja— hablo Jimin —Deberíamos alejarnos de aquí, no es algo que nos incumba.

—Tal vez tengas razón— concorde y me dispuse a retirarme.

—¡Suéltame!— exclamó una mujer desesperada y me detuve al instante cuando reconocí la voz.

—¿Lalisa?— murmuré.

Me abrí paso entre los presentes y pude observar mejor la escena, Jungkook mantenía a Lalisa cerca de él haciendo una fuerte presión en sus brazos, la piel de alrededor se había empezado a tornar de color morado y sus ojos reflejaban verdadero miedo hacia el chico frente a ella.

—Jungkook, suéltala— ordené —La estás lastimando, ¡suéltala!.

—No te metas en lo que no te importa, Roseanne— espeto el pelinegro —Y ustedes, ¿qué están viendo?— cuestionó —¡Lárguense!— exclamó.

—Jungkook te has vuelto loco, tienes que soltarla— mando Jimin y se acercó a él.

Jungkook hacía caso omiso a nuestras palabras y cada vez su agarré a Lalisa se hacía más fuerte. Los ojos de la pelinegra se empezaron a llenar de lágrimas poco a poco y la mirada de Jungkook cambio, un balde de agua fría parecía haberle caído encima y la soltó al instante.

—¿Qué estoy haciendo?— musito abriendo los ojos de par en par y apartando sus manos de la pelinegra —Lalisa, yo no, no sé lo que me pasó— balbuceó.

—Esa es tu mejor excusa— espete y atraje a la menor hacía mí canto.

—Debes creerme, no sé porque yo estaba haciendo esto.

—Solo lárgate quieres— sollozo la pelinegra.

—Bebé— susurró y se acercó hasta ella.

—¿No me escuchaste?— cuestionó —¡Lárgate!— exclamó —¡No quiero verte!.

—Esta bien— respondió —Solo atente a las consecuencias.

—¿Consecuencias?— alegó —¿Para mí, o para ti?— encaro —No me interesa si decides cortarte las venas está noche, o a la hora que te plazca por lo que acaba de pasar, solo lárgate.

Me quedé helada ante el comentario que había hecho Lalisa, el semblante de Jungkook reflejaba auténtica tristeza y dolor, y solo se marchó sin decir palabra.

La pelinegra de desplomó en el suelo de rodillas y empezó a llorar de forma casi inconsolable, me quedé todo el tiempo a su lado e intenté tranquilizarla mientras ella solo seguía sollozando en mi pecho.

—Siento mucho que hayan presenciado eso— gimoteó.

—Está bien pequeña, no es tu culpa— contestó Jimin y se agachó a su altura para ayudarla a ponerse de pie —Te llevaremos a casa, necesitas descansar.

—Gracias— sonrió débilmente —Roseanne, por favor no le comentes nada de esto a mamá, no quiero preocuparla.

Le dedique media sonrisa y asentí, les indique que se fueran adelantando y me quedé un momento dándole vueltas a la situación.

¿Qué clase de hombre es realmente Jeon Jungkook?

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