Nuestro hilo rojo. [✔]

Capítulo 19

Con lentitud abro los ojos, me doy cuenta que aun es de noche, intento moverme, pero siento un fuerte agarre alrededor de mi cintura que me impide moverme con mas libertad. Sasuke me abraza con mucha fuerza a pesar de estar dormido. Su rostro está hundido entre mi cabello y mi nuca.

—Sasuke, no me voy a ir —digo entre el sueño.

—No voy arriesgarme—me atrajo más a su cuerpo.

Aun siendo prisionera de su agarre me giro hasta quedar frente a él. Verlo recién levantado era como ver a un Ángel, el cabello desordenado y su rostro tan tranquilo, parpadeando lento con la guardia baja, con una mirada tranquila y sus ojos negros no intimidan para nada.

Nos abrazamos, Sasuke se acurruco en mi pecho, me tome el tiempo de disfrutarlo, acaricie su perfecto y sedoso cabello. ¿Cómo conseguía tenerlo tan bien cuidado? Soltó un largo suspiro.

—Hace años que no sentía tanta paz—. Sonreí al escucharlo. Y pensé, yo tampoco había sentido tanta paz antes—me quiero quedar aquí siempre.

—Eso es imposible —gruño algo decepcionado. Después ya no dijo nada más, hasta que se quedó de nuevo dormido, su respiración se volvió lenta y sincronizada con la mía.

Anoche no había pasado nada más que lo del baño, admito que creí que Sasuke desearía más que eso, pero no lo intento y eso tiene desconcertada, pensativa. Él estaba actuando diferente, cuando estábamos en la ciudad solo quería llevarme a la cama, pero aquí que tiene más posibilidades de que acceda, él ni siquiera lo intenta.

Por otro lado, Sasuke tiene razón, la ultima vez que estuvimos aquí todo era paz, nuestra relación era muy hermosa. Yo sonreía todo el tiempo y el pocas veces sonreía, pero cuando lo hacía, era una sonrisa genuina. Ahora somos dos adultos cansados, llenos de problemas, con una hermosa hija y con muchos inconvenientes para estar unidos.

Con Sasuke profundamente dormido pude liberarme de su feroz agarre, no es como si no lo soportara, pero no estoy del todo tranquila. Mi hija se quedó con su abuela, no dudó que ella la cuide bien, pero temo por el viejo Uchiha y la inestable de la pelirroja. Siempre pienso en cosas ridículas pero esa pregunta en específico ¿el viejo Uchiha sería capaz de hacerle daño a su propia nieta?

Me levanté de la cama llena de dudas y miedo, pensamientos malos y negativos estaban saturando mi mente. Sacudí mi cabeza, estoy segura que mi hija está bien, pero como su madre me es imposible no tener miedos, sobre todo porque jamás no hemos separado antes. La extraño mucho.

Después de estar sentada, mirando a la nada y mirando a Sasuke de vez en cuando, decido regresar a la cama. Aún era de madrugada, afuera estaba oscuro así que no había mucho que hacer.