Cap 4

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TP Kitt

Espero se lleven mejor en la Univercidad....

Espero se lleven mejor en la Univercidad....

Espero se lleven mejor en la Univercidad.????

Es encerio!!!!

Esas malditas palabras han estado dando vueltas en mi mente hasta hora y aún sigo sin poder creerlo. Como carajos es que me pasa esto a mi?. No hace ni unos días en los que saltaba de la emoción porque finalmente mi plazo de un año aguantando a ese maldito niño finalmente llegaría a su final que ahora estaba totalmente deprimido en una face negra igual que un dibujo en un manga con una extraña y clara nube negra en mi cabeza pensando en que debería soportarlo durante 4 años más..

4 malditos años!!!!

Desde que lo conocí he tenido la mala costumbre de ir tachando los días de mi calendario esperando, añorando y ansiando la fecha estimada en que finalmente volvería a la facultad y ahora mi madre me había tirado una bomba lo suficientemente poderosa como para destruir todo mi mundo y mi serena y ansiada felicidad...

– Todo esto es tu culpa.

– Mía?? Como puedes culparme de todo a mi? Ni siquiera sé porqué comenzó todo esto! A no, espera si lo sé, tú fuiste quién lo inicio.

– Tu me golpeaste con la puerta!

– Oh por favor no te hagas! Tu iniciaste esto, así que asume tu responsabilidad.

Rebolee mis ojos por millonesima ves en el día mientras escuchaba las estúpidas respuestas por parte de Ming alegando que todo esto era mi culpa y puede que tenga razón. Pero no tiene toda la razón, el también es responsable. Si, yo fui el que inició todo esto al lanzarle ese reloj y no disculpandome pero el fue el que inició la guerra.

Ya había pasado una semana desde que mi madre me tiró esa bomba desagradable y ahora justo ahora estaba empacando mis maletas para irme a la facultad con la compania no felizmente a mi lado. Renegando cada cinco segundos porque el maldecia una y otra vez ante la decición de nuestros padres. Además de que el señorito se encontraba justo ahora a mi lado y lo único que ha estado haciendo es comportarse como un maldito bebé, sacando mi ropa de la maleta que yo aunque retorciéndome del dolor por tener que pasar mis días de libertad con su nada amada presencia, estaba preparando...

Por el amor de Dios! El algún día piensa madurar o tengo que contratar una niñera? O no cierto, yo soy la niñera.

Solte un pesado suspiro ya resignado en que Ming no se iba a comportar y aceptando que mi vida prácticamente ya estaba arruinada. El maldito lo único que sabe bien es como hacer de mi vida un maldito infierno y ahora eso lo tenía que arrastrar hasta mi Univercidad. Lo único bueno en todo esto es que vamos a facultades diferente. Realmente eso lo agradezco porque en verdad no creo tener la capacidad necesaria para no matarlo si ambos cursaramos la misma carrera.

En algo que si debo coincidir con Ming y por el amor de Dios espero que nunca sepa que coicido en algo con el, es que nuestros padres están locos. Osea hemos estado aquí durante todo un maldito año, casi hemos destruido la casa y ahora nos mandan juntos a la misma univercidad?

Ya encerio! Quieren que destruyamos el lugar? O acaso ahí hay algo de valor en el terreno que mandan al equipo de demolición hasta aya?

Maldita sea..

Lo único bueno que me ha pasado durante toda esta semana es que el color de mi cuerpo y mi cabello casi están volviendo a la normalidad y eso es lo único que puedo agradecer porque por el resto de los dias aparte de que he revisado cada maldito rincón a la espera de alguna venganza, también he tenido que aguantar a mi madre diciéndome que debo cuidar de Ming y que debo ser un buen hermano mayor.

Se podrán imaginar la sonrisa perversa que Ming me dió al escuchar esas palabras de la boca de mi madre y encima ella lo dijo frente a él. Sirviéndome claramente en bandeja de plata a la persona a la que más odio en el mundo.

Osea, madre estás loca?

Porque yo??!! Ni siquiera soy su hermano realmente. Acaso tengo cara de niñero?!

Y al parecer la respuesta a esa pregunta era un rotundo si, porque al instante que quise decir algo, "Negandome"ella rápidamente metió un parquesito a mi boca aprovechando la oportunidad de callarme.

Esa cosa engorda......

Ahora finalmente la fecha de partida había llegado. Y creanme cuando les digo que este es el día más triste de mi vida. Lo único bueno es que al menos Ming y yo no viajaremos juntos, pero debemos cumplir religiosamente con una regla, una maldita regla que según nuestros padres ayudará a reforzar nuestra unión y esa es que al menos una vez al día ambos compartamos un almuerzo o cena o lo que sea pero que pasemos tiempo juntos.

Tiempo juntos?

Tiempo juntos!!!!

Por el amor de Dios!

No!!!!!!

Si, lo sé, podríamos tranquilamente decir que si nos reunimos y no vernos, pero ahí está la trampa. Si no hubiera una, claramente no estaría retorciéndome a cada momento. Resulta que nuestros padres no son ningunos idiotas porque sabiendo como somos dijieron que debemos comprobar y mandar pruebas de que estamos cumpliendo con lo que nos dijieron y para eso debemos mandar una foto de ambos sonriendo en nuestro "tiempo de calidad"

Incalidad diría yo.

Se podran imaginar mi expresión en ese momento ante esas estúpidas palabras. Como si no fuera suficiente que me obliguen a pasar mis gloriosos días de "libertad" lejos de Ming en la facultad que ahora, ademas de que habían arruinado mi vida, también debía pasar tiempo con la persona que claramente es mi dolor en el tracero.

Que parte de la oración lejos de Ming, no entendieron.?

Acaso hablo en un idioma diferente?

Acaso mi palabra no vale nada?

En este mismo momento me preguntó que país traiciones en mi otra vida para merecer semejante castigo??

Seguro fue una muy grande.

– Muy bien, ya están listos?

Mire con mi mejor cara de póker a mi madre mientras bajaba junto a Ming a pasos lentos por la escalera hasta llegar hasta ella y su esposo que nos esperaban con una enormes sonrisa llenas de ansias y al parecer una emoción desmedida por nuestra partida..

– Kitt, no olvides lo que hablamos cariño.

Claro, como olvidarlo...

Asentí levemente ante sus palabras fingiendo una sonrisa.

– Ming, hijo no mates a tu hermano

– No prometo nada!

Yo tampoco....

Esto Es La GuerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora