Destrucción Deliberada

Capítulo 23

Zayn - It's You

Aaron.

La vida era una jodida mierda, pero tampoco me iba a poner de quejica ahora. Así que una vez más, hago lo único que siempre me distrae del dolor; dibujar. La dibujaré a ella, porque es la causa de mi malestar, a ella, porque es la única manera de no hacer una locura. Agarro una hoja y el lápiz para empezar a hacer el boceto, cuando lo tengo terminado; paso al lienzo. 

—Así que aquí estás —no necesito alzar la cabeza para saber que es Colson quien me habla, en estos momentos puedo hasta apostar una gran cantidad de pasta a que está recostado en el marco de la puerta con los brazos cruzados. 

Escucho sus pasos acercarse pero no le presto atención. en cambio sigo trazando las lineas que componen su cabello —Déjame adivinar, las estás dibujando a ella—dice. Cada vez lo siento acercarse más.

—No preguntes cosas que ya sabes —es lo que respondo. Escucho un suspiro por su parte.

—Cada quien elije la manera de lidiar con su mierda, pero no me parece la correcta y lo sabes —opina— No deberíamos dejarnos llevar por Chad, simplemente es algo que debemos dejar atrás, sobre todo tú.

—Veo que Melissa te tiene al trote —opino. Todavía concentrado en el lienzo.

—No tiene que ver con ella, sabes que va siendo hora de superar —dice, su mirada se mantiene fija en el cuadro que estoy pintando. Aprieto el pincel.

—Lo estoy intentando.

—No lo estás haciendo de la manera correcta —repite. Suelto un suspiro y dejo caer el pincel al suelo para pasarme las manos por el cabello.

—No es tan fácil, joder, la quise más de lo que he llegado a querer a cualquier otra —saco el cigarrillo de la caja, lo enciendo y tomo una bocanada, luego me dirijo hacia la ventana para que el humo salga.

—¿Y Molly? —pregunta. Volteo a mirarlo enseguida, su mirada no se aparta de la mía— ¿Qué hay de ella? ¿no sientes nada?

Siento que me falta el aire, el nudo en la garganta no me deja siquiera respirar— No lo sé, ¿por qué me preguntas por ella ahora? Mierda.

—No pretendo agobiarte, creí que te empezaba a gustar de verdad —dice. Una imagen de ella sonriéndome de esa manera como sólo ella sabe aparece en mi cabeza y mi pecho se aprieta.

—Me gusta, y mucho. Ella me trae paz, me hizo volver a creer en la inocencia de las mujeres. Pero, cuando vi a Nicole salir por esas puertas todo en mí se revolvió, nunca la he podido olvidar, ella es mi tortura personal, mi caos.

—A veces nos dejamos llevar por aquellas sensaciones fuertes, porque son las que más se hacen notar, vemos a esas personas que ocasionan un caos en nuestro interior y pensamos que no puede haber otra persona que nos hagan sentir tanto, por eso no tomamos en cuenta que puede haber otra con la que nos sentimos bien, que la necesitamos más de lo que creemos, porque nos traen paz, nos hacen sentir fuertes y vivos. ¿Sabes que es lo peor? Que a veces nos damos cuenta cuando es demasiado tarde, por ese famoso dicho de "nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde". Ten eso siempre en cuenta.

Los días pasaron lentos, los únicos momentos que sentía que se iban demasiado rápidos eran los que pasaba con Molly, nunca pensé que nos volveríamos tan cercanos, mis expectativas eran otras; unas que involucraban más la cama. Pero las cosas cambiaron, y Molly se merece más, por eso no debería tocarle una puta uña, porque me siento malditamente culpable por no poder darle todo lo que necesita, por estar estancado en el pasado.