Capítulo 34

9.2K 718 35
                                    

Los ojos verdes prestaban atención a cómo Camila la miraba anhelando una respuesta y la daría, sin duda. Le confiaría eso a su novia, aunque si descubrieran la verdad ella sufriria mucho.

- ¿Cómo así? - Camila preguntó. - ¿Me vas a decir que eres una infiltrada del gobierno para acabar con la corrupción de aquí? - Pregunto riendo bajito y Lauren suspiró.

- No, Camila. - Ella dijo riendo nerviosamente. - Y aunque fuese así  abandonaría esa misión de mierda y tendría una vida contigo afuera. - Hablo

- ¿Y entonces?

- Confío en ti, pero tienes que prometerme que no le dirás nada a nadie, por favor. - Ella pidió y Camila se asintió frenéticamente, sintiendo la curiosidad aflorar en su piel a través de los poros de su cuerpo.

- Lo prometo. - Camila habló y Lauren asintió.

- Bueno, cuando entré aquí estaba devastada por el miedo de que mi abuelo me odiara. - Ella empezó. - Pasé días y días de pánico con frases inapropiadas de reclusas y cuando pensé que no podía empeorar, me avisaron que mi abuelo había fallecido. - Los ojos marrones se abrieron ligeramente antes de que la menor hiciera una mueca.

-Cielos, debe haber sido un infierno. -Camila dijo y Lauren asintió.

- Pero tengo mucha suerte de que siempre haya ángeles en mi vida. - Ella dijo con una sonrisa triste en sus labios.

- ¿Qué quieres decir? - Camila pregunto confundida.

- Que la reclusa que estaba en mi celda se convirtió en mi amiga. - Camila paralizó su mirada en la de Lauren. Maggie había comentado sobre esa mujer con ella, si bien se acordaba.

- ¿Qué le pasó? - Lauren rió y la miró.

- Te lo dijeron, ¿No es así? - Camila se sonrojo levemente y asintió.

-Más o menos. -Confesó con una mueca y Lauren asintió.

- Bueno, su nombre era Donna y ella era la antigua líder. -Explicó. - Ella notaba la constante lucha que yo vivía con el acoso en este lugar y el día que aparecí con el ojo morado después de tres días en la detención, ella se enojó, después de todo nos habíamos hecho amigas.

- ¿Por qué fuiste a detención? - Camila preguntó curiosamente.

-No dejaría que me tocaran fácilmente y acabé peleando con una de ellas. Ambas fuimos a la detención.

- Puedo entender ese sentimiento. - Ella dijo y Lauren sonrió, humedeciendose los labios.

- Sí, todavía recuerdo que me dijiste que podía mandarte a mi "Amiga" a patearte el culo y aún así no te tocaría. - Lauren habló riendo.

-Lo gracioso es que hoy me aseguro de que me toques. -Camila dijo mordiendose el labio inferior y la mayor suspiró.

- No sé qué he hecho para merecerte, pero no me quejo en absoluto. - Lauren dijo y Camila la empujo para un beso rápido antes de mirarla con ansiedad.

- ¿Y después qué? -Preguntó curiosamente.

- Bueno, nos hicimos más y más cercanas y decidí decirle por qué había sido arrestada. En esa época Donna empezó a vomitar con frecuencia y a escupir sangre constantemente y yo siempre la ayudaba a lavarse la cara, llevándole comida, ¿sabes? -Preguntó retóricamente. -Después de recibir otra paliza al azar me dijo que tenía poco tiempo de vida. Tenía un cáncer avanzado y me confesó que fui la única que se preocupó por ella en todo su tiempo en prisión. - Lauren dijo, limpiándose la garganta. - Un día estábamos en el patio tomando sol y ella escupió sangre en una de sus tos. Fue todo muy rápido, y al siguiente me dijo que la golpeara.

Lauren miraba la pared con una mirada nostálgica, perdida en los recuerdos de infelicidad de aquella trágica semana.

- No acepté, pero me rogó y dijo que era por mi bien. Decidí empujarla suavemente, pero ella misma se lanzó con fuerza contra la pared y me empujó, diciéndome que fingiera que la golpeaba. Fue todo confuso y recuerdo haberla obedecido.

- ¿Así te convertiste en líder? -Camila preguntó.

-Aún no. Ella me pidió que la desafiara al día siguiente, pero yo no quería. Ella estaba débil y pálida, pero ella era terca. - Dijo y miro a su novia. -Así que conocí a Dinah, porque ese día Donna mandó a Dinah a buscar algunas medicinas para ella, pero cuando volvía escuchó la conversación y Donna la hizo jurar jamás contar nada a nadie.

- ¿Y hubo la falsa pelea ese día?

- Sí, la sangre que escupía hizo que todo pareciera más real y gritó que había perdido el puesto delante de casi todas. - Lauren habló antes de suspirar. - Hizo que todas me temieran y le pidió a una de sus chicas que me enseñara a pelear de verdad, porque a pesar de ser la nueva líder, y tener varias que estarían ahí para mí en el momento de la pelea, todavía podría necesitar luchar.

- No sé qué decir. - Camila dijo abismada y Lauren le dio un beso casto.

- Ella me pidió que nunca hablara con nadie, que no mostrara vulnerabilidad, que hablara como si no tuviera miedo de nadie y que nunca desmentiera un rumor sobre algo malo que hice. - Lauren dijo riendo con burla. - Esa semana ella murió y toda la prisión pensó que yo la maté en la celda mientras dormía. Estoy seguro de que fue idea suya. -Habló riendo tristemente. -Las únicas que saben de eso aquí dentro son tres personas, además de ti. - Camila la miró con anhelo.

- Normani y Dinah ya lo sé, pero ¿quién sería la otra? - Camila cuestionó y Lauren rió.

- No lo vas a creer.

- Odio esta mierda de suspenso. Lo has hecho desde que llegué. -Camila se quejó y cruzó los brazos, fingiendo fastidio. Lauren la jaló más hacia sus brazos y se rió con ganas.

- Cuando cariño, cosa hermosa. - Ella murmuró y Camila suspiró al sentir un beso de Lauren contra la piel de su cuello.

- Dímelo, cariño... - Camila pidió y Lauren asintió.

- Te diré todo lo que quieras. -Ella dijo sonriendo. Y ahí estaba ella otra vez, abriendo su corazón y su historia completamente para Camila. Bueno, no del todo, ella nunca hablaría del pequeño secreto que guardaba con Normani.

Presa Por Casualidad - Camren [Traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora