Tyler

Matt: Te quiero mostrar mi jardín

Matt:

-¿Matt cuales son tus poderes? - siento que la sangre deja de correr por mis venas. Mierda. -¿Estás bien? - escucho la voz de Tyler - parece que viste un fantasma - subo la mirada y esta a mi lado.

-¿Eh? - digo él sonríe.

-¿Cuales son tus poderes? - me pregunta curioso.

-Yo...yo -balbuceo sintiéndome nervioso, suspiro armandome de valor - Ven - le digo abriendo la puerta del jardín, el me mira curioso. Apenas tocó el césped me estremezco temblando él me observa con curiosidad.

-Estás temblando - me dice y yo muestro una sonrisa inestable.

-Puedo controlar la tierra - señalo el jardín y extiendo las manos - mira - el observa el jardín y yo levanto pilares de tierra y los aplaco. Luego hago crecer el césped hasta cubrirnos los tobillos y río deshaciendo.

-Interesante - Observa lo que he hecho con el jardín, he plantado y redecorado a mi antojo, generando mucha naturaleza más sonrío con orgullo.

-Wow - me dice y yo río divertido, me siento en el pasto y él camina por el jardín, mirando hacia todos lados. Divertido, genero movimiento sísmicos. El voltea a verme sorprendido cuando la tierra bajo sus pies se mueve, yo río.

-¿Por eso...por esto siempre estás descalzo? - me pregunta con curiosidad sentándose en frente mío.

-Puedo sentir las vibraciones, no necesito verte para saber a qué distancia estás de mí - sonrío - solo es más fácil sin zapatos - digo restándole importancia.

-¿No te lastimas? - me pregunta y me da risa.

-Estoy acostumbrado - me encojo de hombros. Sigo temblando y el se de cuenta.

-¿Por qué tiemblas? - me dice observandome.

-Estoy en la naturaleza -me apoyo en mis manos - puedo sentir cómo todo se mueve a mi alrededor -miro hacia todos lados - tengo una sensibilidad alta - susurro. El me mira curioso.

-¿Qué más puedes hacer? - me pregunta.

-Tengo un poco de manipulación sobre los metales - le cuento - pase toda mi vida trabajando con ellos...- recuerdo mis días en la herrería - en algún punto desarrolle un poco de control sobre ellos.

-Wow, hace años que no conocía a alguien con tus habilidades - me mira curioso - ¿que edad tienes?. Yo le sonrío.

-119, ya se, no los aparento - digo rodando los ojos.

-Te ves menor - me dice sin dejar de verme - el día que te encontré cubierto de tierra... - apenas empieza a mencionarlo mis alas revolotean con vergüenza.

-Ese día...fue un desliz, al igual que lo que acaba de pasar en la sala - me disculpo.

-¿No controlas tus habilidades? - me pregunta y frunzo el ceño.

-Por supuesto que lo hago - me quejo - solo algunas emociones son difíciles de controlar - confieso encogiendome un poco.

-Lo entiendo más de lo que parece - me dice bajando la mirada, pero sonríe...una sonrisa triste. Una alarma se dispara en mi interior y me surge una necesidad por hacerlo sentirse mejor. ¿Que me esta pasando?

-¿Y tus habilidades? - le pregunto desviando el tema el me vuelve a ver y luego ladea la cabeza, noto como su cabello se alza y fluctúa, y el agua de la alberca se alza y sale del recipiente flotando en el aire.

-Impresionante - digo mirando la gran nube de agua y el rie...segundo después la arroja sobre nosotros. Me siento sumergido bajo el agua pero al ver a mi alrededor estamos suspendidos en una masa de agua, en el aire, él tiene los ojos cerrados y está sentando en la nada, su cabello ondula y brilla. Yo lo miro sorprendido y empiezo a nadar, estoy nadando en el aire. Siento que nos movemos y el agua regresa a la piscina, saco la cabeza del agua y rio.

-Wow, eso fue genial - le digo entre risas, él genera una ola y me impacta. Entorno los ojos y genero rocas y se la tiro, al contacto con el agua se hacen masas de lodo. El hace lo mismo generando bolas de agua y empezamos un juego amistoso, que se convierte en una pequeña lucha, cuando impactan nuestras bolas se convierten en una gran masa de lodo, sacándonos risas. Para cuando me canso salgo del agua y me quedo tirado en el borde de la piscina. Con mis poderes todo el lodo regado lo regreso a su lugar. Noto que se acerca a mí y se apoya en sus brazos en el borde de la piscina, está empapado pero no parece molestarle.

-¿Nunca has utilizado tus poderes en un lucha? - me pregunta curioso y lo miro sin entender.

-No he participado en una - le contesto - siempre estaba en mi taller de herrería o en el calabozo - me río recordando lo aburrido que era y él no deja de mirarme, sostengo su mirada.

-¿Que? - le digo entre risas.

-Eres mucho más que eso.