Corpse Brigde [Ggukmin]

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Triste y decaído, Jimin caminaba cabizbajo por los fríos pasillos.

Esperaba que no le doliera tanto, pero podría jurar que el pecho le ardía y no con esa calidez que tanto empezaba a gustarle. Tan familiar y acogedora.

Miraba el suelo y parpadeaba una y otra vez en un vano intento de alejar las lágrimas, ¿Pero él siquiera era capaz de llorar? ¿No se suponía que sus conductos lagrimales no funcionaban?

Río amargamente al siquiera pensar que él, un débil novio muerto, podría tal vez, y sólo tal vez, estar vivo.

Tan jodidamente patético.

Miró apenado el ramo de flores entre sus blancos dedos y lo soltó oyendo el suave ruido de las plantas caer contra el suelo.

Desde una cornisa cercana, Taehyung miraba al peliazul apenado.

¿Acaso estaba así por culpa de ese tal Jungkook? ¿Porqué había agua en sus mejillas?

Giró hacia Hoseok y ambos asintieron mientras cambiaban a sus formas humanas e iban acercándose al chico.

—Minnie, ¿Qué ha ocurrido? —dijo Hoseok abrazando al peliazul por la espalda.

Tanto él como Taehyung se sorprendieron cuando Jimin, prácticamente, tiró a Hoseok y siguió caminando.

Lo siguieron manteniendo distancia, pero observando cada movimiento del demacrado hombre. Intercambiaron miradas cuando Jimin los miró.

—Le gusta una mujer...una mujer hermosa y viva, de mejillas rosas y figura fina —susurró jugando con sus guantes.

—¿Y te preocupas por una mujer? —respondió Taehyung girando alrededor del chico. Sonrió al ver la expresión confundida del peliazul. —¿Qué es lo que tiene esa malcriada que tú no tengas?

—Lo bello de tu risa no se puede comparar.

—¡Pero tiene pulso! —chilló.

—Valorado sin razón.

—Excesivo y sin valor.

—Si él pudiera conocerte mejor... —soltaron ambos amigos sonriendo.

Jimin tomó el aire y cerró los ojos.

—Es verdad, no lo sabe y el anillo no lleva donde debería estar—continuó Hoseok alzando la mano de Jimin.

—Ni siquiera toca piano, mucho menos cantar, no se puede comparar...

—¡Aún respira!

—¿Y qué? No importante.

—Excesivo.

—Sin valor.

—Si tan sólo viera lo especial que puede ser.

—Si pudiera conocerte mejor.

Rápidamente negó, esfumando las pequeñas ilusiones que en su cabeza se formaban. Sonrió con clara ironía y se sentó sobre un ataúd acolchado en rojo.

Su ataúd.

—Si me quemo con la vela no siento el calor, si un cuchillo me atraviesa no hay dolor...

Taehyung frunció los labios y dispuesto a hablar, formuló oraciones mentales.

—...y  su corazón palpita y yo muerto sé que estoy.

Bufaron antes de seguir.

—Lo único exclusivo que tiene algún sentido, es que viva está. Excesivo y sin valor.

—Pasajero es ese estado, todos lo sabemos muy bien y la muerte es el remedio que nos llega sin saber —susurró Taehyung.

El silencio reinó ante la falta de respuestas de parte del peliazul.

—El dolor que hay en mi, anda, dime no es real, pero aún tengo una lágrima...que dar...

Jimin cerró los ojos sintiendo la tibieza de la pequeña gota de agua caer por su abultada mejilla y se permitió dejar caer más.

Porque creyendo vanamente que jamás volvería a ser dañado, fue herido de una manera que no esperaba.

Porque se había enamorado perdidamente de alguien a quién apenas conocía y que no le correspondería.

[💀]

Escribí poco, pero I like it.
Desde ya aviso que falta poco para el final ;).
[Resubido]