Capítulo 20

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Jennie's POV

Ya me empezaba a acostumbrar a despertar al lado de Lisa, la cual dormía plácidamente mientras tenía un brazo fuera de la cama. Decidí no despertarla para preparar su desayuno y el de mamá. Me estiré al llegar y comencé a preparar Hot Cakes; luego serví los platos de comida para mis perritos y Leo, que yacía acostado en la entrada del cuarto de mi mamá.

–Hey...–Me acerqué a el y ni siquiera se inmutó.–¿No tienes hambre?–Leo me miraba con aquellos ojos de perro regañado.

No le di más vueltas y con cuidado de no pisar su cola entré al cuarto de mi mamá. Al parecer no se había levantado y era hora de tomar sus medicamentos.

–Mamá, te hice hot cakes y les puse miel.–Abrí las cortinas y busqué las pastillas que le tocaban.–Hey, te tocan las pastillas.–Dije sentándome a su lado y tocando su espalda.

Cómo en los viejos tiempos la abracé por la espalda.–Mamá tus Hot Cakes se van a enfriar y esta vez me quedaron bonitos.–No hubo respuesta y sentí como mi corazón comenzaba a acelerarse.–¿Mamá?

Me levanté rápidamente de la cama para moverla.–¡Mamá!–Comencé a gritar mientras la movía desesperadamente.–Coloqué mis dedos en su cuello y no tenía pulso.

–Mamá, por favor...–Me abracé a ella mientras lloraba y en eso entró Lisa.

–Jennie...

–¡No se mueve, Lisa!–La moví durante unos segundos más cuando sentí como Lisa me abrazaba.

–Mi amor...

–Me dijo que se sentía bien...–Sollocé contra el pecho de Lisa.

Los siguientes minutos pasaron muy rápido. Estaba en el suelo, abrazada a Lisa mientras ella me sostenía.

Había perdido a la única familia que me quedaba.

* * *

1 semana después

La mano de Jisoo sostenía la mía mientras estábamos en la sala de mi casa. No se había separado de mí desde que mi mamá había fallecido. Se sentía tan mal volver a sentir lo mismo de nuevo, como si hubieran arrancado un pedazo de mi que jamás regresaría. Pero, ¿cómo te acostumbras a no ver a quien te dio la vida nunca más? Ya no llegaría a casa cada domingo con brazos que me recibieran. Se había ido para siempre.

–Jennie...sé que no hemos hablado de esto pero tienes el buzón del móvil lleno de mensajes.–Era verdad, no había atendido las llamadas para realizar el papeleo. Había pasado una semana desde que enterramos a mi mamá y no había querido salir de la casa.

–No entiendo tal vez el dolor que estás sintiendo.–Acomodó un mechón detrás de mi oreja.–Pero cuando te sientas lista, debes arreglar los asuntos de ella. Contestar los mensajes e ir a su trabajo para que puedas estar más tranquila.

Asentí porque había dejado pasar varios días y todavía tenía que hablar con mi abogado y el jefe de la empresa donde trabaja mi mamá.

–Te quiero mucho, Jen.–Me abrazó hasta que vi entrar a Rosé y Jennie.

–Jisoo...lamento interrumpir.–Dijo Rosé.–Pero tienes varios mensajes y llamadas perdidas de tus papás.

–Olvidé que regresaban hoy. Creo que tengo que hablar con ellos.–Dijo mirando a Rosé.–¿Estarás bien Jennie?

–Sí.–Miré a Lisa que se hacía camino al sillón donde estaba y se sentaba a mi lado.

–Volveré mañana, ¿si?–Asentí y me abrazó, Rosé hizo lo mismo y se fueron.

–Hey.–Cuando por fin quedé sola con Lisa me acurruqué en ella acomodándome en el sillón y entre sus piernas.–No voy a preguntarte cómo te sientes porque lo sé perfectamente, pero aquí estoy.–Me tomó entre sus manos como siempre hacía y besó mi frente.–No me voy a ir.

Sentía que mis ojos ardían. Había llorado todo el día y estaba demasiado exhausta.

–La extraño mucho...

–Lo sé, mi amor.–Lisa me abrazó las siguientes horas hasta que oscureció.

Habían pasado varias horas desde que había tomado una ducha.–Tengo que bañarme.–Le dije a Lisa removiéndome un poco.

–Está bien.–Nos levantamos tomadas de la mano y subimos a mi habitación.

Eran casi once de la noche cuando decidí tomar una ducha. Las gotas caían en mi rostro y los recuerdos empezaron a invadirme.

La recordé leyéndome por las noches después de tener un día difícil en la escuela, recordé las tardes en el sillón cuando veíamos dramas toda la noche, también los recordé a los dos, abrazándome en el último cumpleaños que pasamos juntos.

Comencé a sollozar abrazando mi cuerpo con mis manos y cada vez mis sollozos eran más fuertes.

No me di cuenta ni la hora en la que entró Lisa pero me abrazó sin importa nada más. Sin importarle si se empapaba de agua ni si me encontraba desnuda. Sólo me mantuvo con ella.

–No te quiero perder nunca...–Le decía entre palabras cortadas.

–No lo harás.–Me dijo y cerró el pase de agua. Buscó la toalla que había colgado cerca palpando la pared y la colocó en mi cabeza con ternura, secó mi cabello y luego mi desnudo cuerpo.–Vamos, es hora de que descanses.

Caminamos hacia la habitación y me coloqué la pijama mientras ella se secaba y hacía lo mismo.

Ella subió a la cama abriendo sus brazos y piernas para que me colocara entre ellas. Apagué la luz y me acurruqué en ella. Nos cubrió con la misma frazada y me acarició durante un tiempo.

–Jennie...–Llamó.

–¿Qué pasó?–Dije en un susurro acomodándome más en ella.

Acercó sus labios a mi mejilla y luego a mi oído diciendo aquellas palabras por primera vez.

Te amo.

La miré entre la oscuridad.–Yo también lo hago.–Le dije dándole un beso antes de quedarme completamente dormida.

It's cold inside too? [Jenlisa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora