Instagram.Laliter

.109.

Lali

Pasaban los meses y cada vez tenía más antojos que lo normal. Brunito estaba más apegado a mí y Peter no estaba tanto en casa por el tema que está haciendo una película, pero lo estamos llevando bastante bien, más enamorados que nunca.

-Hermanilla!-dice Euge al entrar con Rufi y Magnolia

-hola chinita-sonreí.

-cómo anda mí princesa hermosa?-la miré a Rufi que estaba triste abrazando a Euge.

-pasa algo?-le pregunté a Euge.-piensa que no la vas a querer más, porque no sos su ahijada y ahora estás esperando un bebé. En conclusión, está celosa.

-pero mí amor yo te voy a amar de igual manera que lo amo a Brunito, a Magnolia y al bebé que está por venir. Ustedes son mis tesoros, nunca vuelvas a pensar en esas cosas sí?-ella asiente y sonríe.

-me vas a dar un abrazo?-le pregunto con una sonrisa y ella corre a abrazarme.

-ahora, a todo esto lo estuviste hablando con BRUNITO-ella asiente con culpa.-tranquila, no le diré que me dijiste-sonreímos y al rato llego Bruno con mí suegra.

-Mami!-grita Brunito al entrar.

-hola mí bebé-le dije al besarlo.

-Hola Clau-sonreí y ella me abrazo.

-cómo anda mí ñietito o ñietita?-me toca la panza y le da un beso.

-ya lo estoy empezando a sentir... está pateando-grité de emoción.-vengan a tocar-llamé a Euge y a Rufi.

Esa sensación de que pateaba me daba mucha alegría. Ya quería tenerlo o tenerla, estaba tan emocionada que quería darle una sopresa a Peter. Pasó el mediodía y como sabíamos que Peter no llegaría hasta la noche, fuimos directo a el canal junto con Bruno. Euge se quedaría en casa con las nenas ya que andaban en una crisis con Nico.
A penas entramos vimos a Franccela.

-Lalita-me sonríe y abraza.

-cómo andas?-le pregunto mientras buscaba a Peter.

-bien, muy bien. De seguro estás buscando a Peter no?-asiento y sonrió.

Mientras conversamos, me lleva hasta el camerino de Pet. Se sentía la buena onda por todos lados y el amor lo pude ver a penas me abrazaron. Eran personas que conocía y no veía hace mucho tiempo. El afecto no se fue.

-está tan grande Brunito-él le sonreía pero Bruno se escondía, era un poco tímido.

-sí y bastante mimoso-nos miramos y sonreímos.

-ojála algún día podamos trabajar juntos-asiento-sería un honor, sos un gran actor y persona-nos saludamos y abrimos la puerta.

-papá!-grita emocionado Bruno-pero yo solo bajé la vista al verlo con Andrea Rincón. A penas me vió se quedó sorprendido.

-Bruno, mí amor. Vamos a casa-le dije y él me miró triste.

-Tranquila, yo me voy-dice Andrea.-pero la interrumpo-yo me voy, no tendría por qué haber venido.

-pero mamá recién llegamos-me dice Bruno al abrazarse con Peter.

-Bruno, vamos por favor. Necesito hablar contigo-le dije y enseguida la bebé me pateó.-largué un grito y ambos me miraron preocupados.

-La, mí amor, estás bien?-me pregunta Peter al acercarse-no me toques, me voy-le agarré la mano a Bruno.

-mamá pateó de nuevo-asentí y con lágrimas en los ojos sonreí.

-ya empezó a sentirse?-preguntó Peter al mirarme apenado.

-sí y no estabas-le dije llorando.

-vamos mí amor, ya viste a papá-Bruno le dió un beso a Bruno y me agarró la mano.

Salimos del camerino pero Peter nos perseguía. Yo solo lo paré y lo miré con lágrimas. Mis ojos decían todo "por qué lo hiciste Peter?" Él me miraba y lloraba.

-no sigas. Lo hablaremos mañana o pasado pero hoy no-le dije mientras el toca mí panza.

-te amo-me dijo al tratar de abrazarme pero lo rechacé.

Salimos del canal y como pude me sequé las lágrimas pero estaba lleno de periodistas, Bruno asustado me abrazaba y me miraba nervioso. Luego de ver en qué situación me encontraba, me tocan el hombro. Al darme vuelta, no podía creer quién era. Era tan solo el señor Benjamín Amadeo.

-tranquila, los sacaré de aquí-acepté mientras nos llevaba hasta mí auto.

-gracias-fue solo lo que dije.

-perdoname-me decía apenado-vos no merecías tanto dolor, eres una persona increíble y tienes un hijo hermoso-le sonreía a Bruno.-nos vemos La-me sonríe-chau campeón-chocan los cinco.

-maneja con cuidado, te quiero-asentí y encendí el auto. Miré por el espejo y el saludaba con una sonrisa, parecía sincera.

Camino a casa lloraba desconsoladamente pero Bruno se había dado cuenta y me abrazaba.

-deja de llorar Ma, no me gusta verte así-yo solo le sonreí. No podía ser más inteligente mí bebé.

-no lo haré más-me sequé las lágrimas y él me sonrió.

Llegamos a casa. Abrimos la puerta y apenas Claudia me vió me abrazó, mientras yo lloraba.

-necesito...-y ahí fue cuando cerré los ojos de apoco, me dejé caer porque no podía mantenerme firme. Escuchaba gritos de Euge y Claudia tratando de llamarme, pero no había caso. No podía abrir los ojos. Caí en un profundo sueño.

Espero que les guste.