Mi Tormento (Kairus) Concluida

capítulo 15 (corregido)

Lucía mordió sus uñas. Mientras caminaba de lado a lado en la habitación.

Era imposible si Wolf tuviera 100 años el estaría en una tumba, bajo tierra y sus huesos ya estarías echos polvo.

-puedo escuchar como caminas sin parar ¡ya detente !- dijo ana mlrandola aunque literal mente no pudiera
- lo siento pero es que no lo entiendes acabo de besar a un anciano- dijo tocando sus labios y aún así le había gustado y lo volvería hacer.
-¡¿que?!- grito Ana para luego acercarse - lo besarte?, el te beso? , lo obligaste?-las preguntas trataron sin parar de los labios de Ana tan rápidamente que Lucía sólo pido entender unas cuantas
-basta- dijo al ver a su amiga fuera de control- si nos besamos y no yo no lo obligue, ¿cómo puedes pensar en eso?- dijo cruzandose de brazos
-es que es muy raro el no a tenido a nadie desde ...ya sabes desde su muerte
- si desde la muerte de emma - la puerta se abrió de golpe antes de resonar contra la pared
-¿quien dijo ese nombre ?- las dos chicas se encojieron en su lugar al escuchar y ver el rostro siniestro de Luis
-¿que nombre?- dijo indiferente Lucía prefiriendo hacerse la loca
- ¿quien lo dijo?-volvio a repetir acercándose a zancadas
- yo.. . Yo lo dije- respondió Lucía tan rápido como pudo

Un rugido bestial resono en la casa antes de que Ana fuera alejada bruscamente del lado de Lucía la cual miraba con desconcierto la escena
- tu y tu boca, jamás puedes estar callada - le grito Luis en la cara a Ana quien no tardo en empezar a llorar
- lo siento - dijo ella tratando de cubrir sus labios impidiendo que los sollozos salieran
- déjala en paz, yo fui la que pedí que me dijera todo - dijo Lucía enfrentandolo
- no importa ya le habíamos advertido que no podía decirte nada - los ojos de Lucía se abrieron al escuchar esto
- que es lo que me esconden?- dijo ella está vez molesta, Luis apretó su mandíbula antes de soltar varios improperios a si mismo
-nada, sólo haz como si nada de esto hubiera pasado - dijo mirándola - ahora tu y yo tenemos que hablar - está vez hablaba con Ana quien se encontraba todavía sujeta por el.

Literalmente arrastró a la joven asta la puerta para luego desaparecer con su amiga, Lucía suspiro antes de apretar sus puños y caminar hacia abajo donde escuchó la charla entre los dos.

-cuantas veces tengo que repetirlo Ana no puedes decirle nada a Lucía ella creció aislada de todo lo que pasó en estos cincuenta años no sabe de la paz, no sabe de la guerra, no sabe de nosotros - la voz de Luis se oía baja pero ahora con su desarrollado oido podía escucharlo perfectamente

- lo sé pero cuanto más van a dejarla en la ignorancia, es mi amiga y quiero que sepa la verdad - Ana se calló por un rato - además está enamorada de Wolf, la pobre no sabe que no tiene oportunidad al igual que yo- la voz de Ana bajo de tono al pronunciar lo último
- está enamorada del Alfa, eso ya lo sabía se nota desde lejos - las mejillas de Lucía se calentaron al oir esto, en serio era tan obvio?- y por otra parte como que igual a ti- se escuchó un estruendo - yo nunca te e rechazado Ana es sólo que yo no soy el hombre que mereces - la conversación empezó a ser algo personal e íntima lo cual incómodo a Lucía y se giro decidida a irse.

Pero su cuerpo se quedó cual estatua al ver al gemelo de ojos bicolor a sólo dos pasos lejos de ella, este entrecerro sus ojos antes de acercarse y pegar su oido a la pared.

- que haces no podemos perdernos estos momentos tan especiales - dijo el gemelo nuevamente obligando a Lucía a pegarse contra la pared.

-¿de qué hablas Luis?- dijo Ana con la voz débil
- siempre te e admirado, eres una mujer fuerte y decidida, con un corazón noble y sincero - dijo Luis - por eso pienso que no soy lo suficiente para ti - se escuchó como alguien sorbia su nariz Lucía supuso que era Ana
- yo...yo pensé que me odiaba por no ser una chica perfecta y por mi discapacidad - un sollozo salió de sus labios
-¡¿qué?! ¡¡no!!- dijo el gemelo casi gritando - en realidad eso me encanta a pesar de no poder ver nunca te rindes - Lucía sonrió al oir esto se sentía feliz por su amiga por fin aclaraban todo
- en serio?, gracias - la voz tímida de Ana no pasó desapercibida
- entonces - la voz de Luis sonó del mismo modo -¿quieres empezar de nuevo?- dijo Luis
-si- después de eso Lucía despegó su oido para luego mirar al gemelo a su lado quien sonreía bobamente
- ya puedes soltarme?-pregunyo Lucía mirando la mano que agarraba su brazo

El gemelo la miro para luego apartarse de la pared, entre cerró sus ojos antes de hablar.

-crees que ignorar el echo de que escuchaste toda su conversación desde el principio - la piel de Lucía perdió tono
-¿cómo es posible que los escuches también?- pregunto ella
-te dije antes mi oido todo lo persibe - respondió inclinandose - ahora que aremos con tigo ¿eh?- Lucía paso saliva nerviosa nunca antes le habían echo algo y eso aún más la armterraba al pensar en muchas posibilidades de tortura.