Capítulo 19: "Fuego"

35 2 4
                                    

Domingo, 16 de octubre del 2016

La noche cayó rápidamente, hoy había sido un día de largo ensayo con los muchachos. Al fin nos habíamos puesto de acuerdo y estábamos trabajando en aprender y mejorar muchas cosas. Papá había vuelto a viajar pero prometió volver la semana que viene, yo espero que lo haga...

-¡Alex! ¿Cómo vas con la cena?- pregunto Marcus desde la sala y yo, desde el pasillo de arriba, lo escuché.

-Ah... Había olvidado que era mi turno- digo lo suficientemente alto para que me escuche -Ya la hago-

Aprendí a hacer cosas sencillas en la cocina desde que cumplí 8, pues mi mamá nos enseñaba y nos hizo un cronograma para ayudar en la casa, solo que a esa edad no tenía permiso de encender la cocina sin supervisión. Dos meses antes de cumplir 10 mamá murió y mi tía Vi se encargó de cuidarnos por mucho tiempo, así que mi tío aprovecho la oportunidad de enseñarnos algo de cocina a mi hermano y a mi. Yo era el más pequeño pero mi tío siempre me ayudó a superarme a mi mismo, aunque no puedo negar que era un profesor muy estricto y agotador. Supongo que siempre ha querido que me quedé trabajando toda mi vida en el restaurant, después de todo es un negocio de la familia. Aunque es de ese lado de la familia...

Después del genial espectáculo en la fiesta de mi Abuela no estaba seguro de que había hecho bien y que había hecho mal. Mi hermano apoyaba la idea de no hablar más del tema, pero a papá me daba miedo contarle lo que pasó. Ella rompió todo lazo con mi madre cuando ella y mi papá se casaron, su casa es muy grande y aún así no hubo espacio para mi madre solo por haber salido embarazada a los 17 años. Creo que es la única abuela que no se alegró de tener nietos, ni siquiera cuando los vio nacer...

Mamá era feliz con nosotros y yo no necesito saber nada más que eso, ella decidió estar con sus hijos y el hombre que amó sin importar las consecuencias. Mi abuela fue quien decidió alejarla. Mi tío Hugo y sus hijos son los únicos que comparten con nosotros, y jamás nos han invitado a todos a una "reunión familiar" o un cumpleaños, a menos que sea en el restaurant y la Sra. Anairá no vaya a ir.

Una vez que terminamos de cenar Marcus dijo que debía ir a estudiar y que estaría en la biblioteca. Yo subí a mi habitación, prendí mi laptop y me distraje viendo Parasite, un anime que hasta ahora me estaba gustando mucho. Leo dice que se parece mucho a Tokyo Ghoul pero la personalidad de Shinichi es muy diferente a la de Kaneki. El tiempo pasó volando y ya me estaba dando mucho sueño, así que apagué la computadora y me heché a dormir.

***

Desperté acostado en el asfalto a mitad de la carretera de una ciudad muy desierta. Olía a humo y al levantarme me di cuenta que todo estaba como si una guerra hubo acabado con todo antes que yo despertara. Era una ciudad totalmente destruida...

Caminé viendo los edificios en ruinas con los vidrios rotos y algunos carros acabados y abandonados en la carretera. Vi mi reflejo en uno de los ventanales que no estaba tan roto y me encontré a mi mismo usando una camiseta negra y atrás de la espalda tenía un arco, juro que si lo traía desde que llegué no lo había sentido en mi espalda hasta ahora.

Me fijé mejor en mi imagen y me recordó a un personaje salido de una película de acción.

Genial, ahora soy un vengador

Ya nada tenía sentido para mí, primero militar, después parecía un explorador (o cazador) y ahora un vengador. Rodé los ojos y seguí mi camino. Tendría que aprender a usar este arco, el problema es que solo tengo 6 flechas y no puedo desperdiciarlas, debo usarlas todas contra el elemento.

Me comenzaba a preguntar por qué después de agua Sther es la primera en encontrarse con el elemento. La inseguridad de no saber si ella está bien produce una incertidumbre desastrosa en mi interior y de verdad quisiera que ambos aparecieramos juntos en este juego.

El Juego De Los ElementosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora