7 Objetos Sagrados

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Narrador:

Aaron había colapsado después del combate que tuvo contra Alexander y Marcus, este había sido llevado por el caballero de armadura morada al interior del reino.

Nuestro joven héroe se encontraba reposando en una cama, la cual se encontraba dentro de una pequeña habitación, la cual solo tenia una ventaba pequeña y la puerta.

De la puerta entraba una joven chica, esta tenia el cabello recogido en JNA cola de caballo, esta usaba un delantal encima de su playera color café y su falda del mismo color a su playera.

Esta se acercaba a Aaron y le ponía una pequeña toalla mojada en la frente, limpiando de manera delicada el rostro de nuestro joven héroe.

Aaron abría los ojos y se sentaba de golpe en la cama, la chica se espantaba y retrocedía hasta quedar con la puerta.

Aquella chica salia del cuarto dejando solo a nuestro joven héroe, el cual veía que sus cosas estaban a un lado de la cama, este tomaba su ropa superior y se la ponía.

Aaron se levantaba de la cama y tomaba su espada, este abría la muerte y frente a el estaba un pequeño pasillo con dos puertas y unas escaleras que bajan a un puso inferior, en el cual se veía una pequeña luz y algunas sombras.

Este empuñaba su espada y bajaba de manera lenta y sin hacer ruido, pues no sabia que es lo que le esperaba en cuanto bajara.

Al llegar, veía al caballero de armadura morada sentado en una silla, a la derecha de este se encontraba un hombre con armadura roja y una capa larga de color negro, este tenia el cabello lacio amarrado en una cola de caballo, en su ojo derecho tenia una cicatriz en forma de cruz, sus ojos eran de un color miel y su tes era ligeramente bronceada.

Del lado izquierdo del joven de armadura morada se encontraba la chica que Aaron había visto antes.

Nuestro joven héroe se acercaba a aquellas personas aun empuñando su espada.

~Por favor relajese Sir Aaron, mi nombre es Claud, soy un guardia del rey, mi compañero es el comandante de la armada, su nombre es Harford y la señorita a mi izquierda es mi hermana Alicia.

Hablaba en un tono amable aquel joven mientras miraba a Aaron, esperando que este se relajara.

-¿En donde estoy?

Aaron se mostraba nervioso y serio, pues aun no se sentía cómodo debido a lo ocurrido.

~Estas en mi casa, perdona si esto fue de sorpresa, pero no podía dejar al que salvo nuestro reino en el suelo.

Hablaba Claud de una manera gentil, tratando de hacer que el ambiente fiera mas tranquilo.

>En unos momentos el Rey Baste estará aquí para hablar contigo sobre los caballeros reales, pues tu eres uno de ellos.

El Último Caballero RealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora