Caos

95 1 0
                                    

Manuela se había quedado paralizada, muda ante lo que Carlos le acababa de proponer, le estaba pidiendo que compartiese el resto de su vida con el, y con esa criatura que llevaba en sus entrañas, sin duda Carlos era el hombre de su vida.
Le agarró de las manos mientras tomaba aire y le miraba a los ojos...

-si, si acepto ser tu mujer. - le dijo con lágrimas en los ojos y ese brillo tan especial que tenía.

- pero... No me llores mujer. Le dijo Carlos tratando de secar sus lágrimas.

-son las hormonas, que me tienen loca.. -

Ambos continuaron con su paseo, con miradas de complicidad y risas sin fin, enamorados como un par de adolescentes.

*Narra Tania.

Me encontraba en la sala de tiro practicando cuando vi a Lucía situarse justo a mi lado, ponerse unos cascos y comenzar a pegar tiros hasta gastar las balas de la pistola...

Normalmente ella venía a otra hora a hacer sus prácticas de tiro, cuando me fije estaba llorando, dejé mi arma y me quite los cascos poniéndome justo detrás, coji sus manos, bordeando su cintura, que tenían el arma y juntas apretamos el gatillo dando justo en el centro de la diana.

Lucía dejó el arma y se quito los cascos y se volvió para mirarme.

-¿Qué coño haces? Quieres dejarme en paz nadie te ha pedido ayuda pirate de aquí joder quiero estar sola. - Salió dándome un empujón contra la cristalera.

La mire, por un momento pense en ir tras ella que me contase lo que le pasaba, de normal era borde pero hoy aparte de estar borde le pasaba algo, pero preferí dejarla no quería que pagase conmigo lo que le estuviese pasando.

Suspiré y me fui a las duchas necesitaba que el agua me cayese por la piel y olvidar el día y el incidente con Lucía yo solo quería ayudarla y ella volvió a mostrarse borde como siempre.

Llegue al comedor y allí estaba sola dándole vueltas a la carne en salsa que había en el plato, cogí mi plato de comida y me senté al lado de una de mis compañeras.

-¿Alguien sabe que cojones le pasa a Sánchez hoy?.- Pregunte con intención de saber algo más.

-ni pajolera idea... pasa de ella tía es una borde de mierda. -

Acabe mi cena hablando de cómo habían ido las clases de que pronto serían los exámenes y me fui a mi habitacion, quería ponerme a repasar.

Cuando llegue me encontré a Lucía fumandose un cigarrillo en la puerta, eso estaba totalmente prohibido en el centro, pero a ella al parecer poco le importaba, suspiré y entre en la habitación acomodandome con el pijama puesto y los apuntes encima de la cama empecé a estudiar.

Lucía entró y se echo en la cama a llorar incluso se tapo la cabeza con la sábana.

-Oye se que tú y yo no nos llevamos bien o por lo menos no te caigo bien, pero si necesitas que te escuche, desahogarte o algo... - No se si estaba metiendo la pata... Seguí a lo mio.

-No, no quiero nada de nadie, bueno si que me dejes en paz y te metas en tus asuntos. -

Seguí a lo mío,  era una estúpida no merecía que me preocupase por ella.

Me dieron cerca de las tres estudiando, apague la luz y me eche un rato a las cinco tenía que ir al gimnasio como cada mañana, cuando me desperté vi la luz del baño encendida y escuche hablar por teléfono, que raro a las cinco de la mañana...

-Eres un gilipollas me oyes, nos íbamos a casar en poco tiempo, seguro que estás con otra, no vuelvas a llamarme más. -

Lucía salió del baño dando un portazo y también de la habitación dando otro más fuerte, al parecer ya sabía el motivo por el cuál estaba así, la verdad no sabía nada de ella, nunca habíamos tenido una conversación, no sabíamos nada la una de la otra, solo abría la boca para soltarme borderias, me vestí y me fui al gimnasio como cada mañana, y allí estaba ella en pijama dándole a un saco de boxeo, la observe a lo lejos y me subí a la cinta poniéndome los cascos y pasando de su cara,  era una borde no sabia porque me preocupaba tanto.

*Narra Malú

Era un cabrón era un puto cabrón me repetía una y otra vez mientras le daba aquel saco de boxeo.
¿Porque porque ahora?, nos íbamos a casar, teníamos el piso amueblado y yo el vestido elegido, me habían conseguido el permiso para la boda y me deja a través de un mensaje de wasap

"Es mejor que lo dejemos a tiempo antes de que seamos marido y mujer ya no es lo mismo"

Cada vez recordaba el mensaje más fuerte golpeaba el saco y más lloraba.

Llevabamos cerca de ocho años juntos, nunca habíamos tenido una pelea, nos amabamos con locura y me apoyaba en mi carrera como policía, me dijo que la distancia y que nueve meses no harían que nuestro amor se marchitase, y ahora lo quiere dejar a punto de dar el paso de ser su esposa.

Mi compañera de habitación me había preguntado que qué me pasaba pero yo no tenía porque darle explicaciones de mi vida privada, solo era una compañera de habitación que además detestaba, era demasiado perfecciónista.

*Narra Rosi.

Esa mañana decidí investigar por mi cuenta donde estaba la habitación de Vanesa, tenía ganas de verla de nuevo, no podía quitármela de la cabeza.

Entre en el ordenador del mostrador y teclee su nombre y apellidos , enseguida me salió su número de habitación, esboce una sonrisa pícara y triunfante y me fui corriendo para mi puesto de trabajo, en cuanto saliese iría a visitarla, ya casi era la hora de salida, salí cinco minutos antes ya que lo dejé organizado y subí sin cambiar a la habitación donde estaba ella.

Llamé a la puerta que estaba abierta,

-adelante. - dijo ella amablemente.

Observe que estaba sola, en la silla leyendo un libro, me entró la vergüenza no sabía que decirle, tome aire y me arme de valor.

-Hola yo soy la auxiliar que estuvo contigo en UCI, quería saber como estabas. - La mire, que guapa estaba, que bien le olía el pelo.

-¿tu eres la que cantaba? - preguntó curiosa.

Mierda...me había escuchado cantar... - eh si era yo pero vamos que canto súper mal.- dije súper avergonzada

-tenía curiosidad por saber quién era. - me sonrió

Y me quedé mirándola como una estúpida sin mediar palabra frente a frente a ella.  Ay Vanesa te has colado muy dentro de mi pensé mientras seguia mirándola





Como un Billete de AvionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora